El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, se ha puesto el delantal para ayudar a los colectivos que considera en riesgo de exclusión social, tal y como hizo su antecesora en el cargo Manuela Carmena. Sin embargo, pese a que los suyos esperaban que se mantuviera con un perfil más conservador, Almeida ha elevado la apuesta de la jueza y ha dado más dinero para la integración de subsaharianos y africanos que lo que le dio en 2018 la líder de Ahora Madrid. En el último año del mandato de Carmena, los subsaharianos recibieron del Área de Gobierno de Familias, Igualdad y Bienestar social hasta 330.000 euros públicos. En el año 2020, con Almeida al frente y en plena pandemia, el alcalde les ha regalado 335.000 euros. Una realidad que también se deja entrever con el colectivo gitano, al cual Carmena no dio un duro en su último año de mandato y a quienes Almeida ha regado con 256.000 euros en plena pandemia.
Que Almeida haya subido la apuesta en materia de inversión directa a estos colectivos se justifica desde el Partido Popular en que el delegado del Área de Gobierno de Familias, Igualdad y Bienestar Social, José Aniorte Rueda, pertenece a Ciudadanos y se escapa a su control. En cualquier caso, es la administración del alcalde de Madrid la que ha incrementado las ayudas dadas por Carmena el último año a colectivos que consideran en riesgo de exclusión social, como son las personas de etnia gitana, los subsaharianos y los africanos; por no hablar de los colectivos LGTBI, que el chollo a nivel de subvenciones públicas que tenían con Carmena no ha frenado con el gobierno de Almeida ni en plena pandemia.
Concretamente, los datos a los que ha tenido acceso en exclusiva MONCLOA.com dejan entrever que Almeida ha dado 5.000 euros más en ayudas a extranjeros de un origen concreto. Se trata de, tal y como se refleja en el documento al que ha tenido acceso este medio, una subvención concedida en diciembre de 2020 de 335.000 euros en total acogida a «población de origen subsahariana, países de África y de Oriente Medio». Carmena dio en 2018 algo menos a este mismo colectivo. Concretamente, 330.000 euros públicos para el mismo supuesto.
Lo mismo ocurre con las personas de etnia gitana, otro colectivo cultural que obtiene subvenciones directas por el mero hecho de ser considerados por el Ayuntamiento de Madrid como un colectivo en riesgo de exclusión social. Manuela Carmena no les dio ni un euro en 2018. Sin embargo, Almeida sí que les ha concedido en diciembre de 2020 una jugosa ayuda en forma de subvención de 256.000 euros, casi lo mismo que le ha dado a los subsaharianos, africanos y personas de oriente medio solo que esta vez prima la cultura a la que se pertenezca y no el origen geográfico.
Para otro artículo dan las ayudas a los colectivos LGTBI, muy mimados por la exalcaldesa de Madrid Manuela Carmena y también cuidados por el alcalde actual, José Luis Martínez Almeida, con cientos de miles de euros en forma de subvenciones que caen en saco roto. Pero lo llamativo es que la administración de Almeida no solo no ha limitado este tipo de ayudas a este colectivo, sino que las ha incrementado en relación al último año de la administración de Carmena, más sensible con estos asuntos que la del PP en coalición con Ciudadanos.
Quien está a frente del Área de Gobierno de Familias, Igualdad y Bienestar es un concejal de Ciudadanos. Desde la administración se desliza que son áreas separadas y que cada uno la gestiona con cierto grado de independencia, pero lo cierto es que la administración de Almeida ha superado con creces a la de Carmena en materia de ayudas sociales, aunque sea bajo la gestión de José Aniorte Rueda.
En el caso de los subsaharianos, africanos e inmigrantes procedentes de oriente medio, quien ha recibido todo el dinero para gestionarlo entre estas personas en riesgo de exclusión social es la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), un viejo conocido del Ayuntamiento a quien han regado con subvenciones de este nivel en más de una ocasión. Sobre qué es a lo que se dedican, ellos detallan en su página web que «desde 1979 trabajamos por las personas refugiadas, apátridas y migrantes en situación de vulnerabilidad para que vean reconocidos y respetados sus derechos». Además de que en sus centros de acogida ofrecen «alojamiento, atención psicológica y jurídica a las personas refugiadas y apoyamos su integración social y laboral».
Aunque gran parte del dinero la utilizan para promocionarse en algunos casos. «Realizamos informes, campañas y hacemos llegar a la sociedad y a las instituciones la situación de las personas refugiadas. También denunciamos en los tribunales cuando se vulneran sus derechos», aseguran en su web.
Quienes deben recibir el dinero son aquellos que no tengan alojamiento o quienes no tengan recursos para poder vivir en algún lugar digno. En el documento al que ha tenido acceso MONCLOA.com se detalla que la escasez de recursos económicos es fundamental, aunque también se tienen en cuenta otros criterios como tener problemas psicológicos graves o que no tengan apoyo familiar en España, algo que se repite en muchas ocasiones en los inmigrantes de esta procedencia.
Con los gitanos, ocurre algo sensiblemente distinto. Quien recibe el dinero en este caso es una fundación de esta etnia llamada Fundación Secretariado Gitano. En este caso, el Área de Gobierno de Familias, Igualdad y Bienestar ha firmado un contrato al uso con ellos en el que se comprometen a hacer un seguimiento exhaustivo de dónde se gasta cada uno de los 256.000 euros que se han dejado en subvencionar a esta asociación gitana. En cualquier caso, en este supuesto no hay comparación inmediata posible con Carmena dado que en el año anterior la exalcaldesa no les dio ni un duro.