domingo, 15 diciembre 2024

Galicia reprocha el tono «triunfalista» del Gobierno y la falta normativa

El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, ha comparecido a petición propia en el Parlamento autonómico para abordar la evolución de la pandemia, que «no terminó», por ello, ha advertido de que «transmitir el mensaje de que está superada es contraproducente y peligroso», unas palabras de reproche que han estado dirigidas al Gobierno central.

Así, y tras reprobar el tono «triunfalista» del Ejecutivo central, Comesaña ha incidido en que por este motivo la Xunta ha insistido en que el estado de alarma «no podía suponer un punto y final» desde el punto de vista normativo. «Desgraciadamente este aparente interés del Gobierno central de trasladar una imagen triunfalista, de fin de ciclo, no es real», ha recriminado el titular de Sanidade, quien ha apuntado que esto ha llevado a las comunidades a tener que aplicar la «ingeniería normativa» para seguir tomando medidas de restricción para gestionar la pandemia.

«Hoy nos encontramos sin estado de alarma, sin esa reforma (de la ley orgánica) y con un recurso a nuestra ley, porque ni legislan ni nos deja legislar», ha reprochado Comesaña en la comparecencia en la que, en su último turno, y ante las críticas de la diputada del BNG Montse Prado por hablar de esa forma y al tiempo pensar en grandes eventos con diez mil personas, el titular de Sanidade defendió por el contrario que también ha que salir de la «burbuja».

«No podemos vivir en la burbuja permanentemente, sino con normas, normativa y con instrucciones», ha subrayado el conselleiro de Sanidade en la que, ante la insistencia del diputado socialista Julio Torrado, dijo que su postura era la misma que la del PP: «estado de alarma sí» como paso previo a la reforma de la ley orgánica. «Si no hay reforma, estado de alarma no», ha remarcado, preguntado por si apoyaría una nueva situación de este tipo, al respecto de la que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha considerado un último recurso si la justicia no avala las medidas aprobadas por la Xunta y publicadas en el Diario Oficial de Galicia (DOG).

«¿Ley orgánica sí o no?», le devolvió Comesaña al diputado socialista Julio Torrado, quien en su primera intervención lamentó las imágenes que se vieron en varios puntos de España con el fin del estado de alarma el pasado sábado, ante lo cual el conselleiro de Sanidade defendió el proceder de los gallegos.

Julio Torrado también se pronunció en este sentido y destacó el comportamiento de los gallegos, «mucho mejor si se ven otros espectáculos». Sin embargo, ha señalado que las situaciones que se han podido vivir en otros puntos del estado también pueden estar vinculados a «discursos que alimentan la confrontación, el hooliganismo y el fanatismo y odio».

«Con la confrontación permanente pasa esto», ha avisado, antes de advertir de que «las administraciones que trabajan para vivir en la confrontación no ayudan a controlar la pandemia, aunque algunos solo piensen en el corto plazo».

Además, en su intervención, el diputado socialista recriminó que al Gobierno gallego «no le gusta ni el estado de alarma ni ir a los juzgados». «Lo que les gusta es hacer lo que les dé la gana y eso es inconstitucional», ha avisado el parlamentario, que la Xunta «está en la confrontación» del aval judicial a las medidas para gestionar la pandemia y a la que le ha invitado a redactar otra normativa que no «limite libertades» constitucionales.

«Me sorprende la crítica tan exacerbada», ha continuado, por su parte, la diputada nacionalista Montse Prado, al respecto del Ejecutivo autonómico y el fin del estado de alarma. Así, recordó que los populares dijeron que votarían «no» en el caso de que el Gobierno volviese a llevar la prórroga al Congreso por «considerarla una herramienta estéril».

Además, la diputada del BNG ha manifestado que «sorprende» que «tuviese que llegar una pandemia» para que la Xunta «se diese cuenta de que el marco autonómico no sirve para solucionar los problemas gallegos» y que hay que estar «a expensas de lo que diga Madrid, que casi nunca lo hace a favor de los intereses de los gallegos».

Montse Prado ha concluido, también, que el PP «parece que quiere una cosa, cuando en realidad quiere la contraria». «Estoy convencida de que ya sabía que teníamos escasas herramientas para actuar, tenemos un autogobierno raquítico», ha enfatizado la diputada nacionalista, quien también ha mostrado su «sorpresa» por la «preocupación» por el aval judicial pese a lo que la Xunta «publicó las medidas en tiempo de descuento» y «luego ninguna prisa por trasladarlas al TSXG».

«LEALTAD»

Mientras la diputada del PPdeG Encarna Amigo defendió la «lealtad» del Gobierno autonómico con el Gobierno central, el conselleiro de Sanidade volvió a recriminar que el Ejecutivo que dirige Pedro Sánchez «ni legisla ni deja legislar».

«Hemos sido leales», dijo, asimismo, Comesaña, quien lamentó que el Gobierno central solo «estuvo rápido» en la presentación del recurso de inconstitucionalidad contra la ley de salud gallega. En concreto, se presentó contra el artículo 38.2 de la normativa, si bien esta ley ha servido de argumentación de la Xunta para establecer las medidas recogidas en el DOG el pasado 7 de mayo y para remitir los argumentos ante el TSXG.

Comesaña ha lamentado en que al Gobierno «solo se le ocurre judicializar la pandemia al cuadrado». «A los gobiernos nos eligen para gobernar y se desentiende de todo. No quiere que los datos negativos tengan que ver con ellos, pero sí las cajas de las vacunas y el proceso de vacunación autonómico», ha recriminado Comesaña, quien ha dicho que la Xunta asumirá el «coste» de gobernar para los gallegos. «No vamos a dejar de lado a los gallegos, aunque tengamos que asumir un coste», ha manifestado.

Comesaña ha insistido en que en todos los consejos interterritoriales Galicia ha pedido «herramientas» para la gestión de la pandemia. «El estado de alarma nos daba herramientas y el problema es que esas herramientas no están», ha indicado, para censurar, a renglón seguido, que tampoco «hay una alternativa», en referencia a una ley orgánica renovada.

«REPULSA»

En sus respuestas, Comesaña también ha querido mostrar su «repulsa» a las concentraciones que hubo en varias ciudades, aunque ha precisado que «en Galicia no se dieron».

Además, ha atribuido a que aquí ha primado el «sentidiño» tanto de la población como de los sectores implicados –hostelería, ayuntamientos, fuerzas y cuerpos de seguridad– y también ha reivindicado que «algo tendrá que ver la coordinación de la Xunta», después de la experiencia del «famoso fin de semana de las terrazas», en referencia a la primera desescalada.