viernes, 22 noviembre 2024

Vox niega la trama de los bebés robados: es un «invento»

Vox ha negado durante el Pleno del Congreso, la trama de bebés robados en España que, según ha explicado su diputada Rocío de Meer, es un «invento» de la «izquierda social-comunista». Para el PSOE, por su parte, esta postura de los de Santiago Abascal se debe a que rinden «pleitesía» al franquismo.

El Pleno de la Cámara ha debatido este martes la toma en consideración de la proposición de ley de bebés robados, por la que se reclaman medidas para que sus víctimas puedan ser reparadas y para que se facilite la investigación de estos casos. Se trata de una iniciativa que nace de un texto redactado por la Coordinadora Estatal de Apoyo a la Querella Argentina (CeAqua), y que han firmado todos los grupos parlamentarios a excepción de PP y Vox, aunque los ‘populares’ han mostrado su apoyo a la iniciativa.

Así, el texto ha sido defendido por PSOE, Esquerra Republicana (ERC), Más País, BNG, Junts per Catalunya (JxCat) y EH Bildu que, en la mayoría de sus intervenciones se han dirigido a Vox para reprocharles su rechazo a estas víctimas.

Los socialistas, a través de su portavoz Antonio Hurtado, han lamentado la presencia de una «ultraderecha negacionista» en la Cámara que, a su juicio, quiere «blanquear el franquismo» negando la «persecución y la represión» que vivió España «por razones políticas, ideológicas y de género» durante la dictadura.

Mientras, el diputado de ERC, Gabriel Rufian, ha denunciado esta red que, según ha apuntado, formaban «hospitales, Iglesia e instituciones franquistas y no tan franquistas» y ha pedido a los grupos parlamentarios que dejen «durante un rato» las «miserias partidistas y las diferencias ideológicas» para votar a favor de la proposición de ley.

Desde el BNG, su diputado Nestor Rego, ha reclamado el derecho de las víctimas a tener acceso a los documentos, a que se les quiten las trabas que dificultan el conocimiento de su pasado y a tener una reparación, identificando a los responsables y la representante de Más País, Inés Sabanés, ha recordado a Vox que se trata de un tema de familias, algo que, a su juicio, les «debería conmover». La diputada ha usado su intervención para pedir «perdón» a las víctimas de esta trama «por llegar tarde» y les ha prometido que desde las instituciones «no se volverá a mirar para otro lado».

VERDAD, JUSTICIA Y REPARACIÓN

Su homólogo de Junts, Jaume Alonso-Cuevillas, por su parte, ha lamentado que 42 años después de que se aprobara la Constitución, estas personas sigan sin ser compensadas y ha indicado que esta norma no debería salir adelante «por unanimidad», sino que debería «votarse por asentimiento y con un gran aplauso».

Del mismo modo, el portavoz de EH Bildu, Iñaki Ruiz de Pinedo, ha señalado que «todas las víctimas» necesitan «verdad, justicia y reparación» y cree que es hora de que el Gobierno y el Parlamento pongan en marcha esta ley, tanto por los niños que fueron robados como «por sus madres y sus familias. «Les debemos una perspectiva integral reparadora con rango de ley», ha apuntado.

Vox, por su parte, se ha dirigido a estos partidos como «Bildu y sus socios» y se ha dirigido en más de una ocasión al partido vasco para señalar que «no han jurado las leyes» españolas, y que no piden el mismo respeto para las víctimas de ETA. «Hay partidos que son el de Otegi y nosotros el de Ortega Lara», ha apuntado en su intervención, en la que también ha mostrado una foto de las gemelas sobrinas del diputado José Ignacio Alcaraz, asesinadas en un atentado. «Me gustaría que tuvieran el mismo tacto con las víctimas del terrorismo», ha declardo.

