El grupo parlamentario de Vox defenderá este martes en el Congreso una proposición no de ley para que la Cámara inste al Ejecutivo a desistir del, a su juicio, «abusivo» uso que hace del decreto ley y a devolver a este instrumento su función originaria, es decir, que se recurra a él únicamente «en circunstancias de extraordinaria y urgente necesidad», como establece la Constitución.
En la iniciativa que someterá a votación en la Comisión Constitucional, los de Santiago Abascal avisan de que el Gobierno de Pedro Sánchez está batiendo récords en la utilización «fraudulenta» de esta figura e invitan al Congreso a poner freno a lo califica como una «pésima y antidemocrática técnica legislativa» que contribuye, desde su punto de vista, a «vaciar de competencias» al Poder Legislativo.
Así, Vox hace un repaso de la utilización de esta figura legislativa desde la recuperación de la democracia en 1978 y concluye que Sánchez es el presidente que más ha recurrido a ella en sus dos primeros años de mandato.
El texto, detalla que en este periodo el Gobierno de coalición ha aprobado 62 decretos ley. Le siguen en el ránking los ‘populares’ Mariano Rajoy (46) y José María Aznar (44); figuran después los presidentes de la UDC, Adolfo Suárez (41) y Leopoldo Calvo Sotelo (37) y, al final, los socialistas José Luis Rodríguez Zapatero (31) y Felipe González (23).
Aunque en el caso de Sánchez influyen los meses de estado de alarma y de medias excepcionales por el coronavirus, Vox también extiende su crítica en términos cuantitativos y recrimina a Sánchez que «pervierta» este instrumento legislativo para modificar leyes que no requieren, a su juicio, de ninguna reforma urgente.
Así, por ejemplo, le reprocha que utilizara uno de los decretos ley con medidas sociales y económicas para hacer frente a las consecuencias la pandemia para incorporar al vicepresidente, Pablo Iglesias, a la Ejecutiva del Centro Nacional de Inteligencia.
En este sentido, también denuncia la «banalización» de esta herramienta al utilizarla para modificar el Código Civil en materia de patria potestad o para asuntos menores, como la modificación de la plantilla presupuestaria de la Orquesta Nacional.
Por todo ello, Vox considera «fundamental para la calidad de la democracia en España que el Poder Legislativo se pronuncie en contra de esta pésima y antidemocrática técnica legislativa» que, a su juicio, «subvierte la Constitución» y vacía de competencias al Legislativo hasta el punto de que, según alerta, puede acabar siendo «absorbido» por el Ejecutivo.
«Una nación que se precie no puede tolerar una anormalidad institucional implantada en su Estado de Derecho a causa de la mala praxis de los Gobiernos», subraya Vox en su iniciativa, en la que recalca que si el Congreso no se pronuncia expresamente contra este abuso se convertirá en «cómplice» del Gobierno en «el ejercicio fraudulento de los mecanismos constitucionales del Estado».