El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, ha defendido que «los jueces tienen que tener sensibilidad de país» y ha incidido en que aunque «cada vez hay más jueces vascos siguen siendo una minoría». «La juventud vasca lo sigue viendo como un poder en cierto modo ajeno al país y eso es malo», ha añadido.
En una entrevista concedida a El Correo, el representante jeltzale ha indicado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha sido «leal» con el PNV, aunque reconoce estar «muy decepcionado» con algunos ministerios y cuestiones como el Tren de Alta Velocidad.
Tras criticar que «llueve sobre mojado» después del auto del TSJPV sobre los aforos del fútbol, Esteban lamenta que «ni una sola de las resoluciones ha sido confirmada cuando medidas similares sí han recibido el visto bueno en otras comunidades autónomas», lo que cree que es «un poco sospechoso».
Por otro lado, advierte que, en lo que respecta a la renovación del Consejo General del Poder Judicial, se está dado «una pelea impúdica» que es «una vergüenza» y «la solución es complicada».
«Habría que intentar que convivieran sensibilidades de todo tipo, ponerse de acuerdo en los nombres y que fueran aceptables, más o menos, para todo el mundo. En otros países se ha avanzado por este camino. En España no porque se contempla como un brazo más del poder político», detalla.
En este contexto, recuerda que el Gobierno vasco acaba de publicar un informe sobre la erosión competencial, producida también mediante «las resoluciones jurisprudenciales» de tal forma que «uno ya no está seguro de si lo que pacta políticamente, el texto de una ley, quiere decir exactamente eso o va a ser reinterpretada».
Asimismo, dice ver un proceso de recentralización ya que incluso hay fuerzas políticas, como Podemos, «que lo tienen como bandera aunque luego hablen de autodeterminación». «No puede ser: o nos creemos la estructura constitucional o no. El PSOE lo mismo, muchas veces pide ser eficientes. Vale, sí, pero cada uno en nuestro ámbito», solicita.
Respecto a la propuesta del lehendakari de «recuperar la soberanía anterior a 1839» afirma que lo que dice Urkullu es que hasta 1839 había «formalmente una relación bilateral, hasta había aduanas en el Ebro» y apuesta así por «hacer un pacto que pueda entroncar con la Constitución española y que nos sirva para avanzar».
«Lo que pedimos es reconocimiento nacional, bilateralidad y un árbitro neutral. Si tenemos un conflicto sobre una competencia vamos a discutirlo. Y si no llegamos a un acuerdo, que decida un tercero, pero que sea neutral. No sé con qué fórmula, podría ser una Sala dentro del Constitucional», considerado.
Así, defiende que Euskadi debiera nombrar a la mitad de esos jueces, «un poco como la Junta Arbitral de Concierto». Esteban cree además que es importante que los jueces sean vascos ya que «quizás falta un poco de visión de país, de sensibilidad».
«Yo a mis alumnos solía decirles que se animaran a ir a judicaturas porque había muy poca gente de Euskadi. Evidentemente un juez es bueno o es malo al margen de que sea de aquí o de allá. Pero hay determinados asuntos en los que conviene tener una sensibilidad de país, es decir, tú ves las cosas de otra manera porque las has vivido de otra manera, o porque conoces más a la sociedad o tienes otra sensibilidad en ámbitos lingüísticos o culturales. Cada vez hay más jueces vascos pero es verdad que siguen siendo una minoría. ¿Por qué será? Pues porque la juventud vasca lo sigue viendo como un poder en cierto modo ajeno al país y eso es malo», argumenta.
CATALUÑA
En lo que se refiere a la mesa de diálogo de Cataluña, el representante del PNV cree que el presidente Sánchez tiene «que ser valiente» ya que «va a poder poner las bases de una estabilidad de décadas si lo es, y eso le podría impulsar de cara a unas generales». «No solo con Cataluña, con nosotros también hay un reto ahí», advierte.
Además, reconoce que el PNV está hablando con el Gobierno del «debate territorial», pero este tipo de debates «hay que hacerlos con discreción».
Por otro lado, recuerda que el PNV firmó un acuerdo de investidura con el PSOE y reconoce que la formación nacionalista apostó por este Gobierno porque «era la única alternativa». «Y las apuestas las hacemos en serio. Vamos a intentar que haya estabilidad, pero sin que nos pisen», señala en referencia a la negociación de los PGE.
No obstante, y aunque cree que Sánchez ha sido «leal» con el PNV reconoce estar «muy decepcionado» con algunos ministerios y cuestiones como el Tren de Alta Velocidad ya que «no ha habido impulso político y ha habido descoordinación». Además, recuerda que el traspaso del Ingreso Mínimo es algo que «está en la ley».
«Ya les está costando. La posición del Gobierno vasco la defienden los dos socios y me consta que Moncloa está sufriendo con Escrivá. Espero que se pueda hacer. Tienen que llegar a un acuerdo con el Gobierno vasco y tiene que ser ya», añade.