El excomisario José Manuel Villarejo desveló a María Dolores de Cospedal, entonces secretaria general del Partido Popular, que la Policía contaba con un topo en su sede central de la calle Génova, en plena investigación del caso Gürtel. En la reunión, en la que también está presente el marido de Cospedal, Ignacio López Hierro, Villarejo se ofrece para descubrir su identidad, de la que incluso ofrece algunas pistas.
Durante la conversación sobre la información que tiene el excomisario sobre el caso Gürtel y las maniobras para perjudicar la investigación, Villarejo desvela que la Policía cuenta con “dos o tres informadores” en Valencia, donde se desarrolla una de las ramas de la investigación del caso y que hay otro en la sede de Génova, lo que sorprende a María Dolores de Cospedal.
Villarejo: Entonces van a muerte a por Agag (Alejandro Agag, yerno del expresidente José María Aznar), se les desmonta, detrás de la operación de Valencia tienen dos o tres informadores. Tienen un informador aquí en Génova, que no sé quién es.
Cospedal: ¿Tienen un informador?
V: Tienen un informador que no es de alto nivel, pero habla con gente de cierto nivel. Le han puesto de nombre de guerra… me acordaré. Es una persona que habla directamente con un jefe de sección, que es un inspector jefe, que no sé quién es. Voy a intentarlo, intentar, digamos, detectar quién es. Alguien que les da por aquí, por aquí, que además es de Génova. Total, que..
C: ¿No puede ser el gerente? (Cristóbal Páez en ese momento)
V: No creo. El gerente tiene mucha entidad ¿no?
C: No. Un gerente siempre es desconocido. Bueno, da igual.
V: Yo no lo sé. El nombre de guerra me voy a enterar. Es como XXX… XXX (MONCLOA.COM mantiene el anonimato de este agente por razones de seguridad), un nombre así. Muy habitual, pero vamos, tienen a un tipo aquí dentro.
No es la única información que Villarejo ofrece a la dirigente del Partido Popular sobre informantes clandestinos. En la misma reunión, un poco antes de informarles de la existencia del topo de la Policía, el excomisario habla de un miembro del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) en el Ayuntamiento madrileño de Boadilla del Monte, uno de los municipios con mayor actividad de la trama Gürtel.
Villarejo informa a Cospedal y su marido lo que le cuenta el entonces alcalde de Boadilla, Arturo González Panero, el albondiguilla, uno de los principales implicados en la trama. El excomisario y él mantenían ya una relación porque Villarejo tiene su residencia en esa localidad y, como él mismo relata, “tenemos una serie de cosas en común”, que no especifica.
El excomisario transmite lo que le cuenta el alcalde: “El Bárcenas me tiene hasta los huevos, me llama, me amenaza, me tal”. A continuación el excomisario cuenta cómo el alcalde de Boadilla le empieza a hablar de “un tipo que trabaja en Iberia” y que, según Villarejo, es del CNI. «Le digo a Ignacio (López del Hierro) que es del CNI –dice el mando policial– que lo detectamos, que lo habéis visto vosotros clarísimo».
El alcalde González Panero se había quejado a Villarejo que esta persona, que trabaja en Iberia, “me la ha metido con Granados, me la he metido con cual…” Se trataría de Francisco Sánchez Arranz, ya fallecido, que llegó a ser concejal de Boadilla, al que apodaban “Paco Iberia” y que fue alto directivo de esta compañía.
La tarjeta de Sánchez Arranz se encontró en uno de los registros realizados a Francisco Correa, donde constaba su puesto de director de Gabinete de Presidencia y Protocolo de Iberia. Sánchez Arranz llegó a estar imputado por su presunta relación con una recalificación en el municipio madrileño.
En el sumario del caso Gürtel aparece su nombre relacionado con una disputa entre dos facciones políticas del PP, que luchaban por conseguir una adjudicación pública para las empresas que prefería cada parte. Una denuncia anónima que aparece en el citado sumario relata que el albondiguilla no quiso incluir a Sánchez Arranz en las listas electorales.
COMISIONES DE ADJUDICACIONES EN BOADILLA
La razón de este enfrentamiento es que Sánchez Arranz presuntamente habría negociado las comisiones de esta adjudicación y un reparto entre las facciones del PP con la que no estuvo de acuerdo el alcalde González Panero. Sánchez Arranz habría dicho sobre este reparto que “aquí, o follamos todos, o rompo la muñeca”.
En un principio, el albondiguilla no incluyó a Sánchez Arranz en las listas de las elecciones de 2007. Sin embargo, las presiones de Francisco Granados (ex número dos de Esperanza Aguirre en la Comunidad de Madrid y hoy en prisión por el caso Púnica), así como de Luis Bárcenas, le obligaron a incluirlo finalmente.