El Ayuntamiento de Barcelona deniega a Marilén Barceló sumarse en el grupo municipal de Manuel Valls, BCN pel Canvi, del que forma parte Eva Parera, también diputada del PP. La tránsfuga de Ciudadanos en el Consistorio de la Ciudad Condal se quedará únicamente con su sueldo, sin derecho a asesores ni otras subvenciones municipales, mientras los ‘naranjas’ tendrán que asumir un recorte en estas asignaciones al perder un asiento.
El grupo de Valls había pactado con Barceló su entrada en el grupo parlamentario. Las negociaciones, según ha podido saber MONCLOA.com, las inició Eva Parera para atraer a la ‘expopular’. El exministro francés aceptó a regañadientes integrarla en la lista y la terminó colocando de número seis, pese a ser después la mano derecha de Guilarte.
En un intento de suavizar el movimiento, el partido de Valls sacó un comunicado en el que dio la bienvenida a Barceló tras «sus diferencias con la dirección local de Ciudadanos«, a manos de Mari Luz Guilarte, según señalaban fuentes municipales a este medio. Sin embargo, esa ha sido la excusa. El caso de transfuguismo se había gestado semanas antes. De hecho, Barceló ya tenía despacho en el mismo espacio que ocupa BCN pel Canvi el mismo día que decidió salir de Cs.
CON DESPACHO EN LA ESCISIÓN DE CIUDADANOS
La exconcejal ‘naranja’ recibió la llamada de Valls y ésta trató de integrarse. De hecho, BCN pel Canvi había anunciado su fichaje, además, sin esperar a la resolución del propio Ayuntamiento tras un recurso de Ciudadanos. Ahora, el Consistorio ha rechazado que se integre en el grupo municipal con Valls y Parera.
lamentable intento de transfuguismo, que es una forma de corrupción
El informe, firmado por el secretario del Ayuntamiento, es «claro», según aseguran fuentes de Ciudadanos a MONCLOA.com. Para las mismas fuentes, Barceló ha sido protagonista de un «lamentable intento de transfuguismo, que es una forma de corrupción«. Así, han lamentado que «haya políticos que se abonen a estas malas prácticas y que mercadeen con su cargo como si les perteneciera a ellos».
Las mismas fuentes han señalado que «todos» los regidores de Cs firmaron el compromiso ético al acceder al cargo. «Ser y estar en Cs implica dar ejemplo y cumplirlo», han asegurado. Para las fuentes consultadas, el caso de Barceló «es una práctica antidemocrática que quiebra, en última instancia, la voluntad de los ciudadanos». «Lo ético y moralmente correcto es devolver el acta«, han sostenido. Barceló se queda el acta, pero no estará sola fuera del salón de plenos. Y es que, desde el comunicado de la formación de Valls, la exdiputada de Ciudadanos cuenta con despacho en el propio espacio de BCN pel Canvi.
BARCELÓ SÓLO COBRARÁ EL SUELDO
Atendiendo a la normativa, Barceló tendrá que formar parte del grupo de «no adscritos». En este sentido, sólo tendrá derecho a la asignación fija, mientras que la variable se calcula en función del número de concejales para poder aspirar a una subvención pública.
«Los derechos económicos y políticos de los miembros no adscritos no podrán ser superiores a los que les hubiesen correspondido de permanecer en el grupo de procedencia, y se ejercerán en la forma que determine el reglamento orgánico de cada corporación«, asegura el reglamento en el que se basa el informe del secretario. Sin embargo, «esta previsión no será de aplicación en el caso de candidaturas presentadas como coalición electoral», cuando alguno de los partidos políticos que la integren decida abandonarla.
Barceló ha asegurado que “siempre intento” arreglar los problemas, “por díficil que sea, pero esta vez ha sido imposible”. En plena pandemia, Ciudadanos prescindió de la asesora de la máxima confianza de Barceló, que era la número dos de la formación hasta hace apenas una semana. Pero no ha sido la única baja. Eloy Valdecanto, asesor de Ciudadanos, también ha dejado la formación.
BARCELÓ, EX DEL ÁMBITO ‘POPULAR’ Y AÑORA A RIVERA
Barceló echa de menos a Albert Rivera, quien apunta que podría volver a la política de la mano del PP. El exlíder de Ciudadanos y Génova tienen “muy buena sintonía”, más cuando el ahora presidente de Martínez-Echeverría & Rivera prepara desde todos los recursos presentados ante el Tribunal Constitucional desde el 2020. Sin embargo, hace buenas migas con el PP también, especialmente con Eva Parera.
La huida de la número dos de Cs es el penúltimo caso de la desbandada entre los ‘naranjas’ tras las debacles electorales en Madrid y Cataluña. Ciudadanos entró en el Ayuntamiento con fuerza, de la mano de Valls en aquellos comicios. No obstante y justo un mes después, se rompió el grupo por completo. BCN pel Canvi se quedaba con dos concejales tras votar favorablemente a Ada Colau como alcaldesa.
En estos momentos, Colau y el PSC tienen el gobierno en una coalición que supera cada día las diferencias, mientras ERC actúa de muleta. “En las últimas votaciones han votado casi todo de forma conjunta”, afirman las fuentes municipales consultadas. “Es un tripartito de facto“, han afirmado.
UNA NUEVA PLATAFORMA PARA INTEGRARSE EN EL PPC
El proyecto de BCN pel Canvi no se quedará únicamente en el ámbito municipal de Barcelona. La intención es poder alcanzar todas las provincias durante el 2022 y poder presentarse con unas mínimas garantías de cara a las municipales de 2023, aunque no se descarta una fusión con los ‘populares’.
El objetivo de los ‘populares’ es aunar a todos los descontentos de Ciudadanos y a Valls, un objetivo que no pudo consumarse en las pasadas elecciones por las fuertes reticencias de los ‘naranjas’. Entonces tenían 36 diputados y una fuerte presencia territorial. La hecatombe de 2021 han hecho crecer al PP, excepto en Cataluña.
El PPC trata de convencer a los descontentos líderes municipales de Ciudadanos, aunque no promete cargo alguno. Recientemente, los ‘populares’ han reorganizado su estructura municipal para tratar de salir del pozo en el que se encuentran. Apenas tienen representantes de peso, aunque hay varios valores al alza.