La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado este viernes una convocatoria abierta para seleccionar a los 25 expertos que formen parte del nuevo Grupo de Asesoramiento Científico sobre los Orígenes de los Nuevos Patógenos (SAGO, por sus siglas en inglés).
El SAGO asesorará a la OMS sobre las consideraciones técnicas y científicas relativas a los orígenes de los patógenos emergentes y reemergentes de potencial epidémico y pandémico, y estará compuesto por una amplia gama de expertos que actuarán a título personal. La SAGO también orientará a la OMS sobre los próximos pasos para comprender los orígenes del SARS-CoV-2.
A través de un comunicado, el organismo sanitario internacional de Naciones Unidas explica que en los últimos años ha habido un número creciente de patógenos que han emergido y reemergido, por ejemplo, el SARS-CoV, el MERS-CoV, el Lassa, el Marburg, el Ébola, el Nipah, la gripe aviar y el SARS-CoV-2.
«Hay una clara necesidad de una vigilancia sólida y de acciones tempranas para una rápida detección y esfuerzos de mitigación, así como de procesos sistemáticos para estudiar la aparición de estos patógenos y las rutas de transmisión desde sus reservorios naturales a los humanos. Esto es fundamental para ayudar a la OMS, a los Estados miembros y a las instituciones asociadas a prepararse para futuras amenazas de propagación y para minimizar el riesgo de que un brote de la enfermedad se convierta en una pandemia», aseguran.
El SAGO será multidisciplinar, con miembros que tengan una serie de conocimientos técnicos, experiencia de campo, habilidades y experiencia relevantes para los patógenos emergentes y reemergentes. Se podrán seleccionar hasta 25 expertos.
«Desde el SARS-CoV-2, que sigue causando estragos en todo el mundo, hasta la próxima ‘Enfermedad X’, este marco global para estudiar la aparición de patógenos nuevos y conocidos de alta amenaza debe ser exhaustivo y estar coordinado sobre la base de un enfoque de ‘Una Salud’. También debe abarcar la bioseguridad y la bioprotección. Y tiene que ser científico, transparente, exhaustivo, rápido e inclusivo», remacha la OMS.