El secretario general de Junts, Jordi Sànchez, ha asegurado que el hecho de no haber participado en la mesa de negociación entre la Generalitat y el Gobierno central celebrada este miércoles «no fue cuestión de nombres», sino un veto, ha dicho textualmente, por la claridad de la propuesta que plantearían los de Carles Puigdemont en la reunión.
«No nos han vetado por las personas, sino porque sabían que llevaríamos sí o sí luz y taquígrafo a un encuentro que se iba a celebrar sin orden del día, sin claridad en la forma en la que teníamos que abordar la autodeterminación y la amnistía», ha remarcado este sábado durante la celebración del primer Consell Nacional de la formación.
Ha negado que cualquier discrepancia con ERC haya sido el inicio del fin del acuerdo de legislatura y ha enviado un mensaje a la oposición: «Si tanta urgencia tenéis para ganar un tripartido, ganadlo en las urnas. No conseguiréis que la unidad del 52% quede rota».
Por otro lado, ha expresado la lealtad y compromiso del partido al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y ha abogado por trabajar con la mayoría del 52%, en referencia a la mayoría independentista en el Parlament, para alcanzar la independencia de Catalunya, así como a seguir dialogando.
Y, en este sentido, se ha comprometido a trabajar para que haya «unos presupuestos para la Generalitat fuertes, aprobados por una amplia mayoría en el Parlament de Catalunya», que restituya la justicia social dañada y la dignidad en derechos, ha dicho literalmente.
PGE Y AEROPUERTO
En cuanto a la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), ha dicho que los senadores y diputados de Junts trabajarán «al servicio de lo que el Govern quiera, si eso tiene que servir para que pueda tener la recuperación y el trato» que merece, según él.
También ha acusado al Gobierno central de incumplir el acuerdo alcanzado con la Generalitat el 2 de agosto para la ampliación del Aeropuerto de Barcelona-El Prat: «Si retira esta inversión no es para salvaguardar ningún espacio de biodiversidad, sino porque no tiene ningún interés en invertir ni un euro más en ninguna infraestructura central para un país que aspira a ser un estado europeo».
Ha definido la formación como «el embrión de la fuerza de unidad nacional que llevará este país a la independencia», para lo que ha asegurado que la formación está dispuesta a asumir todos los riesgos necesarios –en sus palabras– y ha puesto su horizonte en la celebración de elecciones municipales en 2023.
