sábado, 23 noviembre 2024

Desarticulada una red de estafas sentimentales y de tipo CEO por internet

La Guardia Civil ha desarticulado, en el marco de la operación «Boden», a una organización criminal dedicada a la comisión de estafas patrimoniales de tipo CEO y sentimentales a través de Internet. Para las primeras se encargaban de suplantar la identidad de otra persona para obtener beneficios económicos con ello.

El resultado de la operación es de 25 personas detenidas y otras 4 investigadas por supuestos delitos de estafa, blanqueo de capitales, pertenencia a grupo criminal, falsedad documental y usurpación de identidad.

Además, los agentes de la Benemérita han detectado 18 identidades falsas. Estas eran utilizadas por la red criminal para dar de alta diferentes productos financieros y líneas telefónicas con el objetivo de cometer los mencionados delitos.

ESTAFAS DE TIPO CEO

La operación dio comienzo después de la denuncia presentada por el representante de una conocida empresa de cerámica de Castellón. En ella ponía en conocimiento de la policía que uno de sus clientes, una empresa localizada en Barbados (Estados Unidos), había recibido un correo electrónico con datos de cobro de una factura pendiente con su empresa cerámica.

Al recibir la misma, el cliente estadounidense hizo efectivo el pago de 27.383,12 euros mediante transferencia bancaria. El destino del importe fue la cuenta bancaria indicada en el email que había recibido.

Posteriormente se dieron cuenta de que habían sido víctimas de una estafa de tipo CEO. Fue al percatarse que la cuenta bancaria indicada en el correo electrónico no correspondía con la real de la empresa cerámica de Castellón. De esta forma, la red criminal suplantó a esta con el objetivo de obtener el dinero de una supuesta deuda pendiente por parte de la empresa sita en Barbados.

ESTAFAS SENTIMENTALES

En el desarrollo de la investigación, la Guardia Civil pudo constatar que la organización investigada, además de cometer estafas a empresas, también realizaba estafas sentimentales.

Para este tipo de delito, los autores creaban perfiles falsos en las redes sociales. Con ellos conseguían, a través de engaños, enamorar a sus víctimas y establecer una relación sentimental virtual. Cuando afianzaban la relación, los estafadores utilizaban diferentes pretextos, como una dificultad en su vida, para solicitar ayuda económica a la víctima.

En ocasiones, a la misma víctima le solicitaron varios préstamos, a las que accedieron para así satisfacer las demandas de los ciberdelincuentes.

MULAS ECONÓMICAS

La mayor parte de los miembros de la organización criminal tenían su residencia en Móstoles (Madrid). Allí se encargaban de la captación de «mulas económicas«. Estas eran las encargadas de recibir el dinero negro por parte de terceros para, a continuación y previa compensación económica, blanquearlo para devolverlo a la organización.

Los investigadores han podido encontrar víctimas en numerosos países, por lo que se ha contado con la colaboración de las autoridades respectivas de estos. Toda la operación ha sido coordinada por INTERPOL y EUROPOL, gracias a los cuales se ha podido acceder a denuncias presentadas por las víctimas.

Se han localizado víctimas en España, India, Jordania, Polonia, Suecia, Uganda, Estados Unidos, Egipto, Brasil, Canadá, Nueva Zelanda, Turquía, Rusia, Bélgica, Finlandia, Reino Unido, Republica Checa, Tailandia, Irán, Malta, Kenia, China, Alemania, Austria, Lituania, Suiza, Dinamarca, Italia, Barbados, Francia y Nigeria.

Desarticulada en Castellón una red dedicada a cometer estafas patrimoniales tipo CEO
Se ha detenido a 25 personas e investigado a otras 4 por supuestos delitos de estafa, falsedad documental, pertenencia a organización criminal, blanqueo de capitales y usurpación de identidad.

139 ESTAFAS TIPO CEO Y SENTIMENTALES

En total, la Guardia Civil ha podido detectar cerca de 139 estafas, cuyo valor asciende a 1.332.340 euros. La actividad criminal se habría desarrollado entre los años 2010 y 2019. No obstante, los investigadores aún siguen recibiendo nuevas denuncias de más perjudicados en diferentes países.

Con motivo de la operación «Boden» se han investigado más de 173 cuentas bancarias de entidades nacionales. Eran empleadas por parte de la organización criminal para transferir el dinero obtenido por sus estafas a los diferentes miembros de la red. Con esta acción lograron complicar la labor policial a la hora de llevar a cabo el seguimiento de la trazabilidad del dinero.

Durante la investigación se han practicado sendos registros en las localidades de Valmojado y Cassarrubios del Monte, en Toledo. En ellos se incautó dinero en efectivo, material informático, dispositivos de almacenamiento y teléfonos móviles. Tras su análisis se ha podido hallar numerosa documentación y programas informáticos empleados para la comisión de estafas de tipo CEO y sentimentales.

La Guardia Civil recomienda que, para evitar estafas patrimoniales tipo CEO, se contraste con el proveedor final cualquier notificación que suponga una modificación en el patrón de las facturas de pagos y cobros.

La operación policial ha estado dirigida por parte del Juzgado de Instrucción nº 1 de Toledo y desarrollada por parte de agentes del Equipo de Delitos Informáticos y Telemáticos (EDITE)de la Comandancia de la Guardia Civil de Castellón. Además han colaborado efectivos de la USECIC de la Comandancia de la Guardia Civil de Toledo, Puesto Principal de Valmojado (Toledo), Equipo de Policía Judicial de Pinto (Madrid), Equipo de Policía Judicial de Las Rozas (Madrid) y Unidad Técnica de Policía Judicial.

ESTAFA DEL CEO, UN TIMO MILLONARIO

Uno de los ciberdelitos más frecuentes es la suplantación de identidad. En él los delincuentes se hacen pasar por otra persona para obtener un beneficio, que generalmente es económico.

Para ello, este tipo de criminales envían correos electrónicos o realizan llamadas indicando la necesidad de satisfacer un pago de manera urgente. Es un fraude que ya ha costado más de 2.300 millones de euros en todo el mundo. Sin embargo, es un timo «silenciado».

Para evitar el daño que pueda provocar a nivel de reputación, muchas empresas que han sido víctimas de este tipo de estafa prefieren ocultarlo públicamente. De esta manera provocan que se consiga invisibilizar este problema que crece anualmente.

A diferencia de lo que ocurre con otros timos y fraudes relacionados con la suplantación de identidad, como el phising, este tipo de estafa no se basa en una trampa para que el usuario pueda caer en la misma sin importar quién sea ni sus posibilidades.

DIRIGIDO A EMPRESAS

En este caso se trata de un ataque que está dirigido y está diseñado especialmente para una víctima en particular. Para ello, los ciberdelincuentes recopilan la máxima cantidad de datos posibles, de forma que pueden dar un mayor realismo a sus peticiones.

Habitualmente incluso recurren a ataques de malware para recabar información que les permita hacerse pasar por el directivo o CEO de una empresa. Para ello imitan las palabras y el estilo utilizado por éste para, posteriormente, hacer la solicitud vía telefónica o e-mail de determinada cantidad de dinero. Este contacto se realiza con personas que forman parte del equipo de administración y finanzas de la empresa objetivo, y que sea el responsable de realizar movimientos de dinero.

Al emplear una forma de expresarse similar a la de un alto ejecutivo de la empresa o de algún proveedor, se genera una confianza que hace que se acceda en muchas ocasiones al pago del importe reclamado.