Los alumnos de los institutos catalanas que tengan la pauta completa de la vacunación contra la Covid-19 no deberán confinarse si se da un positivo en su grupo burbuja y se adapta el uso de la mascarilla en los patios en los que no se mezclen grupos.
Lo han anunciado este lunes la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, el conseller de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, y de Salud, Josep Maria Argimon, en una rueda de prensa en el Palau de la Generalitat para anunciar las medidas de contención de la pandemia de cara al próximo curso, que empieza el 13 de septiembre.
Gonzàlez-Cambray ha afirmado que este nuevo protocolo de gestión de casos –según el cual haber pasado la enfermedad contará para tener la pauta completa– será «logísticamente complicado al inicio» hasta que no aumente el porcentaje de alumnos vacunados.
Según ha detallado Argimon, en el grupo de personas de 12 a 15 años (un total de 340.000 personas), hay 160.000 que no han iniciado la vacunación, y 140.000 que han recibido únicamente la primera dosis, con lo que el 13,5% tiene la pauta completa.
En la franja de 16 a 19 (de 320.000 personas), más de 100.000 no han iniciado la vacunación y 45.000 tienen inoculada la primera dosis.
Por todo ello, los consellers y la portavoz han hecho un llamamiento a retomar el ritmo de vacunación «para tener un otoño en el que la Covid no protagonice de forma negativa» las vidas de todos, en palabras de Plaja.
Argimon, a su vez, ha subrayado que la vacunación está relacionada con el freno de la pandemia en el entorno escolar: «Ponérselo mucho más difícil al virus quiere decir que tendremos una escuela mucho más segura», ha enfatizado.
DOCENCIA «HÍBRIDA»
Si se da el caso de un positivo, los profesores de los institutos deberán seguir con la docencia presencial y «facilitar y hacer posible» la simultaneidad con el alumnado que se deba confinar.
Así, se prioriza la formación «híbrida y asíncrona», para lo que se impulsará una segunda fase del Plan de Educación Digital, que ha repartido ordenadores y módulos de conectividad a alumnos y profesores.
Prácticamente el 90% de profesionales educativos están vacunados, según Gonzàlez-Cambray, que ha aclarado que en Secundaria la mayor parte de docentes no forman parte del grupo estable de convivencia –si acaso los tutores–, por lo que prevé que, si no están vacunados, no deban confinarse en la mayoría de los casos.
MENOS MASCARILLAS EN LOS PATIOS
Además, en espacios comunes como los patios, los alumnos podrán no llevar la mascarilla si no se mezclan con los de otros grupos burbuja, por lo que se podrán crear espacios delimitados en los patios que lo permitan por espacio.
La mascarilla sí seguirá siendo obligatoria en el interior del aula y en patios con grupos mezclados; a la entrada de los centros se dejará de tomar la temperatura pero se mantendrán las entradas escalonadas.
Las familias podrán acompañar a sus hijos hasta el interior del centro si respetan medidas como distancia, higiene de manos y llevan mascarilla, también podrán reunirse presencialmente con los profesores, si bien se recomienda el formato telemático, y se permiten las fiestas escolares al aire libre.
Además, se inicia el curso con actividades extraescolares, pero se recomienda que empiecen en octubre y con diez alumnos; asimismo, se equiparan las medidas del deporte escolar a las del deporte de competición.
Por todo ello, Plaja ha afirmado que «en el contexto actual no es prudente hablar de relajación de medidas, sino de adaptación de medidas».