El vicelehendakari primero y consejero de Seguridad del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, ha defendido la necesidad de mecanismos de bilateralidad ante el «resultado letal» de la recentralización del Estado «que desnaturaliza y vacía de contenido» el Estatuto.
En una entrevista a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, ante la denuncia realizada por la consejera Olatz Garamendi de la existencia de «una erosión competencial» a Euskadi y una recentralización por parte del Estado que se recoge en un libro, Erkoreka ha asegurado que es una denuncia que viene haciendo el Gobierno vasco desde la época del Mario Fernández como vicelehendakari de Desarrollo, autonómico, «hace casi 40 años».
Erkoreka ha señalado que, durante su etapa en el Congreso de los Diputados, sabía que uno de sus cometidos era «actuar sobre la legislación básica y orgánica de Estado para intentar impedir que se produjera eso».
Ha señalado que se cuenta con un estatuto pactado pero «su contenido o alcance, su interpretación la impone unilateralmente una de las partes primero a través de la aprobación de normas básicas y orgánicas que van constriñendo, limitando y reduciendo el contenido de ese estatuto, del autogobierno» y que «después son santificadas por un TC cuyos miembros han sido elegido a su vez por el PP y el PSOE, a veces con los criterios más partidistas y más sectarios que se pueda imaginar».
En este sentido, ha asegurado que «el resultado es letal» y lo que el año 79 se aprobó «con una idea determinada de lo que suponía en términos de autogobierno se ve notablemente reducido y constreñido años después como consecuencia de la actuación conjunta de la producción legislativa del Estado y de la intervención después del Tribunal Constitucional».
A su juicio, «es una historia interminable de muchos años» y lo que ahora se ha hecho es efectivamente recoger, «negro sobre blanco» en una serie de materias concretas, un estudio más pormenorizado que «da respaldo a esta denuncia que es secular».
Erkoreka ha señalado que la reivindicación de la bilateralidad «trae causa de esto». «Hacen falta mecanismos de bilateralidad que consoliden el sistema actual para evitar esa actuación unilateral de una de las partes que va imponiendo poniendo sus criterios y que al final desnaturaliza y vacía de concedido el Estatuto», ha añadido.
TRANSFERENCIA DE PRISIONES
Por otra parte, ante la transferencia de prisiones a Euskadi el próximo 1 de octubre, ha indicado que es un «día muy importante» porque se afronta «un desafío relevante» en una materia que venían exigiendo desde hace «mucho tiempo».
Tras recordar «la de veces que se ha exigido y que, por unas u otras razones, unos y otros gobiernos, la han negado», ha señalado que finalmente ha sido posible y ha añadido que «a nadie se le oculta que es una materia que va a requerir mucha atención, mucho esfuerzo y que entraña una gestión no fácil».
Erkoreka ha señalado que el Departamento que la va asumir está «perfectamente concienciado» a ese respecto y está dispuesto, además, a afrontar «ese desafío con el mayor rigor posible». «Es un reto importantísimo que estoy absolutamente seguro de que, con las dificultades que entrañará, sabremos responder a él con rigor y autoridad», ha manifestado.
NUEVO ESTATUTO
Por otra parte, ante la postura del PSE-EE que insiste en que el nuevo Estatuto no está en la agenda del Gobierno, ha señalado que en el programa de Gobierno «no hay prescripción de ningún tipo, no hay acuerdo», pero «sí está latente la idea compartida» por ambos socios del Ejecutivo que todo el debate sobre el futuro de autogobierno tiene que producirse en el Parlamento.
Según ha indicado, el lugar en el que se tiene que ubicar el debate sobre el futuro del autogobierno, sobre el nuevo estatus o «la forma que vaya a adoptar» debe ser el «foro parlamentario, sin ninguna duda» porque es «el que más claramente refleja las diferencias ideológicas que anidan en el país, las diferentes perspectivas que existen al respecto».
En este sentido, ha reconocido que, dentro de los partidos que integran la coalición de gobierno hay diferentes puntos de vista en relación con esta cuestión» y, por tanto, es el Parlamento «quién tiene que abordar esta cuestión».
«El Gobierno, lo que tienen claro ambos partidos que integran la coalición es que el debate se tiene que residenciar en el Parlamento y que cada formación política, cada una de las que integran la coalición, defenderá en sede parlamentaria los planteamientos que tengan que defender, los que estén arreglo a su ideología y sus planteamientos estratégicos con absoluta libertad», ha señalado.