El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha acordado recurrir ante los tribunales el trasvase del acueducto Tajo-Segura de 13 hectómetros cúbicos realizado el pasado mes de octubre, que contenía una parte para regadío.
«Con este recurso ponemos en evidencia el incumplimiento de una sentencia que es firme. No estamos en absoluto de acuerdo, porque en las reglas de explotación del trasvase se aprecian errores y omisiones flagrantes que suponen el incumplimiento de la ley», ha defendido la portavoz del Ejecutivo regional, Blanca Fernández, que en rueda de prensa ha dado cuenta de los acuerdos aprobados esta semana.
«Queremos que se cumplan las diversas sentencias que permitan tener caudales ecológicos al río Tajo, que le permitan lograr un buen estado de salud. Con este recurso ponemos en evidencia el incumplimenbto de una sentencia que es firme», ha esgrimido la portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, que también ha denunciado que las continúas derivaciones impiden mantener una lámina de agua estable, «conculcando los derechos que, como cuenca cedente, tiene Castilla-La Mancha y los pueblos ribereños.
Así las cosas, ha añadido que el Gobierno regional recurre también la «falta de transparencia» en los datos relacionados a los volúmenes embalsados y la evaporación, determinantes para adoptar la decisión de trasvasar agua.
«Se toman con medidas incorrectas, pues se refieren a la cuantía que tienen Entrepeñas y Buendía pero las mediciones se efectúan aguas abajo en Bolarque y Bujeda, de manera que no se corresponden los datos de las mediciones con el estado real de los embalses», ha alertado.
«Por tanto, este recurso se basa en la defensa de los intereses de Castilla-La Mancha y de los pueblos ribereños, en la falta de transparencia y la mala medición de datos y en el incumplimiento reiterado de los caudales ecológicos del Tajo, algo esencial para la supervivencia del río», ha concluido apostillando.