Francisco Martínez, el secretario de Estado de Seguridad con Jorge Fernández Díaz, ve el desfile de sus exsubordinados por el caso ‘Kitchen’ mientras el PP mantiene el suspense sobre si le ofrecerá o no integrar un puesto fiable en sus candidaturas que le permita mantener su aforamiento a partir del 28 de abril.
Martínez no ha recibido a fecha de hoy, según ha confirmado MONCLOA.COM con fuentes conocedoras de su situación, ninguna oferta del partido sobre su futuro ni tampoco un aviso de que se no cuente con él. Por todo ello, mientras avanza el reloj del final de tal aforamiento, el exsecretario de Estado sopesa posibilidades laborales al margen de la política pero sin haber tomado ninguna decisión hasta que no conozca las intenciones del partido.
En ese posible escenario, según ha dibujado en privado, se encuentra su regreso a su puesto de letrado de las Cortes. Pero el hombre de confianza de Jorge Fernández Díaz no se ve agobiado ni por esta incertidumbre, que afecta a otros excargos y exdiputados del PP inmersos en igual mar de incógnitas por la precipitación de la cita electoral, ni tampoco por una posible pérdida de aforamiento porque, como jurista que es y manifiesta a sus amigos, no ve ventaja alguna en ser investigado por el Supremo en lugar de por el juez Manuel García Castellón, titular del juzgado número 6 de la Audiencia Nacional.
Por otro lado, ha manifestado a sus personas de confianza que no tiene ningún temor sobre la causa ‘Kitchen’ por entender que su actuación en el Ministerio del Interior siempre se ajustó a la legalidad y puede justificar la rectitud de cada paso que dio. Martínez logró el acta de diputado en los últimos comicios de 2016 dentro de la lista del PP por Madrid,
Por tanto, si no renueva escaño perderá su condición de aforado próximamente y quedará expuesto a ser citado como investigado en el ‘caso Kitchen’ que instruye García Castellón si, en virtud de alguna declaración o nuevos indicios, así lo obligara. En todo caso, no será a partir del 5 de marzo, cuando se disuelvan las Cortes, sino en mayo porque el diputado del PP forma parte de la Diputación Permanente como vocal suplente.
La Diputación Permanente es una especie de ‘mini’ Congreso que funciona desde la disolución del Parlamento hasta la formación del nuevo. La Carta Magna establece que la constitución de las nuevas Cortes se tiene que producir antes de que pasen 25 días desde las elecciones, así que el exnúmero dos de Interior estará ‘protegido’ por el aforamiento hasta mediados de mayo.
Martínez comparte este privilegio con Jorge Fernández Díaz y el exdirector de la Policía Ignacio Cosidó, los otros responsables políticos que están bajo la lupa de ‘Kitchen’, la supuesta trama de espionaje a Luis Bárcenas en beneficio del PP y que habría sido pagada con fondos reservados que autorizó la cúpula de Interior durante el primer Gobierno de Mariano Rajoy.
Sin embargo, a diferencia de las dudas hoy suscitadas sobre el futuro de Martínez, es muy posible que Fernández Díaz y Cosidó sigan como aforados tras el 28-A: el exministro pelea por un hueco en las listas del PP al Congreso o a las europeas, mientras que Cosidó será incluido con toda probabilidad en la papeleta al Senado, donde ahora ejerce de portavoz a los ‘populares’. El exjefe de la Policía estuvo al lado de Pablo Casado desde el inicio de las primarias del PP y sigue siendo una persona de la máxima confianza del presidente de los ‘populares’.
COSIDÓ APUNTA «DIRECTAMENTE» A MARTÍNEZ
Cosidó, además, ha sido el único miembro de la cúpula policial que ha hablado de ‘Kitchen’ y lo ha hecho para desvincularse. Después de que El Mundo publicase que algunos policías que participaron en la operación contra Bárcenas se quedaron con 600.000 euros de fondos reservados, el portavoz del PP en el Senado responsabilizó «directamente» de la gestión de los fondos reservados al entonces secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez.
«Como director de la Policía tenía múltiples competencias dirigiendo todos los planes estratégicos y políticos y la lucha contra el crimen. Pero entre las competencias atribuidas al director no estaba ni el control ni la gestión de los fondos reservados que es algo que realizaba directamente la Secretaría de Estado de Seguridad», aseguró Cosidó a principios de febrero.
El juez García Castellón ya ha imputado en ‘Kitchen’ a todos los jefes policiales de la denominada ‘policía patriótica’ del PP. La pasada semana amplió el radio de investigación al citar como investigados a varios subordinados directos del que fuera director Adjunto de la Policía Eugenio Pino, así como del que fue jefe de Asuntos Internos, el comisario Marcelino Martín-Blas.
La nueva batería de citaciones de miembros de la estructura policial creada en la Dirección Adjunta Operativa (DAO) de la Policía durante el primer Gobierno de Mariano Rajoy, siendo ministro del Interior Jorge Fernández Díaz, arrancó el pasado jueves con la comparecencia como testigos de Enrique Barón, excomisario general de Información, y Manuel Morocho, inspector de la Policía encargado en origen de investigar el ‘caso Gürtel’ y la ‘caja B del PP’ que controlaba Bárcenas.
Ambos ocupaban puestos de responsabilidad en la Policía bajo mando de Eugenio Pino, que ya está investigado en la causa igual que el ex responsable de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) Enrique García Castaño, por su posible implicación en esa operación costeada con fondos reservados, no judicializada, que habría tenido por objeto sustraer documentación del PP a Bárcenas y en la que habría participado el comisario Villarejo.
TODA LA CÚPULA POLICIAL DE INTERIOR EN KITCHEN
A la lista de investigados en esta pieza secreta de la causa se sumaron, además, los inspectores jefe José Ángel Fuentes Gago y Bonifacio Díaz Sevillano, ambos adjuntos a la DAO de Eugenio Pino; y el ex comisario jefe de la Unidad de Asuntos Internos Marcelino Martín-Blas, enfrentado públicamente con Villarejo.
Pero además, el juez citó como investigado al que era jefe de Seguimientos de la UCAO en el 2013, cuando comenzó el despliegue de la ‘operación Kitchen’, y que trabajaba directamente para Enrique García Castaño, alias ‘El Gordo’.
Ya en calidad de testigos, además de Barón, Morocho y el propio Bárcenas, que prestaron declaración en la Audiencia Nacional, el juez citó a otros dos subalternos de Pino, los dos comisarios que ejercían de secretarios generales de la DAO entre el 2013 y el 2015.
Asimismo, citará también como testigo a Miguel Ángel Bayo, un facultativo adscrito a la Policía al que fuentes de la investigación señalan por ser el encargado de recoger y gestionar los fondos reservados para la DAO.
Martínez tuvo trato con comisario José Manuel Villarejo cuando este último era adjunto al DAO que encabezaba Eugenio Pino. En el sumario del ‘caso Nicolás’ aparecieron, por ejemplo, varias llamadas telefónicas entre el entonces número dos de Interior y el policía encubierto hoy en prisión.