El magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena opina que “no es ilógico” que la Justicia belga haya decidido posponer la vista sobre las euroórdenes que él mismo dictó contra el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y los exonsejeros Toni Comín y Lluis Puig. El juez entiende que se quiera conocer primero el posicionamiento del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) acerca de la supuesta inmunidad de los líderes independentistas.
En declaraciones a MONCLOA.COM, Llarena ha reconocido que la decisión tomada por el juez de primera instancia de Bruselas de aplazar la vista al 3 de febrero no es de extrañar teniendo en cuenta que la Corte de Luxemburgo se va a pronunciar por primera vez en apenas dos días, este jueves 19, sobre el alcance de la inmunidad de los eurodiputados catalanes electos, en concreto, sobre la del líder de ERC, Oriol Junqueras.
DIFERENCIAS ENTRE JUNQUERAS, PUIGDEMONT Y COMÍN
Sin embargo, el magistrado ha subrayado que, en el caso de que el TJUE se pronunciara de forma favorable a las pretensiones de Junqueras sobre su inmunidad europarlamentaria, su caso no es homologable al de Puigdemont y Comín, quienes sacaron sendos escaños en las elecciones europeas del pasado mayo por la lista de JxCat (Lliures per Europa).
A pesar de que los tres alcanzaron los votos necesarios para lograr un asiento en la Eurocámara, ninguno logró alcanzar la condición plena de eurodiputado por no retirar el acta en Madrid. Es ahí donde para Llarena radica la principal diferencia entre Junqueras, condenado a 13 años de prisión por el Tribunal Supremo por sedición y malversación, y los huidos de la Justicia española Puigdemont y Comín.
De este modo, el juez recuerda que mientras que el líder de ERC no recogió el acta el pasado mes de junio porque no se lo permitió expresamente el Tribunal Supremo, los dos prófugos no lo hicieron porque “voluntariamente” no quisieron regresar a España para cumplimentar ese trámite obligatorio.
Llarena señaló a este periódico que el jueves será importante prestar atención a la sentencia del TJUE para ver “qué dice y cómo lo dice” sobre Junqueras y comprobar hasta qué punto su pronunciamiento será extensible a Puigdemont y Comín, quienes también han reclamado al tribunal de Luxemburgo.
LA OPINIÓN DEL ABOGADO DE LA UE
Llarena también ha indicado que habrá que fijarse en los “matices” que la sentencia introduzca a la opinión expresada por el abogado general del TJUE, Maciej Szpunar, el pasado 12 de noviembre.
Aunque sus opiniones no son vinculantes sí que suelen orientar la decisión del tribunal y, en este caso, concluyó que Junqueras debería haber sido considerado eurodiputado desde la proclamación de los resultados de las elecciones al Parlamento Europeo en mayo y haber gozado desde ese momento de inmunidad parlamentaria.
No obstante, el letrado señaló que esa decisión no tendría efecto porque el líder independentista está condenado por el Tribunal Supremo desde el pasado 14 de octubre a 13 años de inhabilitación por lo que recomendó al tribunal que se declarara incompetente teniendo en cuenta que su decisión sería “inoperante”.
PROCEDIMIENTO CONJUNTO
A pesar de que el caso del exconsejero Puig es diferente al de Puigdemont y Comín porque a él no le afecta la cuestión de la inmunidad europarlamentaria, el magistrado de Bruselas que examina los tres casos decidió este lunes continuar con el procedimiento de forma conjunta.
De este modo, y tal y como informaron los abogados belgas de los reclamados, Paul Bekaert y Christophe Marchand, la nueva vista sobre su extradición a España se tendrá lugar, para los tres, el próximo 3 de febrero.
REACTIVACIÓN DE LA EUROORDEN
Por el momento, ninguna de las euroordenes dictadas contra los políticos independentistas fugados han prosperado. Fue la jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela quien cursó las primeras órdenes de detención contra los fugados ante las sospechas de delito. Llarena fue el segundo, pero terminó por retirarlas a la espera de comprobar cómo avanzaba el juicio en el Supremo de los doce encausados que no se escaparon de la Justicia española, es decir, Oriol Junqueras, Raül Romeva, Joaquim Forn, Jordi Sànchez, Jordi Turull, Josep Rull, Jordi Cuixart, Carme Forcadell y Dolors Bassa, Carles Mundó, Santi Vila y Meritxell Borràs.
El mismo día en el que se conoció la sentencia del Alto Tribunal, Llarena reactivó la orden para Puigdemont, mientras que fue el 5 de noviembre cuando hizo lo propio contra los exconsejeros Comín, Puig y Clara Ponsatí, esta última huida en el Reino Unido a diferencia de sus compañeros que se encuentran en Bélgica.
El juez hizo la solicitud a través de un auto de 59 páginas en el que consideraba plenamente justificada la petición de la Fiscalía para emitir esas euroórdenes formulada el pasado 31 de octubre.
