jueves, 12 diciembre 2024

Alonso intentará formalizar una coalición con Cs y socialistas descontentos

El presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, ha recordado que este martes se ha procedido a la disolución del Parlamento vasco de cara a las elecciones del 5 de abril y, por lo tanto, se dará prisa porque dispone de diez días para poder formalizar en Euskadi una coalición con Ciudadanos, en la que también intentará aglutinar a «desencantados» del PSE-EE para «frenar el poder del PNV, que utiliza de palanca de chantaje a nivel nacional para debilitar el proyecto común de España».

Además, ha advertido de que «las prioridades» del Lehendakari, Iñigo Urkullu, son «romper la caja única de la Seguridad Social, conseguir beneficios para los presos, quitar presencia al Gobierno de España y aprovechar la situación catalana para ir ellos detrás».

En una entrevista a Onda Cero, recogida por Europa Press, Alonso cree que, en parte, con la convocatoria de elecciones vascas el 5 de abril, «se quiere evitar la contaminación de la situación de Cataluña porque la sociedad vasca no quiere seguir ese camino».

«Eso causa mucho temor, aquí no hay un ambiente a favor del lío, de la ruptura, de enfrentamiento social. Ya hemos pasado por esas circunstancias», ha apuntado, para recordar que Euskadi sufrió 50 años de terrorismo y de división política.

No obstante, ha apuntado que en el País Vasco «hay dinámicas propias y esta legislatura ha sido muy pobre en el resultado legislativo, en acción de Gobierno. Además, ha afirmado que el Lehendakari ha tomado «rumbos diversos».

«Empezó la legislatura acordando con el PP, apuñaló a Mariano Rajoy en aquella moción de censura después de pactar los Presupuestos. A partir de ahí fue variando, llegó a un acuerdo con EH Bildu para unas bases soberanistas, con el derecho de autodeterminación, etc, intentó llegar a un acuerdo de Presupuestos con Bildu, no salió adelante, después volvió a girar y el último acuerdo que tuvo fue con Podemos, que es el socio sólido de este Gobierno de Pedro Sánchez», ha manifestado. Por tanto, ha añadido que la legislatura vasca «estaba agotada ya el año pasado».

El líder de los populares vascos ha señalado que «confiar en el PNV es una candidez». «No es nada seguro llegar a un acuerdo con el PNV porque uno puede ser objeto de traición en cualquier momento, según su interés», ha asegurado.

Alfonso Alonso ha insistido en que el partido jeltzale «actuó con deslealtad» con el PP. «No ha tenido Urkullu una legislatura leal, ni ha sacado adelante trabajo, ni ha podido llevar a término su programa. No ha conseguido romper la situación de minoría, jamás ha podido gozar de una confianza clara en el Parlamento porque al socio que se la podía haber dado, que éramos nosotros, lo despreció», ha manifestado.

En este sentido, cree que el Lehendakari «quiere ahora fortalecer su poder, hacer palanca y presionar en Madrid«. «Ya sabemos cuáles son las prioridades y los objetivos: romper la caja única de la Seguridad Social, conseguir beneficios para los presos de ETA, arrancar transferencias, quitar presencia al Gobierno de España y al Estado en el País Vasco, y seguramente, aprovechar la situación catalana para ir ellos detrás», ha advertido.

Alonso cree que el PNV «es especialista en recoger nueces, pero no en mover árboles». «Ellos mueven mal el árbol. Cuando lo hicieron con el Plan Ibarretxe, les salió mal, pero son muy hábiles recogiendo nueces y ahora quieren que los catalanes hagan el desgaste y ellos ir detrás a ver qué les cae«, ha manifestado.

ALONSO, CANDIDATO A LEHENDAKARI

El presidente del PP vasco ha apuntado que la candidatura a Lehendakari por su partido la decide el comité nacional. «Por lo tanto, hasta que no se reúna y no proclame la candidatura, no soy candidato. Pero, creo que es lo que va a suceder. Tengo la confianza del presidente (Pablo Casado) y ese debate se ha zanjado», ha apuntado.

