El vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, se ha fijado como objetivo evitar que la pandemia de Covid-19 en Cataluña cause una abstención elevada en las elecciones catalanas: «Queremos la participación más alta posible».
En una entrevista este domingo en ‘El País’, ha rechazado establecer un porcentaje mínimo de participación para considerar legítimos los resultados, algo que considera que sería «temerario».
Aun así, y tras la suspensión cautelar del aplazamiento de las elecciones por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), ha defendido que la mejor forma de «votar con seguridad y libertad» es posponer los comicios.
Además, ha rechazado aprobar un nuevo decreto, «sobre todo después de ver que los magistrados defienden razones de oportunidad política y no tanto la cuestión jurídica».
Y ha defendido que el Govern ha hecho «todo el trabajo necesario y cuenta con el aval de los expertos» para poder votar con seguridad, para lo que ha apostado por avanzar todo el voto que se pueda por correo.
Sobre si él votará por correo, ha dicho: «Es una de las cosas que estamos considerando, dependiendo de la situación epidemiológica. Habrá que asegurar que Correos, como se nos ha dicho, ofrece todos los medios materiales».
Ha sostenido que las personas que estén en una mesa electoral estarán protegidas porque se aplicarán los protocolos: «Pero insisto en que la mejor garantía es aplazar los comicios. Otra vez una decisión de los tribunales interfiere en decisiones de la política catalana».
«Nos encontramos con una Fiscalía que debería representar el interés general pero a veces representa el del Estado, y que pidió mantener la fecha del 14 de manera cautelar», ha lamentado.
Ha asegurado que los socialistas tienen un interés en que las elecciones se celebren el 14 de febrero: «El presidente Pedro Sánchez habla el día antes de que el tribunal se pronuncie y dice claramente que las elecciones no se pueden mover».
Y ha rechazado pactar con el PSC tras las elecciones, porque » ha dejado muy claro que nunca apoyará a un Gobierno que apoye la independencia» y uno liderado por ERC sí lo hará, ha dicho Aragonès.
En cambio, ha mantenido que la CUP puede encajar en ese eventual Govern, en el que considera que debe participar más, y sobre pactar con JxCat ha dicho: «No estamos en política para hacer lo que nos apetezca sino lo que es más útil para los ciudadanos de Cataluña. Hay opciones de construir un futuro para este país y eso sí me apetece».