Expertos reunidos en el encuentro digital ‘Cuando la mujer es el paciente’, organizado por Europa Press y de Bristol Myers Squibb, han avisado de que las mujeres tardan más en ser diagnosticadas de cáncer de pulmón, de cabeza y cuello o de ictus.
Y es que hay tumores que históricamente han afectado más a los hombres, como por ejemplo el de pulmón, lo que hace que tanto los pacientes como los propios médicos tarden más en pensar en ellos cuando se trata de una mujer.
«El cáncer de pulmón está aumentando a un ritmo de entre un cuatro y un seis por ciento en las mujeres, lo que supone el ritmo más importante en Oncología. Esto se debe a que las mujeres se incorporaron más tarde al hábito tabáquico y a que hasta los propios clínicos no asocian este cáncer a ellas, lo que prolonga el tiempo de diagnóstico», ha detallado el jefe de sección de Oncología Médica del Hospital La Paz de Madrid, Javier de Castro.
Del mismo modo se ha pronunciado la doctora del servicio de Oncología Médica del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid, Yolanda Escobar, quien ha avisado del desconocimiento social que existe en torno al cáncer de cabeza y cuello y ha recordado que puede aparecer tanto por el consumo de alcohol y tabaco, como por la presencia del virus del papiloma humano (VPH).
«Históricamente esta enfermedad también ha sido masculina por el predominio del hábito tabáquico en los varones, pero afecta también a muchas mujeres y, además, desgraciadamente ha aparecido el VPH como un nuevo agente causal, lo que aumenta el estigma social que lleva aparejado la enfermedad, así como los tratamientos que se tienen que realizar para tratar este tumor», ha enfatizado la doctora.
Pero no sólo en estos cánceres hay un retraso en el diagnóstico en las mujeres, sino también en el ictus, como así lo ha señalado la doctora de la Unidad de Ictus del Hospital Universitario Cruces de Bilbao, María del Mar Freijó, quien ha informado de que los ictus en las mujeres son «más extensos y graves» que en los hombres.
«En el ictus hay un retraso en el diagnóstico y esto es especialmente grave si se tiene en cuenta que es una enfermedad en la que los tratamientos efectivos que hay sólo se pueden aplicar en determinados tiempos, por lo que si no se detecta rápido no se puede recibir la terapia indicada, lo que aumenta las posibilidades de incapacidad y mortalidad», ha enfatizado, para avisar de que un 22 por ciento de la población no sabe qué es un ictus y otro porcentaje «nada desdeñable» no sabe que hay que pedir ayuda de forma inmediata.
Por otra parte, durante el encuentro la jefa de Sección de la Unidad de Esclerosis Múltiple del Servicio de Neurología del Hospital Clínico San Carlos, Celia Oreja-Guevara, ha señalado que siete de cada 10 casos de esclerosis múltiple son mujeres, a las cuales se les suele diagnosticar entre los 25 y 35 años.
En este sentido, la doctora ha comentado que a los pacientes les cambia el futuro porque se sigue creyendo que la enfermedad les conduce a estar en una silla de ruedas, lo que les perjudica tanto en su vida laboral como profesional.
Por todo ello, y tras subrayar también las diferencias que suele haber en la atención sanitaria a hombres y mujeres, los doctores han destacado la importancia de mejorar la formación y conocimiento por parte de la sociedad, y de los profesionales sanitarios, sobre estas enfermedades y cómo afectan a las mujeres, así como insistir en la importancia de llevar a cabo hábitos de vida saludables, huyendo del tabaco, teniendo una adecuada alimentación y realizando ejercicio físico.