sábado, 23 noviembre 2024

Óscar Puente sale de la Ejecutiva Federal del PSOE tras el ‘MercedesGate’

Al actual alcalde de Valladolid, el socialista Óscar Puente, parece no afectarle el reciente escándalo del ‘MercedesGate’ y sigue yendo por libre y haciendo planes políticos. A pesar de que acaba de salir de la Ejecutiva, no lo hace como acto de contrición y responsabilidad política, sino como un paso más para presentarse a la Secretaría del PSOE en Valladolid.

Así lo confirmó este pasado martes en una rueda de prensa celebrada en la capital vallisoletana. Un puesto que espera conseguir en el próximo congreso previsto para diciembre. Por ello, y de acuerdo con los estatutos del partido, deja también su cargo de portavoz de la Ejecutiva Federal. El anuncio lo hizo en la sede provincial del partido y rodeado por seis de los secretarios generales de las comisiones ejecutivas del PSOE de Valladolid que ha habido desde el año 1982. Un apoyo local que no corresponde con el nacional de su partido. Sin embargo, a Óscar Puente no parece afectarle.

A LA CONQUISTA DE LA DIPUTACIÓN

Óscar Puente pretende así liderar la conquista de la Diputación de Valladolid desde una mayoría absoluta. Pero el paso que ha dado, si bien necesario para sus propósitos, también se puede ver en clave nacional, ya que de todas formas Pedro Sánchez va a acometer próximamente una remodelación de la Ejecutiva que le dejaría fuera junto con otros miembros actuales.

«EStá abriendo una nueva etapa y nuevo horizonte y mi sitio ahíno estaba ya tan claro»

El alcalde de Valladolid, como si de un jugador de ajedrez se tratara, se adelantó al movimiento de su jefe, y le anunció en una llamada personal su decisión y sus planes. «Ya lo había hablado con Adriana Lastra y Santos Cerdán. Pedro Sánchez estaba abierto a la decisión que tomara y le dije que había valorado que era más útil en mi tierra que en la Federal. Está abriendo una nueva etapa y nuevo horizonte y mi sitio ahí no estaba ya tan claro. Era más nítida la apuesta por el territorio. Lo ha respetado», explicaba el alcalde de Valladolid en su rueda de prensa de presentación de la candidatura.

ÓSCAR PUENTE VE OTRA REALIDAD

Con las palabras de Óscar Puente parece que no ha pasado nada tras el ‘MercedesGate’ y por ello Ferraz no da crédito a la actitud del alcalde socialista. No sólo no dimite o deja el partido, sino que se ve reforzado y por tanto legitimado para dar pasos adelante en su carrera política. Todo ello a pesar de estar siendo investigado por una presunta comisión de delito de cohecho y de utilizar en su tiempo libre coches de lujo propiedad de una empresa que ha conseguido adjudicarse contratos públicos. 

Todo surgió tras la denuncia del tuitero Alvise Pérez, que destapó este presunto delito y lo publicó en su cuenta de Twitter. En ella denuncia como el alcalde socialista se iba de vacaciones en un Mercedes AMG-G63 cuyo precio asciende a 173.000 euros, uno de los vehículos más caros de la marca alemana. Además, Alvise recordó que el primer edil vallisoletano está siendo investigado por cohecho, un delito vinculado al soborno de autoridades. El tuit generó en pocas horas medio millar de comentarios, casi 5.000 retuits y más de 7.000 ‘me gusta’. Puente tiene un sueldo de 84.000 euros brutos aproximados al año. El coche famoso cuesta más del doble de lo que cobra el alcalde en 12 meses.

Oscar Puente ha decidido poner en las manos de la Justicia este asunto. La Fiscalía de Valladolid ha presentado una querella por «amenazas y calumnias» dirigidas al tuitero que destapó este escándalo. «Está claro que en vacaciones no se hacen las mismas cosas que en el resto del año. Pero no tengo nada que esconder. Por supuesto, en la hora que cogí el maldito coche», apuntó el alcalde vallisoletano.

EL PSOE NACIONAL LE DA LA ESPALDA

El apoyo del partido en Valladolid a Óscar Puente contrasta con la falta del mismo en Madrid. Ningún peso pesado el PSOE le ha mostrado abiertamente o en público su apoyo. Desde Ferraz nadie se ha pronunciado en defensa del alcalde de Valladolid y desde la Moncloa mucho menos. 

Y es que la espada de Damocles del cohecho amenaza a Puente desde hace tiempo y el PSOE está harto de esperar las consecuencias de algo que no conoce. Y más tratándose de una persona como el alcalde de Valladolid, famosa por su actitud algo agresiva a nivel político.

Pero Óscar Puente no se da por aludido y está en pleno proceso de continuar con sus aspiraciones políticas, que van por ahora de la alcaldía de Valladolid, que ostenta desde 2015, hasta llegar a la cúpula de la formación en la provincia.

ÓSCAR PUENTE SE JUSTIFICÓ Y ES FIRME

El alcalde de Valladolid no sólo no asume responsabilidades o reconoce el error, más allá de arrepentirse solo porque le vieron y denunciaron, sino que considera que todo ello sólo busca su «muerte política» pero también civil, algo que no va a «consentir». Así se expresó Óscar Puente a mediados de agosto en una declaraciones recogidas por Europa Press, poco antes de visitar unas nuevas instalaciones juveniles.

Puente lamentó que todos los veranos «pase lo mismo», por lo que quiso lanzar una reflexión. «Cuando la oposición se centra en asuntos de carácter personal, de alguna manera lo que están tratando de dar a entender es que la gestión es magnífica. Nosotros estamos a la política de ciudad y ellos están a los temas personales y ahí siguen«, señaló en referencia al Grupo Popular. Todo ello lo calificó como «claramente inquisitorial».

Sin embargo, el propio Alvise Pérez ampliaba poco después del tuit la información, y la cosa no parecía algo personal: “He investigado la matrícula del Mercedes en donde te he cazado hoy. Está a nombre de ‘Bodegas y Viñedos Recoletas’, del grupo hospitalario ‘Recoletas’. Tu secretario particular (a dedo) fue el gerente de la empresa ¿Tienes factura? ¿Conoces el Código Penal?”.

APUNTA A VOX

Para Óscar Puente todo ello no es más que una persecución orquestada, de ahí que sus planes políticos como vemos no sólo no los interrumpa sino que los acelera, y todo ello bajo la mirada atenta y sorprendida del PSOE nacional. Pero el alcalde de Valladolid va más allá y apunta a las prácticas de «profesionales de la difamación» que además están detrás, como en el caso de Alvise, de Vox.

«Las barbaridades que yo he leído en estos días en las redes sociales no se las deseo a nadie. No ya sobre mi, sino sobre personas de mi entorno familiar y personal. Las barbaridades que se han dicho son verdaderamente una muestra de que el odio de alguna manera está calando en una parte de nuestra población. Y lo está haciendo fundamentalmente gracias a formaciones que viven del odio, del odio al diferente, del odio al inmigrante, del odio al político», reflexionó en las mismas declaraciones a Europa Press.