ERC defiende en su programa electoral de cara a los comicios catalanes del 14 de febrero su apuesta para buscar un referéndum pactado con el Estado, aunque no descarta la vía unilateral si el Gobierno mantiene su negativa a aceptarlo y cuentan con «un apoyo muy mayoritario».
El programa que ha presentado este viernes el vicepresidente de la Generalitat en funciones y candidato de ERC a la Presidencia, Pere Aragonès, en un acto telemático, recoge la estrategia de «vía amplia» que los republicanos plantean para avanzar hacia la independencia.
«Sabemos que solo hay una manera de ganar: trabajar para ser más, para ser más fuertes, para construir grandes mayorías que hagan todavía más inapelable e imbatible nuestro proyecto y prepararnos mejor en todos y cada uno de los ámbitos para volver y ganar de manera definitiva», reza el programa.
Los republicanos fijan cinco objetivos para concretar esta vía: superar el 50% de votos independentistas el 14F y en elecciones sucesivas; tejer grandes alianzas en torno a los grandes consensos de la sociedad; «forzar al Estado a resolver democráticamente» el conflicto y aceptar la amnistía y el referéndum; aprovechar todos los instrumentos para mejorar la vida de la población, y tejer alianzas internacionales para explicar la causa independentista.
En el programa ERC mantiene el referéndum pactado como «el mejor escenario, la opción que genera más garantías y reconocimiento internacional inmediato», por lo que lo sitúa como el escenario prioritario pero no el único.
Así, apuesta por no renunciar a ninguna vía para avanzar hacia la independencia y por prepararse por un eventual escenario de referéndum no acordado: «El Estado debe saber que su negativa a negociar un referéndum, si perdura en el tiempo, puede desembocar en una acción unilateral del independentismo», aunque detalla que exigirá un apoyo muy mayoritario y que dependerá de la acumulación de apoyos tanto electorales como de otros ámbitos.
En el acto, Aragonès ha insistido en que la mejor manera de aglutinar las demandas de amnistía y autodeterminación, que cree que son los grandes consensos de la población catalana, es que ERC gane las elecciones y lidere el próximo Govern.
RECONSTRUCCIÓN ECONÓMICA
Sin embargo, ha sostenido que mientras el independentismo se fortalece es necesario aprovechar todas las herramientas existentes para ser útiles para la ciudadanía, y ha presentado el programa electoral de ERC como «la guía de la reconstrucción» económica y social tras la pandemia del coronavirus.
«A la hora que hacer posible esta reconstrucción para la ciudadanía hoy, también trabajar para la república de mañana», ha argumentado, y ha situado los fondos europeos como un pilar central para esta reconstrucción.
En este sentido, ha anunciado que, si ERC preside el próximo Govern, creará un «comisionado Next Generation» que dependa directamente del presidente de la Generalitat y que sería el economista y concejal en Barcelona Miquel Puig para coordinar los proyectos de estos fondos de la UE.
El programa económico de ERC está enfocado principalmente a la reconstrucción tras la pandemia con el despliegue del Plan para la reactivación económica y la protección social ya aprobado por el Govern, y también aboga por desplegar una Agencia Tributaria de Cataluña «con capacidad para gestionar todos los impuestos».
Asimismo, plantea la necesidad de crear una banca pública, además de un fondo público privado que permita al Govern invertir y tomar participaciones en el accionariado de empresas con potencial para llevar a cabo proyectos estratégicos, y una deducción del IRPF temporal para captar talento e incentivar donaciones a la investigación.
«EXPULSAR EL ÍBEX 35»
Aragonès también ha defendido una transformación del tejido productivo catalán, como la renovación del sector del automóvil a partir de un modelo de movilidad sostenible, y «expulsar el Íbex 35 de los servicios públicos de este país».
En universidades, propone un sistema de precios y becas no discriminatorio, que tienda a la gratuidad, y promete aprobar una ley catalana de ciencia como «mecanismo constituyente de modelo de investigación de Cataluña».
Además, en el ámbito laboral los republicanos insisten en su propuesta de establecer un salario catalán de referencia para luchar contra la precariedad laboral, y en vivienda se comprometen a incrementar el presupuesto en políticas de este ámbito hasta alcanzar el 0,4% del PIB, aumentar el parque de vivienda social y «continuar trabajando la regulación de los precios del alquiler».
POLÍTICAS SOCIALES
En políticas sociales, ERC apuesta por un sistema educativo «transformador adaptado a las necesidades del siglo XXI», con un plan de educación digital e impulsar la innovación pedagógica, y por reforzar la atención primaria de servicios sociales con un plan de transformación digital de 7,7 millones de euros y una mejora de su financiación con 10,5 millones.
También plantea impulsar un nuevo modelo de atención integrada social y sanitaria, con un modelo centrado en la persona y una Agencia de Atención Integrada Social y Sanitaria, y un aumento de la financiación del sistema de salud.
FEMINISMO Y CAMBIO CLIMÁTICO
El programa enfatiza las políticas feministas y ERC promete crear una Conselleria de Igualdad y Feminismos para elevar las políticas de igualdad a este rango «para que las políticas públicas en la lucha contra la principal causa de discriminación en todo el mundo sean transversales y vayan acompañadas de la dotación presupuestaria necesarias».
Otro eje principal del programa es la lucha contra el cambio climático, en la que se conjura para impulsar «un pacto nacional para la transición energética por un modelo energético 100% renovable, de kilómetro cero, democrático y libre de oligopolios».
La propuesta de ERC también incluye medidas para el fomento del catalán en el mundo audiovisual y digital, y para velar por la aplicación de los programas de inmersión lingüística, para fortalecer la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCMA) y para luchar contra la corrupción y elaborar una ley de participación ciudadana «que ponga el ciudadano al centro de las decisiones públicas».