La alopecia es una patología que provoca la calvicie en ciertas zonas o en el cuero cabelludo al completo. Existen diferentes causas y diversos tipos de alopecia, que varían en función de la genética de la persona o de otros motivos como el estrés. La alopecia puede atacar a hombres y a mujeres por igual.
Cuando una persona comienza a sentir los primeros impactos de la alopecia es cuando esta se plantea la posibilidad de hacerse un injerto capilar. Expertos como el Doctor Bern son especialistas en trasplantes de cabello, que ayudan y, sobre todo, les aclaran dudas referentes al proceso, como por ejemplo, saber si tras el trasplante el cabello se cae o no.
Fases del desierto de un injerto capilar
Una de las principales preocupaciones de las personas que han decidido someterse a un trasplante capilar es saber si el cabello se caerá o no, y la respuesta correcta es que no. El cabello trasplantado no se caerá, lo que puede pasar es un proceso de caída natural conocida como la fase del desierto capilar.
Durante los primeros 10 o 15 días de haberse realizado un trasplante capilar, si no se presenta complicación alguna del folículo injertado, comienza a crecer cabello nuevo. Muchos pacientes se preocupan cuando al pasar las 3 o 4 semanas, el cabello comienza a caerse, pero se trata de un proceso normal debido al estrés sufrido en el organismo durante la operación.
Una vez trasplantado el cabello, el folículo entra en una fase de reposo quedándose desprovisto de pelo, este proceso sucede antes de que comience un nuevo crecimiento, por lo que no hay que preocuparse cuando la fase de desierto capilar se haga notar.
Tiempo de duración de la fase del desierto capilar
La fase del desierto capilar es un proceso que sucede cuando se hace una cirugía de injerto de cabello, durante los primeros 2-3 meses del procedimiento y la zona aún está rojiza. No será hasta el cuarto mes que se comenzará a evidenciar el crecimiento del nuevo cabello que será de forma definitiva.
El desarrollo gradual del cabello podría tardar de 10 a 12 meses y estos tiempos pueden variar dependiendo del organismo de cada paciente. En cada fase, la caída y el crecimiento puede ser acelerado o tardío, dependiendo de la evolución de cada paciente.
Lo importante cuando se atraviesa esta fase es tener claro que el cabello injertado no se cae de manera definitiva y que vuelve a aparecer una vez se enfrente el proceso de desierto capilar. Para esto es importante contar con el control y la asesoría del especialista, para recibir consejos y recomendaciones.