La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha afirmado este martes que el Ejecutivo catalán se está planteando relajar algunas restricciones, como ampliar horarios de la restauración y flexibilizar medidas en el deporte y las actividades extraescolares, pero ha rechazado levantar el toque de queda nocturno.
En rueda de prensa telemática tras el Consell Executiu, ha explicado que el Govern está analizando los datos epidemiológicos para decidir si se pueden levantar algunas de las medidas a partir de la semana que viene, y que entre este miércoles y viernes lo acabarán de decidir en función de cómo evolucionen estos datos.
Así, ha asegurado que están revisando las restricciones en la restauración, el deporte y las actividades extraescolares, pero ha descartado que el toque de queda se pueda levantar por ahora tal y como ha anuncia que estudia la Comunidad de Madrid: «En estos momentos no estamos aquí».
Budó ha defendido que se intentará flexibilizar esta medida cuando los datos lo indiquen, pero ha señalado que el estado actual de la pandemia no recomienda tomar esta decisión porque la tendencia a la baja todavía es «muy lenta», y ha pedido prudencia para evitar que la relajación de medidas provoque un aumento de contagios.
CONFINAMIENTO COMARCAL
Además, ha dicho que «probablemente no será fácil» que esta semana se decida levantar el confinamiento comarcal y ha anunciado que el Govern está trabajando para elaborar un calendario que fije la relajación de medidas según la evolución de la pandemia, como piden los sectores económicos.
Preguntada sobre si es partidaria de decidir las medidas para Semana Santa de forma conjunta entre las comunidades autónomas, Budó ha contestado que las decisiones se tienen que tomar en función de cómo evolucione cada territorio, ya que cree que probablemente la pandemia no tendrá la misma evolución en todo el Estado, y ha reiterado que la Generalitat tomará las decisiones que crea oportunas para Cataluña.
