Las nuevas medidas del Govern balear para contener la expansión del COVID-19 permitirán la apertura de terrazas de bares y restaurantes en Mallorca al 50 por ciento de aforo, con un máximo de cuatro personas por mesa y hasta las 17.00 horas.
Así lo ha anunciado la presidenta del Govern, Francina Armengol, durante la rueda de prensa posterior a la Mesa de Diálogo en la que se han tratado estas medidas, que comenzarán a aplicarse entre este sábado y el martes y estarán en vigor las próximas dos semanas.
Hasta ahora, la restauración sólo podía servir para llevar o a domicilio. La presidenta ha puntualizado que la última consumición en los bares deberá ser a las 17.00 horas aunque «se dará un margen para que la gente pueda salir».
Cabe recalcar que la restauración pedía terrazas abiertas hasta las 18.00 horas pero el Govern había propuesto hasta las 16.00 horas.
LAS GRANDES SUPERFICIES SEGUIRÁN CERRADAS EN FINES DE SEMANA
Por otra parte, el aforo en el comercio, tanto en pequeños locales como en grandes superficies, se incrementa del 30 al 50 por ciento, si bien el horario comercial sigue con la misma hora de cierre (20.00 horas). Además, las grandes superficies permanecerán cerradas en fines de semana y festivos.
Asimismo, se permitirán las reuniones sociales de seis personas tanto en interior como en exterior, pero solamente de dos núcleos de convivencia distintos. El toque de queda se mantiene a las 22.00 horas.
ACTIVIDADES DEPORTIVAS
En cuanto a las actividades deportivas, la principal novedad es la apertura al 30 por ciento de aforo de las salas de musculación -excepto aparatos de cardio- en gimnasios, con mascarilla y tres metros de distancia entre los usuarios. Se permite el uso de vestuarios con el mismo límite de aforo, pero no el uso de duchas.
Por otro lado, el número de personas que podrán participar en actividades físicas al aire libre pasa de seis a diez personas, incluyendo excursiones.
ACTIVIDADES CULTURALES, RESIDENCIAS Y OTROS ÁMBITOS
En actividades culturales se mantienen las medidas actuales -aforo máximo 50 por ciento en teatros y auditorios- pero con la novedad de que se permiten actividades en espacios no habituales. También se permiten congresos, reuniones de negocios y conferencias limitados a 50 personas en interiores.
No cambia el régimen de visitas y salidas en residencias, pero sí se permite reapertura de clubes de la tercera edad en condiciones estrictas: sólo podrán abrir para actividades dirigidas de máximo seis personas y sin servicio de bar. Finalmente, se mantienen suspendidas las ferias y fiestas populares.
Las medidas entran en vigor el sábado excepto las que afectan a las reuniones sociales y a los bares y salas de juego, que entrarán en vigor el martes, tras el puente.
ARMENGOL RECONOCE QUE SON CAMBIOS «MÍNIMOS»
Armengol ha reconocido que se trata de cambios «mínimos» respecto a las medidas actualmente en vigor pero ha insistido en la necesidad de efectuar una desescalada lenta para «no repetir errores como una desescalada demasiado acelerada como la del verano pasado».
«Nos hemos equivocado cada vez que hemos confundido desescalada con relajación», ha incidido la presidenta, que ha querido infundir ánimos a la población remarcando que «su actitud está salvando vidas». En detalle, ha precisado que estas medidas permiten que Baleares tenga una mortalidad tres veces menor a la de otros territorios.
«Hoy sabemos que las desescaladas son el momento más peligroso, el momento en el que un paso en falso desbarata meses de trabajo», ha recalcado. Armengol ha pedido «evitar ponerse en peligro» con gestos como «darse la vuelta» al llegar a un sitio con demasiada gente.
Por otro lado, Armengol ha advertido que si los casos repuntan «la toma de decisiones será inmediata».
LAS PATRONALES RECLAMAN AYUDAS DIRECTAS Y NO CRÉDITOS
Las patronales han expresado su apoyo a estas medidas por la necesidad de controlar la pandemia y han aprovechado la ocasión para referirse al fondo de 11.000 millones anunciado este miércoles por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para empresas afectadas por las restricciones.
La presidenta de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB), Carmen Planas, ha subrayado que quieren «que lleguen ayudas directas» y ha urgido a aclarar cuándo y de qué forma se articularán.
Planas ha avisado de que algunas empresas, «más que problemas de liquidez tienen problemas de solvencia». La presidenta de CAEB también ha vuelto a pedir a las administraciones rebajas de la presión fiscal.
Desde la Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (Pimem), su presidente, Jordi Mora, ha coincidido en que el nuevo fondo no se puede traducir en préstamos, y ha defendido que las ayudas prioricen «a las empresas más necesitadas, fundamentalmente pymes y autónomos».
Respecto a las medidas, Mora ha reconocido que les hubiera «gustado una desescalada un punto más rápida» pero ha querido «poner en valor que se empieza a abrir».
LOS SINDICATOS INCIDEN EN LA IMPORTANCIA DE TENER TEMPORADA
Desde los sindicatos, el secretario general de CCOO Baleares, José Luis García, ha apuntado que comenzar a abrir la actividad es una «buena noticia» porque «significa que hay gente que sale de ERTE».
Además, García ha dicho que en CCOO están «cómodos con el acuerdo de hoy» porque existe «una estrategia clara y definida a tres meses», y ha puesto el foco en la importancia de tener actividad en la temporada turística.
Por su parte, el representante de UGT Baleares, Alejandro Texías, ha expresado su «apoyo total» al Govern en estas nuevas medidas y ha coincidido en el objetivo de «llegar a una temporada decente».
Texías ha añadido que será necesario «estar muy pendientes de que en las terrazas se pueda mantener un control y que la gente cumpla con la norma».