La Princesa de Asturias ha ejercido este jueves de madrina en la ceremonia de puesta a flote del submarino S-81 ‘Isaac Peral’, el primero de la serie S-80 destinado a la Armada que Navantia va a poner en marcha y que para su diseño ha optado por el Manual de Ingeniería de Sistemas de la NASA, en el que se definen los procesos necesarios y los hitos de revisión requeridos.
La ceremonia, que se ha desarrollado en el astillero de la dársena de Navantia, ha estado presidida por Sus Majestades los Reyes, la propia Princesa Leonor y su hermana, la Infanta Sofía, acompañadas por Manuel Muñiz, secretario de Estado de la España Global.
Se trata de la segunda vez que la Región de Murcia cuenta con la presencia de la Princesa Leonor y la Infanta Sofía. En mayo de 2014 acompañaron a los entonces Príncipes de Asturias a los actos conmemorativos del 25 aniversario de la XLI promoción de tenientes de la Academia General del Aire (AGA) en San Javier.
A su llegada han sido recibidos por el presidente del Ejecutivo murciano, Fernando López Miras; Margarita Robles, ministra de Defensa; Alberto Castillo, presidente de la Asamblea Regional; José Vélez, delegado del Gobierno en Murcia; Ana Belén Castejón, alcaldesa de Cartagena; Belén Gualda, presidenta de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales; y Ricardo Domínguez, presidente de Navantia.
Tras saludar a los embajadores en España de Marruecos, India, Grecia, Australia y Canadá, así como al jefe del Estado Mayor de la Defensa, Teodoro Esteban López; a la secretaria de Estado de Defensa, Esperanza Casteleiro; al jefe del Estado Mayor de la Armada, Antonio Martorell; al director de Operaciones y Negocios de Navantia, Gonzalo Mateo-Guerrero; y al director del Astillero de Cartagena de Navantia, Agustín Álvarez, se han realizado una fotografía ante una placa conmemorativa.
Posteriormente, han recorrido el interior de las oficinas, donde han visitado el Centro de Diseño Virtual y se ha realizado una visita virtual al submarino.
Durante la ceremonia, cuya maestra ha sido la periodista Elvira Bernabéu, se ha proyectado un video sobre el centenario de la puesta a flote del primer submarino en las instalaciones de Navantia.
HITO HISTÓRICO
En el turno de intervenciones, Martorell ha destacado que se trata de «un hito de gran trascendencia en un programa vital para la defensa de España y la industria nacional». Palabras a las que se han sumado tanto la ministra de Defensa como el presidente de Navantia.
El jefe del Estado Mayor de la Armada ha reseñado que «si hoy estamos aquí es gracias, en gran parte, a quienes nos precedieron de la Armada y Navantia», a los que ha reconocido su esfuerzo y dedicación, porque «pusieron las bases para que hoy podamos vivir un momento histórico».
Este submarino, ha dicho, «constituye la prueba fehaciente de la capacidad industria española y su apuesta por la innovación tecnológica».
Pero, ha continuado, «tras este hito aún quedan retos por superar, como las exigentes pruebas de mar del submarino, la creación de su modelo de sostenimiento, que supondrán verdaderos desafíos para todos los que forman parte del programa».
Martorell no ha querido concluir su intervención sin antes tener palabras de reconocimiento para los submarinistas españoles, marinos de guerra, de los que ha elogiado su espíritu de sacrificio que «desde las profundidades sirven a España a bordo de los submarinos de la Armada».
Por su parte, la ministra de Defensa, Margarita Robles, que ha comenzado su discurso teniendo un recuerdo a los compatriotas españoles que han fallecido por la COVID y a sus familias, ha resaltado que hoy «es un día histórico, porque hacemos que nuestras Fuerzas Armadas sean cada día más potentes».
España es un ejemplo en Europa y en el mundo», ha subrayado la ministra, quien ha destacado la proyección internacional de este país. Respecto al submarino, ha explicado que es «ciencia, innovación, tecnología y futuro.
El presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, ha celebrado este hito histórico para «la defensa nacional y Navantia». Según ha confesado, el S-81 «ha supuesto un enorme desafío», constituyendo «el mayor reto tecnológico afrontado por nuestra industria de defensa».
Aunque ha reconocido que el camino no ha sido fácil, como lo prueba el hecho de que «para la construcción del navío se han empleado más de tres millones de horas frente a las 50.000 horas que se necesitan para un avión», ha manifestado que la clase S-80 «es ya una realidad» y éste «el submarino convencional más avanzado del mundo».
Ha elogiado, igualmente, la «amplia» experiencia con la que cuenta el astillero de Cartagena en la construcción de submarinos, ya que de los 39 que prestan servicio a la Armada, 27 de ellos han salido de estas instalaciones.
Domínguez no ha querido concluir sin parafrasear al científico y marino cartagenero Isaac Peral: «En la ciencia, en la innovación tecnológica está nuestro futuro».
El acto ha continuado con la proyección del video ‘S81 navegando’ y a su término se ha procedido a la ceremonia de puesta a flote del navío ‘Isaac Peral’, que el capellán ha bendecido.
Su Alteza Real la Princesa de Asturias, acompañada por Su Majestad el Rey, se ha dirigido hacia el submarino S-81 y ha cortado la cinta por la que se ha accionado el mecanismo para estrellar la botella de vino tinto que la Armada ha elegido para la ocasión contra la amura del navío.
El acto ha concluido con el himno nacional y la instantánea de Sus Majestades los Reyes y Sus Altezas Reales la Princesa de Asturias y la Infanta doña Sofía junto al submarino y una segunda fotografía de grupo con la dotación de quilla del submarino S81.
BUQUES DE ÚLTIMA GENERACIÓN
El S-81 se pondrá a flote la próxima semana, según confirmaban a Europa Press fuentes de Navantia. La finalidad del programa S-80 es tratar de proporcionar unos buques de última generación que dieran a la Armada ventaja tecnológica en un entorno impredecible y capacitar a la industria nacional para diseñar y construir un tipo de barco que sólo está al alcance de un reducido grupo de países, según Navantia.
El programa representa un antes y un después en la construcción naval española. El buque resultado de este proyecto está considerado uno de los submarinos convencionales (los no dotados de propulsión nuclear) más avanzados del mundo.
En su interior contará con tecnologías únicas, como un innovador sistema para realizar patrullas bajo el agua durante más de 15 días sin la necesidad de salir a flote, y permitirá a la Armada dar un salto abismal en cuanto a capacidades, reforzando un arma submarina en la que hoy solo cuenta con dos veteranos submarinos, el ‘Galerna’ y el citado ‘Tramontana’.
El S-81, con unas 3.000 toneladas de desplazamiento, dejará atrás el taller para entrar en el agua, donde comenzará una fase de exhaustivas pruebas, primero en puerto y, después, en mar abierto, que concluirán a principios de 2023 con la entrega del buque a la Armada, según el calendario previsto.
De manera paralela a la puesta a flote del S-81, Navantia trabaja ya en los demás buques del programa: en el S-82 se trabaja en la fabricación de estructuras no resistentes y el embarque de tanques en todas las secciones y comenzado premontaje de tuberías y equipos.
En el S-83 se ha terminado el casco resistente y han comenzado los trabajos de aceros: construcción de tanques, fabricación y montaje de polines y soportes. Mientras que en el S-84 ha comenzado la elaboración de cuadernas del casco resistente.
La Armada iniciará las operaciones con el S-81 ‘Isaac Peral’ en febrero o marzo de 2023. Después, llegarán el S-82 ‘Narciso Monturiol’, en diciembre de 2024; el S-83 ‘Cosme García’, en octubre de 2026; y el S-84 ‘Mateo García de los Reyes’, en febrero de 2028.