sábado, 23 noviembre 2024

Los policías del espionaje a Podemos: “Tengo un mandato del ministro y del presidente”

  • Los comisarios García Catalán y Fuentes Gago se reunieron con el exnúmero tres de Venezuela en Nueva York.
  • La reunión fue en 2016 en el consulado español y la conversación fue grabada en secreto por los policías.
  • Ofrecieron a Rafael Isea una "nueva vida" en España para él y su familia si daba datos sobre los pagos del chavismo a Podemos.
  • Un enviado del director de la Policía ofreció a Rafael Isea, exministro de Finanzas de Hugo Chávez, identidades nuevas, documentación y hasta “una nueva vida” en España para todas las personas que él designara a cambio de su declaración sobre los pagos del régimen venezolano a Podemos.

    El inspector José Ángel Fuentes Gago, entonces agregado en la Embajada en Países Bajos, aseguró al político venezolano y su abogado que tenía “un mandato” que emanaba del ministro del Interior (entonces Jorge Fernández Díaz) y del presidente del Gobierno (Mariano Rajoy), según desvela un audio que tiene en exclusiva MONCLOA.COM.

    La Policía grabó en secreto y clandestinamente a Isea y su abogado, mientras éste valoraba las condiciones y detalles de su declaración sobre los pagos del régimen de Chávez a Podemos. En esta negociación, que tuvo lugar en el consulado de España en Nueva York, el 12 de abril de 2016, estaban el comisario José Manuel García Catalán, jefe de la Brigada de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF), el citado inspector-jefe Fuentes Gago; otra inspectora de la UDEF, llamada Silvia, además de los venezolanos Rafael Isea y su abogado, Martín Rodil.

    Aunque ya se conocían los detalles del encuentro, así como la declaración que Isea dejó por escrito como testigo protegido -desvelada por ABC-, lo que no se sabía es que la conversación previa de una hora entre todos ellos en la legación española fue grabada de forma subrepticia.

    Fuentes Gago
    El inspector José Ángel Fuentes Gago en una comparecencia en el Congreso de los Diputados.

    El antiguo ministro de Hugo Chávez debía hacer una declaración ante la Policía sobre “un punto de cuenta” (un pago) de siete millones de euros a la fundación CEPS (origen político de Podemos) a cambio de lo que llamaron “informes huecos”. Pero su temor era su familia, que seguía en Venezuela, en condiciones de acoso y riesgo para su vida por parte del régimen de Chávez. Por eso, conseguir protección de la Policía española ante las represalias era fundamental para él.

    En el momento clave de la negociación en el consulado español de Nueva York, cuando los venezolanos parecía que iban a postergar la declaración a otro día, tomó la palabra el inspector-jefe José Ángel Fuentes Gago.

     

    -Fuentes Gago: “Yo he hablado con el ministro del Interior español y el ministro del Interior español habló con el presidente (del Gobierno) español. Yo solo tengo un mandato aquí, o sea, acompañar a estas personas y decirle a usted que me diga los nombres de las personas que quiere que documentemos en España y que le demos una nueva identidad o una nueva vida, la que tienen ustedes y les protejamos. Eso es mi compromiso. Yo vengo aquí con ese mandato. Usted me lo dice y lo hacemos”.

    Las condiciones que propone Fuentes Gago en esta parte de le conversación distan bastante de la mecánica que estaba proponiendo el comisario jefe José Manuel García Catalán. El jefe interino de la Brigada de Delincuencia Económica y Fiscal proponía a Isea pasar al programa de protección de testigos, previo trámite y autorización por el juez, con el visto bueno de la Fiscalía.

    Rafael Isea
    El exministro de Finanzas de Hugo Chávez, Rafael Isea, antes de exiliarse en Estados Unidos.

    La información de la que dispone Isea es muy importante en aquellos momentos, abril de 2016, al parecer, para el Ejecutivo de Rajoy, que se encontraba en funciones en pleno bloqueo político y con Podemos amenazando al PSOE con el sorpasso en las encuestas. En poco más dos meses se celebrarían nuevas elecciones. Tanto como para que el inspector Fuentes Gago acuda “con el mandato” de ministro y presidente.

    Rafael Isea era en aquel momento el más importante disidente del régimen venezolano que instauró Hugo Chávez. Exmilitar, compañero de armas de Chávez, logró su máximo apogeo como ministro de Finanzas del Gobierno de Venezuela entre 2008 y 2012. Se trataba de uno de los hombres de la máxima confianza del presidente venezolano. Tan cercano, que fue su asistente durante cuatro años. Gobernador del Estado de Aragua, cuando cesó en este cargo ocupó otro puesto clave en la posible financiación de Podemos. Fue el presidente del Banco Alba (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América) hasta que poco después de su destitución, huyó a Estados Unidos.

    «Yo he hablado con el ministro del Interior español y el ministro del Interior español habló con el presidente español»

    Tanto Isea como su abogado, Martín Rodil, muestran su preocupación por la familia del exministro si trasciende su colaboración con la Justicia española en este asunto. Relatan las enormes dificultades que están atravesando los miembros de la familia que siguen en Venezuela, por la represión que asegura que mantiene contra ellos su sustituto como gobernador, Tarek El Aissami.

    La tramitación para poder ser testigo protegido que expone el comisario García Catalán parece bastante complicada y con cautelas: “Si todo funciona correctamente y en teoría”, llega a decir el policía español. Todo esto, más el miedo a una filtración a la prensa, enfría los ánimos de los venezolanos, que amagan con dejar la declaración para otro día.

    El miedo a represalias en Venezuela y a una filtración a la prensa enfría los ánimos del ex ministro venezolano

    Es cuando Fuentes Gago se desmarca de las palabras del comisario García Catalán y expone las garantías que, asegura, proceden de un mandato de las más altas instancias políticas españolas: el ministro Fernández Díaz y el presidente Rajoy. José Ángel Fuentes Gago da incluso explicaciones sobre la posible vía de salida de la familia de Isea –por medio de Argentina– y su posterior viaje a España.

     

    -Fuentes Gago: “Así de claro se lo digo, de verdad, otra cosa no le puedo decir. Eso se lo digo, el cómo esas personas tienen que salir o no, no me compete a mi, pero yo le digo a usted que la Policía española es muy buena. Nosotros tenemos en Venezuela a gente buena. Tenemos un comisario ahora allí que ha estado muchos años en la lucha contra el terrorismo de ETA y se las sabe todas, y pueden salir con él, pueden ir a Argentina, donde sea, y desde allí les hacemos volar a España, eso al máximo nivel está garantizado, se lo digo a usted, ¿eh?”.

    El inspector-jefe Fuentes Gago está actualmente imputado por el juez Manuel García-Castellón por la Operación ‘Kitchen’, las maniobras para robar documentos comprometedores a Luis Bárcenas. Este funcionario fue adjunto al Director Operativo (DAO) de la Policía, Eugenio Pino.

    Posteriormente fue destinado a la Embajada de España en los Países Bajos. Se trataba de uno de los hombres de confianza de Pino, junto al también inspector-jefe Bonifacio Díaz Sevillano, hasta el punto que fue el policía que firmó el informe interno sobre José Manuel Villarejo que encargó Jorge Fernández Díaz y que exoneró de toda culpa al agente encubierto hoy en prisión preventiva.

    Se considera a estos agentes como el núcleo de la llamada “policía del PP”, envueltos en numerosas maniobras de las que se orquestaron desde el Ministerio del Interior que dirigía Jorge Fernández Díaz.