El Papa expresa su «dolor» por el sacerdote asesinado en Francia

El Papa ha manifestado «mucho dolor» por «el homicidio del padre Olivier Maire», el sacerdote asesinado el lunes por un perturbado mental de nacionalidad ruandesa que fue internado en un centro psiquiátrico después de la confesión voluntaria de su crimen a la Gendarmería. El hombre está vinculado con el incendio de la catedral de Nantes hace un año.

«Me enteré con gran dolor del asesinato del padre Olivier Maire. Envío mis condolencias a la comunidad religiosa de los monfortianos de Saintlaurent-sur-Sèvre, en Vendée, a su familia y a todos los católicos de Francia. Os aseguro mi participación y mi cercanía espiritual», ha dicho Francisco durante la audiencia general de este miércoles.

Las autoridades policiales no lo han catalogado como un acto terrorista, de hecho lo están investigando como «homicidio voluntario». El autor del crimen, un hombre de 40 años identificado como Emmanuel Abayisenga, es también sospechoso de haber provocado un incendio en la catedral de Nantes.

El padre Olivier era superior provincial de la Congregación de los Misioneros Monfortianos en Francia.

En la audiencia, antes de comenzar los saludos de despedida, el Papa realizó una llamada telefónica mediante un móvil que le acercó uno de sus ayudantes, si bien el Vaticano no ha revelado los detalles de dicha llamada.

PEREGRINOS SIN CERTIFICADO SANITARIO

El Papa ha celebrado la catequesis semanal en el Aula Pablo VI del Vaticano debido a las altas temperaturas de Roma. Para acceder a este acto en el Vaticano, las autoridades no han solicitado a los peregrinos el certificado sanitario, si bien se trata de una obligación en Italia para poder entrar a lugares cerrados, y también es necesario para visitar los Museos y Jardines vaticanos.

Tanto Francisco como el resto de empleados que trabajan y viven en el pequeño Estado pontificio ya han sido vacunadas ya tienen su certificado sanitario europeo, después de que el Vaticano llegase a un acuerdo con la Unión Europea para que reconociese la vacunación realizada a través de su propio sistema sanitario.

El Papa reprendió en agosto la mayor parte de su agenda pública, pero de momento no están previstas citas de alto nivel como las audiencias privadas a los jefes de Estado y de Gobierno o a los responsables eclesiásticos de los distintos países.