El escritor nicaragüense Sergio Ramírez ha afirmado este lunes que regresar a Nicaragua «significaría la cárcel y, por tanto, la muerte». La Fiscalía de Nicaragua ha solicitado su detención por «conspirar» e «incitar al odio».
Así lo ha asegurado en declaraciones a los medios de comunicación el expresidente, escritor y Premio Cervantes 2017 Sergio Ramírez, quien ha depositado en la Caja de las Letras del Instituto Cervantes un legado ‘in memoriam’ en recuerdo de Rubén Darío (1867-1916), el gran poeta de su país y considerado como el máximo representante del modernismo literario en lengua española.
Preguntado sobre si puede ejecutarse la orden de detención, ha respondido que es «ejecutable dentro de Nicaragua» y ha añadido que no regresa a su país porque «eso significaría la cárcel y, por tanto, la muerte» para él. «Yo, a mi edad, no puedo estar preso sin los auxilios de un médico», ha subrayado.
En este sentido, ha afirmado que son «muy despiadados» y ha argumentado que el líder estudiantil Lesther Alemán –recientemente detenido–, «que es un hombre joven, están convertido en un cadáver y no puede caminar. Tiene confusión mental». «Hay prisioneros que pasan 24 horas del día con las luces encendidas, otros en centros de aislamientos. De manera que son condiciones que yo no voy a ir a buscar», ha enfatizado.
Sergio Ramírez ha relatado que cuando el dictador Anastasio Somoza le impuso «una pena de prisión por delitos muy parecidos –incitación al terrorismo y asociación ilícita para delinquir–» regresó a «enfrentar las acusaciones» a Nicaragua. «Somoza no se atrevió a meterme en la cárcel, pero yo tenía 30 años. Esa es la pequeña diferencia», ha recalcado.
Sobre si cree que el actual presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, se atrevería a encarcelarle si regresara, ha contestado: «Me han puesto ocho cargos criminales. ¿Qué puedo esperar? Pasar del aeropuerto al centro de detención de Chipote, que es un lugar temible».
NO DESCARTA RESIDIR EN MÉXICO O ESPAÑA
Respecto a cómo se plantea este exilio forzoso, el escritor ha dicho que «de momento» se encuentra en Costa Rica, donde ha sido acogido «de una manera maravillosa» por el presidente Carlos Alvarado y las autoridades del gobierno.
«Tengo muchísimos amigos. Yo viví en Costa Rica 14 años de mi vida, de manera que me siento muy bien allí», ha manifestado, para después agregar que tiene otras opciones como vivir en España o en México. De momento, según ha concretado, permanecerá en España hasta el 30 de octubre donde tiene varios programas con el Instituto Cervantes y el lugares como Alicante o Málaga. Junto a dicha institución, el escritor realizará una gira que le llevará a Reino Unido, Alemania y Francia.
En relación con si su nueva novela ha sido el detonante de esta situación, Sergio Ramírez ha recordado que «ya estaba prohibido» y lo habían parado en la aduana, por lo que está circulando únicamente su versión digital. El escritor se ha mostrado «abrumado» por todos los apoyos que está recibiendo. «Es muy conmovedor para mí», ha zanjado.
El director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, ha sido el encargado de presentar el doble legado en la Caja de las Letras. En su presentación, ha destacado la «calidad literaria» de Sergio Ramírez y ha dicho que este acto tiene «otro significado» para la institución cultural por la «coyuntura personal, política que está viviendo». «Es un referente, para nosotros, en los valores democráticos», ha recalcado, al tiempo que ha confesado la «emoción de amistad» poder contar con él.
LEGADO DE LEONARDO PADURA
Junto a Sergio Ramírez, el novelista cubano más publicado y reconocido en la actualidad, Leonardo Padura, ha depositado en la caja 697 un legado relacionado con su obra. Padura, cuya obra incluye además la crítica literaria, el ensayo, el artículo periodístico y el guion de películas, fue distinguido en 2015 con el Premio Princesa de Asturias de las Letras.
Durante su intervención, Leonardo Padura ha asegurado que para él es un «orgullo» que ambos escritores hayan podido coincidir «en tantos lugares y ocasiones a lo largo de tantos años». «Suscribo totalmente las palabras que acaba de decir el director del Instituto Cervantes con respecto a la figura y a la situación política que atraviesa en estos momentos mi querido amigo Sergio Ramírez y su esposa inseparable», ha manifestado.
Por otro lado, García Montero ha indicado que «los actos en la Caja de las Letras son importantes para el Instituto Cervantes». Son actos en los que repetimos que nuestro compromiso con el futuro es saber recibir las mejores herencias de nuestros mayores y donde insistimos en que la verdadera riqueza de una sociedad es su cultura y la de la comunidad hispánica es su lengua, utilizada por los grandes maestros de la literatura y por la gente común», ha afirmado.
Para el Instituto Cervantes, según ha asegurado su director, es «muy importante trabajar no solo por la cultura española, sino por la cultura en español». Por eso, se ha mostrado consciente de su «tarea de hermandad «con todos los países de lengua española».
MESA REDONDA CON JUAN CRUZ
Tras la ceremonia de los legados, Ramírez y Padura han dialogado en una mesa redonda moderada por el periodista y escritor Juan Cruz, junto con la presencia del ensayista Rafael Acosta y el editor de Tusquest Editores Juan Cerezo, en un acto en el que se ha presentado la colección ‘Las ínsulas prometidas’, del Instituto Cervantes. Se trata de una recopilación de estudios sobre diversas obras de escritores hispanoamericanos contemporáneos.
La colección se inicia con ‘La escritura de Leonardo Padura’, una novela escrita por Rafael Acosta y Stephen Silverstein donde analizan diferentes cuestiones de las creaciones del escritor cubano Padura.
«Es una obra que cuenta con una prosa magistral pero es una obra que tiene un profundo sentido sociológico. He conversado con algunos colegas de la isla de que cuando pase el tiempo quizás sea más fácil saber cómo era la sociedad cubana de los 80, de los 90, por los libros de Padura que por los mensajes de las ciencias sociales humanas», ha destacado Acosta sobre los escritos del autor cubano.
Padura ha agradecido el apoyo de España y de la Editorial Tusquets afirmando que, «está muy satisfecho de que se publique en España». Además, ha señalado que lleva más de 25 años trabajando con Tusquest. «Nunca los editores me han pedido que cambie nada de mis libros que tenga contenido político», ha recalcado.
Por su parte, Juan Cruz, ha apostillado que «se puede escribir sobre el exilio sin ser un exiliado, como en el caso de Leonardo, y escribir sobre el exilio, padeciendo dos exilios políticos, como Sergio en distintos momentos de su vida».