El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha abogado por un paquete de medidas para Justicia que lleve la eficiencia a cada persona y a cada territorio. «Queremos diseñar, entre todos, un modelo que nunca antes ha existido, un paquete de medidas que dote al sector de esa eficiencia que nunca antes ha tenido», ha afirmado.
Campo ha participado en los ‘Diálogos Institucionales’ organizados por el Ministerio de Justicia, con la colaboración del Ilustre Colegio de Abogados de Cádiz (ICAC) y la Fundación Cajasol, junto al presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Lorenzo del Río Fernández, y el decano del Ilustre Colegio de Abogados de Cádiz, Pascual Valiente Aparicio.
Allí, el ministro de Justicia ha hecho una exposición de los planes en los que trabaja el Ministerio con el objetivo de conseguir una Administración de Justicia eficiente y que llegue a toda la ciudadanía y ha aludido a las tres leyes de eficiencia en las que trabaja su equipo, «tremendamente transformadoras», y que son «clave» para este objetivo: la ley de eficiencia procesal, la de eficiencia organizativa y la ley de eficiencia digital.
Campo ha hecho referencia a algunas de las principales figuras que se contemplan dentro de ellas y que darán un «giro importante» a la Justicia, ya que contribuirán a esa gestión y organización más eficientes, y ayudarán a reducir la brecha territorial, digital y ecológica, acercando al ciudadano los servicios públicos independientemente del lugar en el que habite.
Dentro de la primera de las leyes, que ya está en marcha, la de eficiencia procesal, Campo se ha referido, a los Medios Adecuados de Solución de Controversias (MASC). «No hay mejor mecanismo para impulsar la cohesión social que resolver los problemas sin necesidad de un juez», ha afirmado.
En relación al trabajo que su equipo está haciendo para mejor la eficiencia procesal, se ha referido también a la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECrim). En este sentido, ha manifestado que el nuevo anteproyecto «supone un giro copernicano en lo que a la orientación del modelo del proceso penal se refiere, que es un termómetro para ver el estado democrático de un país». Según Campo, «está plenamente en consonancia con lo que exige Europa.
En cuanto a la ley de eficiencia organizativa, el ministro de Justicia ha destacado las figuras del Tribunal de Instancia, la Oficina Judicial y la Oficina de Justicia en los municipios, que supondrán herramientas básicas para llevar la eficiencia y la modernización a la Justicia en España.
«La Oficina de Justicia en los municipios es especialmente importante en las zonas rurales, ya que contribuye a vertebrar el país y a superar el reto demográfico», ha destacado Campo.
En cuanto a la Ley de Registro Civil, que este viernes entra en vigor, también ahonda en este objetivo, según ha explicado el ministro, ya que se trata de una norma «igualmente transformadora, que afecta a todos y cada uno de nosotros, porque es una ley para todos los ciudadanos, centrada en cada persona».