El caso Púnica sigue salpicando a algunos dirigentes del Partido Popular. Puede que los cabezas de lista del PP tengan poco que ver con esta trama de corrupción, pero aún hay protagonistas que aparecen como por arte de magia trufados en puestos públicos ante la sorpresa de muchos. Este es el caso de David Erguido, un exsenador popular al que el juez de la Púnica ha procesado a la par que el Ayuntamiento de Madrid de José Luis Martínez Almeida le buscaba un cómodo asiento bien remunerado en la Empresa Municipal de la Vivienda y el Suelo (EMVS). El alcalde se ha desvinculado en público de lo que hacía su propio Consistorio asegurando que no se le «ha comunicado que hubiera previsión de incorporación». Pero a nivel interno el PP sospecha quién está detrás de este polémico fichaje: Ángel Carromero, el spin doctor del alcalde de Madrid.
Almeida se ha desvinculado por completo del fichaje de David Erguido, pero lo cierto es que entre sus filas ya hay alguna que otra persona íntimamente ligada al exsenador. La concejala de Madrid Sonia Cea Quintana, amiga personal de Carromero y compañera de partido desde hace años del spin doctor, es la pareja de Erguido y alguien que lleva tiempo ostentando cargos de relativo poder en el PP. Sonia Cea es concejala presidenta del Distrito de Chamartín y miembro de dos comisiones permanentes y dos especiales. Llama la atención a algunos que Erguido estuviera ultimando su fichaje por el Ayuntamiento de Madrid cuando su pareja es concejala de ese mismo Consistorio. Pero a quien culpan dentro del PP de la capital no es precisamente a Sonia, sino a Ángel Carromero, hombre de confianza del alcalde y persona muy cercana al presidente del Partido Popular, Pablo Casado.
Sonia y Carromero han vivido grandes hazañas juntos, pues ambos provienen de Nuevas Generaciones. Puede que al alcalde le haya sorprendido el ver que su propio Ayuntamiento estaba ultimando el fichaje en una empresa pública de un «púnico» como Erguido, recientemente procesado por esta trama de corrupción por supuestas adjudicaciones irregulares de contratos públicos a Waiter Music y otras sociedades del empresario José Luis Huerta. Pero las cosas cuadran algo mejor cuando se tiene en cuenta la presencia de Sonia Cea y de Ángel Carromero en el Consistorio, quienes son íntimos amigos desde hace tiempo y quienes han apoyado, por ejemplo, a Casado durante su campaña electoral junto con el propio Erguido.
el PP tiene claro que el proceso de contratación de Erguido lleva tiempo en marcha
Parte del PP tiene claro que el proceso de contratación de Erguido lleva tiempo en marcha, no es cosa de este último mes, y que el responsable es Carromero. Este asesor de Almeida a tiempo completo es quien mueve los hilos dentro del Consistorio y el único a quien ven capaz de lanzarse para contratar a Erguido en un contexto en el que sabían que podía ser imputado por la Púnica. Ahora, el alcalde de la capital tiene que hacer frente a este hipotético fichaje sin que él supiera nada. O al menos es lo que él dice en público, que no conocía lo que ocurría bajo su mandato y que no controlaba la contratación de una bomba de relojería como es Erguido.
Tanto Carromero como Sonia Cea son herederos del estilo de Esperanza Aguirre. De hecho, tenían mucha afinidad con la expresidenta de la Comunidad de Madrid. Pero su cercanía a Aguirre no es exclusiva. Su estancia en Nuevas Generaciones hizo que también se acercaran al actual presidente del Partido Popular. ¿Quién no recuerda a Sonia, a David Erguido y a Carromero de «rodríguez» echando un cable a Casado durante la campaña electoral? En 2018, los tres se lanzaron junto a Casado con un permiso concedido por el Ayuntamiento de Madrid para que ayudaran al líder popular a levantar su imagen. Esa foto que ha pasado a la posteridad ahora salpica a Almeida y todos señalan a Carromero, quien montó un dream team con Erguido y Sonia para encumbrar a Casado. Después este equipo de ensueño acabó por mandar al presidente popular a quitar nieve con una pala y en mocasines para mejorar su imagen y el estilo Carromero quedó en entredicho.
En cualquier caso, Carromero es un político que suscita cierta inquietud en el Consistorio. La foto de Carromero, de Sonia y de Erguido junto a Casado es algo que nadie quiere que salga, pero lo cierto es que ambos eran el dream team de Nuevas Generaciones que ahora quería seguir trabajando en conjunto bajo el amparo del Ayuntamiento de Madrid. La guerra interna no ha tardado en estallar en un contexto en el que Almeida se enfrenta a problemas políticos internos por las decisiones unipersonales de sus asesores.
Carromero, que actúa en ocasiones como si de un jefe de gabinete se tratara y quien acostumbra a acompañar al alcalde en su coche oficial, está cuestionado por el fichaje de Erguido. Pero no solo por que ahora salga a la luz que el exsenador iría a parar a una empresa pública con visos de chiringuito, sino porque desde el PP son absolutamente conscientes de que Carromero, en calidad de amigo de Erguido y de Sonia, era perfectamente consciente de que, primero, Sonia y Erguido eran pareja y de que, segundo, el exsenador podía acabar imputado. Pero pese a eso, el empeño del Ayuntamiento de Madrid en contratarle sorprende. Haremos nuestras las palabras de Almeida: «No se me ha comunicado que hubiera previsión de incorporación».
El PP quiere contener las consecuencias que pueda tener este tema sobre el partido. El problema es que las palabras de Almeida no han convencido en Génova. Desde el entorno de Casado no se creen que el alcalde no conociera que su Consistorio buscaba cobijo laboral a un «púnico» como si de un refugiado sirio se tratara. Las palabras de Almeida no han tranquilizado a Génova y ahora están a la espera de cuáles serán los próximos movimientos del alcalde. Por supuesto, todos dan por hecho que el fichaje de Erguido se suspenderá en seco, pero todo puede pasar.