martes, 26 noviembre 2024

Los barones socialistas estallan contra Garzón y le invitan a una granja: «sobre el terreno igual es más fácil que nos entienda»

Muchos han señalado que a un comunista convencido como Alberto Garzón le gustaría cambiar muchas cosas pero, si ya como vemos es complicado desde cualquier ministerio, lo es más desde uno con bastante o nulas competencias como Consumo. Por eso, Garzón es noticia, o quizá lo busca, a base de propuestas y medidas con poco recorrido como controlar las apuestas deportivas o en este caso fomentar el no consumo de carne.

Y claro, cuando nos tocan algo tan «sagrado», pues se produce el «milagro» de ir casi todos contra él, salvo sus compañeros de Izquierda Unida como de Unidas Podemos. Incluso sus socios socialistas se han mostrado indignados con esa propuesta. Los barones socialistas le han invitado a un granja para que se quite la venda de los ojos, ya que dicen que «sobre el terreno igual es más fácil que nos entienda».

Hasta Pedro Sánchez se posiciona y le lanza un zasca a Garzón

En política es poco frecuente que un presidente desacredite a un ministro, aunque como en este caso sea una coalición tan forzada y aunque en el fondo el espectro ideológico de Garzón y de Sánchez esté tan alejado, aunque la oposición defiende lo contrario. Pedro Sánchez tiró de retranca y frase lapidaria, muy al estilo de su predecesor, Mariano Rajoy. «Donde me pongan un chuletón al punto… eso es imbatible«, aseguró el presidente del Gobierno a pregunta de los periodistas durante su viaje oficial por los países bálticos. Más claro imposible.

Pero también ha supuesto un apoyo a las palabras de su ministro de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Luis Planas. El titular de Agricultura ha sido tan claro y crítico con las palabras de Garzón, como Sánchez y los barones del partido. «Los políticos no estamos para crear problemas», en referencia a la última ocurrencia del ministro de Consumo. Calificó la campaña  #MenosCarneMásVida como «tan errónea como la del azúcar mata» ya que «sobran dogmatismos» y lamentó que se señale «con el dedo» al sector cárnico, en declaraciones a Ser Catalunya.

Sánchez Garzón

García-Page se une a las críticas

La crisis interna del Gobierno también se ha trasladado a las filas socialistas. Una vez más, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha querido dar su opinión sin tapujos. Por supuesto, también ha arremetido contra las palabras de Alberto Garzón. Se ha centrado más en lo práctico y más dolorosos, es decir, en el perjuicio laboral que supone en forma de pérdida de puestos de trabajo en el sector.

García-Page ha criticado que el ministro de Consumo haya puesto en riesgo millones de puestos dedicados al sector cárnico y le ha pedido que «si no tiene nada que hacer, que no genere problemas». Pero fue más allá, indicando que se trata de un ministro «que se está inventando su cargo todos los días y ahora no se le ocurre otra cosa que decir que no hay que comer carne». Eso sí, ha defendido que los ciudadanos se cuiden comiendo bien y de forma saludable. «No sé qué futuro tienen como dietistas. Pero si no tienen nada que hacer, que no se inventen la política porque crean problemas», ha terminado por pedirle Page a Garzón.

El sector ganadero, indignado con Garzón

Obviamente en sector ganadero y cárnico no tardó en responder a Alberto Garzón. Ha manifestado su «estupor» en una carta abierta al ministro de Consumo. La firman los presidentes de las Interprofesionales del Cerdo Ibérico (Asici), de Carne Avícola (Avianza), para el Impulso del Sector Cunícola (Intercun), del Ovino y Caprino (Interovic), del Porcino de Capa Blanca (Interporc) y de la Carne de Vacuno (Provacuno). 

En la carta critican la campaña, orquestada por Garzón y por «el Ministerio del que es titular en la cual difama al conjunto del sector ganadero-cárnico». Y dan argumentos sociales y económicos. Consideran «preocupante» que un ministro «enarbole una serie de afirmaciones erróneas o desenfocadas, y hacerlo además a través de canales públicos, tratando de crear una confrontación artificial con un sector, el ganadero-cárnico, que cumple un rol social y económico de primera magnitud en nuestro país» y que «genera en España más de 2,5 millones de empleos y casi 9.000 millones de euros de exportaciones a la balanza comercial», añaden.

Concretemos más las cifras: La industria cárnica genera en España 2,5 millones de empleos y sus 2.800 empresas facturan 28.000 millones de euros al año. Todo ello representa nada menos que el 22,2% del todo el sector alimentario español, y el 2,32% del PIB total del país.

Revilla explota contra Garzón

Críticas fuera del Gobierno y el sector

Al margen de las críticas y bromas típicas en redes sociales y de gran parte de la opinión pública, otros políticos como Miguel Ángel Revilla se han mostrado críticos con Garzón. Y más en el caso del presidente de Cantabria, una comunidad autónoma donde la ganadería y el sector cárnico tiene tanto peso y prestigio. Revilla, en su línea siempre clara y directa, ha asegurado que «habla poco, pero cuando sale, sale a meter la pata y a perjudicar a sectores básicos de la economía».

Estas declaraciones se han producido a preguntas también de los periodistas en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, en Santander. «Este hombre cada vez que habla hace daño a sectores muy importantes», ha apostillado Revilla, y ha agregado irónico que en Cantabria «se ha comido carne «toda la vida y no nos ha ido mal». En cuanto a la polémica medioambiental, Revilla ha defendido que los ganadores y agricultores «son los primeros conservadores del medio».

Por supuesto también la oposición se ha pronunciado sobre la ocurrencia de Garzón. La más destacada ha sido la del líder del Partido Popular, Pablo Casado, que la ha tachado de «bastante estrafalaria» e «insólita». En un acto junto al expresidente de Argentina Mauricio Macri, el presidente del PP ha reclamado al Gobierno «que no nos digan qué tenemos que hacer en nuestra casa». Casado ha aprovechado para alertar contra el «intervencionismo de la izquierda en los hábitos incluso de consumo de los ciudadanos».

Sin embargo, Garzón se remite a la estrategia ‘España 2050’

Pedro Sánchez ha dejado en evidencia a su ministro Alberto Garzón, pero lo cierto es que siendo estrictos, en cierto sentido es una contradicción más del Ejecutivo, o más bien de los que cargan contra el titular de Consumo. Y es que no hace mucho Moncloa presentaba por todo lo alto el documento ‘España 2050’ o más bien un extenso informe con los objetivos de cara a mitad de siglo.

Entra múltiples medidas y reflexiones, este informe aseguraba que el consumo de carne de la población española es «entre dos y cinco veces superior al recomendable» y recomienda que se camine hacia una disminución de su consumo. Y añadía más: «este cambio en los patrones de consumo tampoco tiene por qué afectar negativamente a nuestros niveles de actividad y empleo», asegurando que «la economía circular y sostenible no tiene por qué ser menos dinámica y próspera que la lineal e insostenible; más bien al contrario».