El CNI y Defensa corrigen a Margallo: España no es el tercer país que recibe más ciberataques

  • El exministro aseguró en 2014 algo que el propio CNI y el Estado Mayor consideraron que se había inventado.
  • Un miembro del CNI y otro del Estado Mayor de Ciberdefensa han asegurado que en todo caso rondaremos el puesto 14.
  • Los ponentes han asegurado que esos datos se deben a que España contabiliza bien los ataques, pero que los datos de Margallo eran falsos.
  • No, España no es el tercer país del mundo que más ciberataques recibe en el mundo. Son muchos los que han afirmado que es así. Incluido el exministro de Asuntos Exteriores José Manuel García Margallo, quien lo desveló en 2014 durante la presentación de un informe de ciberseguirdad. Pero este viernes, tanto Enrique Cubeiro, jefe del Estado Mayor del Mando Conjunto de Ciberdefensa, como Javier Candau, jefe del departamento  de ciberseguridad del Centro Criptológico Nacional (parte del Centro Nacional de Inteligencia), lo han desmentido.

    Son muchos los titulares que han afirmado en boca de otros que España ostenta un lugar privilegiado entre los países que más ataques cibernéticos recibe. Lo afirmó en 2014 el entonces ministro de Exteriores del Partido Popular. Pero es que según Bernardino Cortijo, director del Máster de Ciberdelincuencia de la Universidad Nebrija, en 2018 se han dado de nuevo esos valores. Algo que tanto Cubeiro como Chaandau no comparten en absoluto.

    «En todo caso somos los que mejor contamos (el número de ataques)», ha destacado el jefe del Estado Mayor. Para los expertos, no se trata de que España reciba muchos ataques, sino de que se detectan. Mientras que otros países ignoran que los están recibiendo, los servicios españoles al menos se dan cuenta de la ofensiva. Aún así, tanto Candau como Cubeiro han querido recordar que estas cifras son falsas con una anécdota que no deja en buen lugar al exministro popular.

    Según ha contado el jefe del Estado Mayor del Mando Conjunto de Ciberdefensa, cuando Margallo afirmó en televisión que España estaba en el tercer puesto, todos dentro del departamento se volvieron locos. «¿De dónde ha sacado ese dato?», se había preguntado Cubeiro. Nadie lo sabía. Pero el ministro lo dijo en público. Si somos la 14 economía del mundo, pues estaremos en un puesto similar en ciberataques», ha destacado el militar para desmentir la noticia que aún se codea con los titulares de grandes medios. «Creemos que se los inventó».

    Según las palabras de Margallo, el Gobierno ya había respondido a estos ataques en «tiempo real. También destacó que el Consejo Nacional de Ciberseguridad estaba preparando un plan para hacer frente a este tipo de amenazas de manera coordinada con instituciones internacionales como la UE y la OTAN. Ese plan lo llevan hoy en día los que desmintieron las palabras del ministro.

    Hace diez años, muy pocas potencias podían actuar en este nuevo escenario de guerra: el virtual. Según los ponentes, los países más activos en el mundo cibernético son Estados Unidos, China, Rusia, Corea del Norte e Irán. Algo que no sorprende demasiado. Cubeiro y Candau afirmaron que esta nueva «ciberguerra» afecta a todos los países. E incluso España ha sufrido un pequeño repunte de hostigamiento cibernético con el desafío independentista. Así como injerencias de terceros países. «Los que atacan siguen siendo los mismos», ha sentenciado Cubeiro.

    Aún así, los dos expertos en ciberseguridad (o «ciberinseguridad», como ellos lo definen) quisieron sacar pecho con los datos que avalan su labor. Según el Global Cibersecurity Index 2018, España es el séptimo país del mundo en ciberseguridad. Un dato que ha servido a los ponentes para asegurar que su labor está siendo más efectiva de lo que parece (a pesar de que no seamos el tercer país que más ataques cibernéticos recibe, tal y como se «inventó» José Manuel García Margallo).

    Tras esto, los responsables de la defensa virtual del país han querido recordar que su equipo, el que defiende a España de ciberataques, es muy heterogéneo. Cuentan con especialistas de todo tipo. Pero ellos no siempre son hackers contratados por sus habilidades, ya que el principal valor que buscan no reside en los conocimientos, sino en la forma de ser. Para los ponentes, la lealtad es un valor fundamental para ocupar un puesto en la ciberdefensa. Y aunque España fichó una vez a hackers exclusivamente por sus habilidades, aseguran que no es lo normal.

    «Cualquiera puede cambiar su forma de pensar y volverse contra el país», ha comentado Cubeiro. Así que prefieren gente leal que efectiva. Y lo hacen porque, según su experiencia, ya han vivido situaciones en las que uno de los miembros de su equipo estaba actuando como «espía doble», facilitando información a un lado y a otro.

    Pero a pesar de todo, la ciberseguridad está cada vez más en el punto de mira de los Estados. Los ciberataques tanto a empresas como a particulares han aumentado en los últimos cuatro años un 600%, según los datos del Centro Nacional de Protección de Infraestructuras y Ciberseguridad. Una tendencia al alza que con la llegada del 5G entrará en un nuevo escenario.