El ‘sanchismo’ cotiza a la baja en la bolsa de valores política tras el triunfo del Partido Popular en las elecciones autonómicas madrileñas y algunos de los principales enemigos del presidente del Gobierno parecen querer cobrarle viejas facturas.
Especialmente enfadados con Pedro Sánchez se muestran los componentes estelares del ‘felipismo’, que parecen sin poder digerir que el presidente del Gobierno venciera en las primarias socialistas de 2017, pactara con Unidas Podemos y fuerzas independentistas para alcanzar La Moncloa en 2018 y se atreviera a integrar en su Gobierno a Pablo Iglesias en 2020.
FELIPE GONZÁLEZ ABRE EL FUEGO
Felipe González ha abierto fuego contra Pedro Sánchez a través del nuevo podcast que ha lanzado en la plataforma Podimo. El expresidente del Gobierno, sin referirse directamente a su compañero de partido, afirmó que los dirigentes de hoy en día no sintonizan con la calle.
«Cuando todo está mal aparece un tío que te dice que todo está bien y que el futuro es cojonudo. Pero oiga, ¿usted está viviendo la realidad de sufrimiento y de crisis que estoy viviendo? El líder político es el que ofrece un proyecto con una dimensión de medio y largo plazo y con el menor carácter mercenario posible. No pido un proyecto para mí ni para mantenerme en el poder, pido un proyecto que sirva a los ciudadanos«.
LEGUINA Y REDONDO TERREROS
José Bono se ha posicionado en favor de la actual dirección del PSOE por abrir expedientes de expulsión a Joaquín Leguina y Nicolás Redondo Terreros, que participaron en la última campaña electoral de la ‘popular’ Isabel Díaz Ayuso.
Leguina llegó a insultar a la actual cúpula socialista: «Pues ahora vamos a tener la culpa Nicolás y yo de la estrepitosa derrota que han tenido estos imbéciles». Y advirtió: «Si me echa del partido Sánchez volveré cuando se vaya Sánchez».
Algunos militantes emblemáticos del PSOE han salido en favor del expresidente de la Comunidad de Madrid. Es el caso de Juan Carlos Rodríguez Ibarra, que ha llegado a insinuar que personas como Leguina podrían contribuir a pacificar el partido.
Ibarra se refiere a las próximas primarias del socialismo andaluz, que se tendrá que decidir entre la expresidenta Susana Díaz (que no se ha repuesto de su derrota en primarias y de la debacle de 2018) y del alcalde sevillano Juan Espadas.
CEBRIÁN ATACA DE NUEVO
Juan Luis Cebrián, que podría ser considerado miembro insigne del ‘felipismo’ mediático, también ha arreado a Sánchez: «Prisionero de la política errática y oportunista del Gobierno, cualquiera podría darle un empujón si se descuida: los demócratas conservadores o el emergente partido verde, que pugna por apartarse de comportamientos sectarios a medida que la dirección socialista se atrinchera en ellos».
El expresidente de Prisa recuerda que «Pedro Sánchez acostumbra a presumir de que el socialismo ibérico es el último bastión socialdemócrata del continente». Y sentencia: «Debiera ser más cauto en sus declaraciones dada la frenética sangría de votos que en las recientes elecciones autonómicas (Galicia, Euskadi, Madrid) ha experimentado; y convendría no sobrevalorar su pírrica victoria en Cataluña, toda vez que el partido más votado en esos comicios fue la abstención».
Cebrián opina que «el partido socialista ha sido, al menos hasta la llegada al poder de su actual equipo, un elemento esencial para la estabilidad política, el progreso y la justicia social en nuestro país. Su debilitamiento amenaza no solo su futuro, sino el de todo el sistema y el de la izquierda política en general. Sus dirigentes deben atreverse a mirarse al espejo y comprender que en realidad Madrid no ha votado tanto a favor de la derecha, como contra el autismo y la incompetencia del poder central».
