El exceso de sal en nuestras comidas es uno de los principales causantes de hipertensión. La presión alta aumenta el riesgo de contraer enfermedades cardiovasculares o de sufrir un accidente cerebrovascular. Es por ello que resulta fundamental disminuir la ingesta de sodio. Es cierto que la sal en un ingrediente que no puede faltar en la cocina pero en muchos casos la utilizamos más de la cuenta. No obstante, existen formas de sazonar menos nuestros platos pero sin que pierdan el sabor. A continuación te brindaremos algunos trucos para que implementes a diario en tu cocina. Poniéndolos en práctica lograrás que tus comidas queden igual de deliciosas pero mucho más saludables. Reduciendo la cantidad de sal en tus platos te ayudarás a ti mismo y también a tus seres queridos.
1¿Por qué el exceso de sal puede aumentar nuestra presión arterial?
Según la Asociación Americana del Corazón el exceso de sal puede provocar retención de líquidos, lo cuál significa una carga adicional para el corazón y los vasos sanguíneos. Debido a la ingesta de sodio el corazón bombea sangre más intensamente a nuestros tejidos y por ende aumenta nuestra presión sanguínea. Por lo general, son nuestros riñones los órganos encargados de regular el sodio en nuestro cuerpo. Si hay poco sodio lo retienen y si sobra lo expulsan mediante la orina. Sin embargo, cuando la cantidad de sodio es muy alta los riñones no pueden actuar de forma eficiente y ese sobrante acaba acumulándose en nuestra sangre, derivando así en un considerable aumento de nuestra presión arterial. Las palpitaciones, mareos, dolor de cabeza constante o las hemorragias nasales son síntomas que pueden indicar hipertensión. Si padeces alguno de ellos acude de inmediato a tu médico de cabecera.