En plena ola de calor y con los precios de la luz totalmente desbocados, nos encontramos en una semana histórica que está sumando lo precios más altos nunca vistos. Mientras tanto, Iberdrola, Endesa y EDP miran para otro lado, ignorando el problema que supone para muchas familias las elevadas cotas que está alcanzando el coste de un suministro básico en el día a día. La patronal explica que en las últimas semanas el precio del gas natural ha aumentado cinco veces con respeto al año pasado, y que la subida del precio de los derechos de CO2 es lo que está provocando que los precios del mercado mayorista se disparen. ¿Significa esto, que no se puede hacer nada?
1LAS CONTRADICCIONES DE PEDRO SÁNCHEZ
Desde Bruselas, se ha indicado que España sí tienen un margen de actuación y puede intervenir en el precio de la electricidad, ya que, según la normativa, los Estados miembros pueden aplicar determinadas salvaguardias, como intervenciones públicas de fijación de precios, para suministrar a los clientes más vulnerables. El pasado 10 de agosto, el país alcanzó un récord histórico con un precio de 120 euros por MWh, y ello a pesar de que contamos con un Gobierno de coalición cuyos dos partidos prometieron en numerosas ocasiones que cuando llegasen al poder bajarían el precio de la luz. Tirando de hemeroteca podemos encontrar declaraciones en las que los actuales ministros y el propio Pedro Sánchez, arremetían contra el Gobierno por los precios de la electricidad y prometían negociar con las eléctricas para regular las tarifas. Como dice el refrán, donde digo ‘digo’, digo Diego, y para muestra un botón.