El líder de los populares vascos ha admitido que ya ha habido unos primeros contactos con Ciudadanos y hay «disposición» por parte de la formación naranja para llegar a un acuerdo en el País Vasco. «El acuerdo tiene una capacidad más cualitativa que de numero, de movilización. Nosotros tenemos que movilizar a un electorado que no tiene por qué resignarse al régimen de los nacionalista, que está implantando aquí el PNV», ha manifestado.

A su juicio, la formación jeltzale no se sabe «si es de izquierdas, de derechas o de qué«, sino que «es una maquinaria de poder que invade todos los ámbitos de la sociedad y los socios ahora son el PSE-EE y Podemos». «Creo que aquí hay una parte muy importante de la sociedad que cree en España, en nuestros marcos de convivencia, en la Constitución, en el Estatuto de Gernika, que piensa que tiene que ampliarse el ámbito de la libertad de las personas, que no tenemos que estar todos sometidos al poder de un partido», ha subrayado.

Alfonso Alonso ha considerado que un pacto entre los que piensan de esta forma «puede devolver la ilusión al votante y las ganas de apoyar ese proyecto». Además, ha apuntado que a él «nadie le ha discutido» como candidato en Ciudadanos.

En su opinión, «la gente que cree en la Constitución, ya no es una cuestión de izquierdas o de derechas, puede apoyar» una plataforma entre populares y Ciudadanos, si se logra sacarla adelante. «Yo respeto mucho a Cs, su aportación es importante porque ir unidos siempre suma, pero en las últimas elecciones ellos sacaron el 1,1% de los votos en el País Vasco», ha indicado.

En esta línea, ha recordado que el partido naranja «tiene una dificultad para entrar» en Euskadi, porque «no es considerado un partido que tenga raíces aquí«. «A pesar de eso, yo creo que su contribución es importante, pero también conviene recordar que, en una negociación, partimos de la realidad de cada cual, y la realidad de Ciudadanos en el País Vasco ahora mismo es esa», ha subrayado.

Por ello, ha dicho que el proyecto del PP vasco es el que «se tiene que fortalecer». «No vamos a cambiar de proyecto político, sino ampliarlo», ha señalado.

DIFICULTADES

En cuanto a la bajada de apoyo electoral del partido Popular en Euskadi en los últimos años, Alonso cree que ETA «ya no mata», pero los populares «pagaron un coste muy elevado». «Cuando las aguas se retiraron, habíamos sido laminados, expulsados de la mayor parte de los municipios del País Vasco», ha manifestado.

En esta línea, ha admitido que les está costando «otra vez ir para adelante, ir ganando los espacios que nos arrebataron«. También ha subrayado que el partido en Euskadi «es muy sensible» a las dificultades que puede tener la formación en el ámbito nacional. «Nos castiga con mucha más fuerza», ha indicado.

Por ello, cree que el PP vasco ha tenido que «luchar contra todas esas cosas, contra el oportunismo permanente del PNV» y no tiene los votos de antes. En su opinión, el nacionalismo «está imponiendo un régimen que lo controla todo, desde el punto de vista económico, social y mediático».

Alfonso Alonso piensa oponerse a «esa burbuja nacionalista que lo ahoga todo». También ha llamado a aglutinar a los socialistas «desencantados» por la posición de «subordinación» del PSE-EE a los jeltzales. Por ello, pretende «frenar a este poder del PNV que utiliza de palanca de chantaje a nivel nacional para debilitar el proyecto común de España».

Tras insistir en que su partido tiene diez días para formalizar una coalición electoral, para lo que «hablará con todo el mundo», ha zanjado la polémica sobre la posibilidad de que Rosa Díez pudiera concurrir como candidata. «En esta vida y cuando están en juego las cosas que son serias, ya no es tiempo de experimentos, sino de certidumbres», ha concluido.