La diputada de Vox ha asegurado que lo que denuncia el resto de la Cámara son «secuestros de niños» y «tráfico de menores», pero ha negado que existiera una red como la que ellos describen. «La verdad es que aquí no hay nada de lo que plantean», ha declarado. A su juicio, esta trama es una invención de la izquierda en su intención de «sentar a la historia en el banquillo». En concreto, les ha acusado de usar «supuestos sucesos a golpe de ley» para «imponer a los españoles» su ideología.

De Meer asegura que sólo se han realizado 2.000 denuncias sobre estos casos que, que «sólo 552» se han admitido a trámite y que en el único caso que ha llegado a los juzgados la genética ha determinado que no era cierto. «Quieren imponernos una visión sectaria para que sea dogma de fe», ha insistido. A su juicio, la solución para estas familias es «dejar de hacer dogmas de fe sobre la historia en el Congreso» y «legislar en contra del tráfico de niños».

Tras la intervención de Vox, el PSOE le ha acusado de «hipócrita» y le ha llamado a tener humanidad en este ceso. Para el diputado socialista, Vox está en contra de esta norma porque le «duele» ver a la Iglesia implicada y por su «obsesión con el comunismo y con el gen rojo». «No sean tan duros con los débiles», les ha pedido Hurtado, para después reprocharles que rindan «pleitesía» al franquismo.

UNA INTERVENCIÓN «VERGONZOSA»

«Me ha ahorrado ver la cuarta temporada ‘El cuento de la criada’ con su intervención», ha asegurado Rufián, que también ha afeado a Vox que use el «comodín» de ETA en este debate. «No tiene calificativo», ha apuntado. El portavoz parlamentario de ERC ha reconocido que él sí quiere «sentar al franquismo en el banquillo» y ha lamentado que mueran «torturadores fascistas con las medallas puestas». «Si la izquierda fuera un poco más valiente ustedes no serían cincuenta y pico, serían muchos menos», ha declarado.

EH Bildu, por su parte, ha asegurado que nadie se ha inventado la existencia de unos niños robados ni tampoco que haya madres e hijos buscándose después de tantos años. Según ha explicado su diputado, la ley que se debate en el Congreso pide que haya miles de madres e hijos se puedan encontrar y apunta que si alguien está en contra de esto es «porque se siente culpable en algún modo».

Tanto Unidas Podemos, como CUP han tachado la intervención de De Meer, como una de las más «vergonzosas» escuchadas en el Hemiciclo. «Por caridad cristiana, ojalá las víctima no hayan escuchado el discurso de sus señorías de Vox», ha declarado la diputada morada Martina Velarde, que ha tachado a su homóloga de Vox de tener una «crueldad impresionante». El representante de la formación independentista ha denunciado, además, el «alegre cinismo» de los de Abascal. Cree que el partido «vive mal con la herencia del franquismo y como se está hablando» de este periodo.

El portavoz del PP en este debate, Oscar Clavell, ha adelantado su voto a favor del texto, aunque ha precisado que su postura va en apoyo a las asociaciones de víctimas que han puesto esta ley en manos del Parlamento. Aunque ha reconocido que algunos partidos han incluido en el texto términos con «fines políticos y propagandísticos», ha llamado en su discurso ha «dejar de lado las diferencias ideológicas» existentes y ponerse del lado de las «personas que sufrieron y los siguen haciendo» por este tema.

Para el PNV, el desconocimiento de la tragedia, que contabiliza a las víctimas entres las 30.000 y las 300.000, determina la «dimensión exacta de la tragedia» que ha supuesto esta trama de bebés robados. Su diputado Mikel Legarda, recuerda que su dolor se acrecienta ante la falta de medios que sufren para poder demostrar su situación y las dificultades que supone el paso del tiempo para lograr acceder a la verdad.

Ciudadanos, además, considera este como uno de los episodios «más desagradables de la historia del país» y reprocha a Vox que se fije más en quién firma la iniciativa que en su contenido. «Aborda un asunto humano», le ha recordado la diputada naranja Sara Giménez, para señalar que se trata de violaciones de derechos humanos y crímenes de lesa humanidad.