El vicepresidente de la Generalitat y conseller de Políticas Digitales y Territorio, Jordi Puigneró, ha defendido que los indultos para los presos del 1-O «resuelven siete casos, pero no resuelven ni el exilio ni los 3.000 encausados por el proceso independentista».
En una entrevista en TV3 este sábado, ha avisado de que la mesa de diálogo entre gobiernos es «un primer paso para solucionar el conflicto» pero que pretende reclamar la amnistía.
Ha acusado a algunos partidos de priorizar el debate sobre los indultos y la situación de los presos del 1-O en lugar de garantizar, en sus palabras, la estabilidad y el respeto por la polaridad y las singularidades del territorio: «Esta es la estrategia de algunos partidos en el Estado para ganar cuatro votos».
Para él, «lo que resuelve realmente el conflicto es poner encima de esa mesa de diálogo tres grandes temas: el reconocimiento por parte del Estado de Cataluña como sujeto político que puede negociar de tu a tu; la represión y la amnistía» y un referéndum de autodeterminación.
Ha dicho que desde el Ejecutivo catalán empezarán a estudiar una posible fecha para esa mesa de diálogo, que «sólo tiene que abordar la resolución del conflicto, no de otras cuestiones», y que será el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, quien llevará la iniciativa de ese encuentro.
«SEGUNDO EMBATE»
Ha asegurado que si en esa mesa no se obtienen los resultados esperados, se procederá a «preparar un posible segundo embate que tendrá que estar consensuado con todo el independentismo».
Pese a la moción de confianza pactada entre la CUP y ERC en un plazo de dos años para valorar la gestión del Govern, Puigneró ha defendido que la intención de Junts y del nuevo Ejecutivo es que esta «sea una legislatura que agote los 4 años».
Preguntado por la crisis derivada de la pandemia, ha defendido que 2022 será «el año de la reactivación económica», una lucha que asegura estará compartida y será compatible con la de avanzar hacia la independencia.