La diputada de la CUP en el Parlament Laia Estrada ha tildado de monólogo la mesa de diálogo entre Generalitat y Gobierno, ha considerado que carece de credibilidad y ha defendido un referéndum unilateral una vez se «finiquite» la mesa.
En una entrevista, ha insistido en que el diálogo es «deseable» pero que no es posible con el Gobierno, y ha reivindicado que en la mesa de diálogo se debería hablar de amnistía y autodeterminación.
«Para nosotros no tiene sentido lavarle la cara al Gobierno, en el sentido de proyectarlos como dialogantes cuando no lo están haciendo», y ha remarcado que la CUP no participará en este proceso, porque ve la mesa de diálogo como una pérdida de tiempo.
«EN ESTA MESA NO SE HABLA DE LO QUE SE TIENE QUE HABLAR»
Aun así, respeta que ERC quiera explorar esta vía de diálogo, y recuerda que se comprometieron a no condicionar su apoyo al Govern por hacerlo: «Si se quieren reunir cada 2 ó 3 meses, adelante. El problema no es este; es que en esta mesa no se habla de lo que se tiene que hablar».
Estrada espera que se haya «extraído algo de esta mesa» en el plazo de dos años que se ha fijado para el diálogo, aunque ha expresado su voluntad de no esperar hasta que culminen los dos años, sino finiquitar la mesa antes.
«Cuando lleguemos al punto de que ERC dé por finiquitada la mesa de diálogo, lo que debe suceder es la celebración de un referéndum; unilateral, lógicamente», y ha añadido que este referéndum no es un fin, sino una herramienta más para la confrontación.
Además, considera que reivindicar un nuevo referéndum unilateral «no es deslegitimar el 1-O», cuyo resultado cree que no se pudo mantener porque no se había hecho el trabajo necesario en materia internacional y de control de sectores estratégicos –ha dicho textualmente–, y pide aprender de los errores.
«PROCESO DE ACUMULACIÓN DE FUERZAS»
Para Estrada, durante este próximo periodo de dos años se tiene que llevar a cabo un proceso de acumulación de fuerzas para que, cuando se finiquite la mesa, «ya se tenga el trabajo hecho y no se parta desde cero».
Concretamente, ha urgido a reivindicar la soberanía del Parlament, defender derechos ciudadanos y crear sectores estratégicos, como una banca y una energética públicas: «No pasemos el tiempo de la mesa de diálogo con los brazos cruzados, sino materializando esta confrontación. El nuevo embate debe comenzar ya, con este choque de legitimidades».
AFGANISTÁN, «EL FRACASO DEL CAPITALISMO GLOBAL»
Preguntada por las declaraciones del alto representante de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell, sobre la situación en Afganistán en las que decía que la victoria de los talibanes significa el fracaso del mundo occidental, Estrada ha respondido que es el «fracaso del capitalismo global».
Ve hipócrita que Borrell afirme que la UE debe hablar con los talibanes tras llegar al poder, ya que estos «talibanes precisamente cogieron poder porque fueron armados gracias a Estados Unidos, la OTAN y la UE. Es hipócrita hablar de negociar ahora, porque ya lo hicieron cuando les interesó, en la revolución del 78″.