Gobierno Vasco baraja adelantar toque de queda a las 18.00 0 20.00 horas

El portavoz y consejero de Cultura y Política Lingüística del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria, ha asegurado este viernes que las medidas que se han aplicado en Euskadi para frenar el avance del coronavirus «son muy duras», aunque ha advertido de que aún se podrían tomar más medidas antes de llegar a un posible confinamiento domiciliario total, como la posibilidad de «establecer en las ocho o en las seis» de la tarde la limitación de poder estar en la calle.

En una entrevista concedida a Naiz Irratia, Zupiria ha recordado que el lehendakari, Iñigo Urkullu, ya ha solicitado «dos o tres veces» al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la posibilidad de modificar el toque de queda.

«Al lehendakari le gustaría que, al igual que han hecho en Francia, se pudiera establecer a las ocho o a las seis, en lugar de a las diez de la noche. Antes de llegar al confinamiento total que algunos proponen, el lehendakari cree que aún hay otras medidas que se pueden adoptar, y ésta puede ser una, modificar y adelantar la orden de irse a casa», ha explicado.

El portavoz del Gobierno Vasco ha señalado que la posibilidad de que se incrementaran los contagios tras el período navideño era «una de las cosas que podía pasar», como así ha ocurrido, aunque ha negado que «las medidas se suavizaran porque llegaban la Navidad.

«No ha sido así -ha destacado-. En Navidad hemos tenido medidas muy duras, y ha estado en manos de cada uno cumplirlas o no. La mayoría de los ciudadanos las hemos cumplido, y, aunque ha habido algunas excepciones, la mayoría las han cumplido de manera correcta».

Zupiria ha afirmado que a las administraciones públicas corresponde establecer las normas y explicarlas y hacerlas cumplir de la manera más adecuada, mientras que el sistema de salud «debe analizar permanentemente la expansión del virus en la sociedad» y, en base a eso, identificar y aislar en sus casas a las personas que pueden estar contagiadas «para que no contagien a más».

Asimismo, ha destacado que «el tercer pilar» en la labor de prevención ante el avance del coronavirus «está en manos de cada uno de nosotros», ya que consiste en «tratar de cumplir de la mejor manera posible esas medidas establecidas».

VACUNACIÓN

Por otro lado, Bingen Zupiria ha insistido en que las autoridades sanitarias en Euskadi han considerado que «lo más conveniente» en el proceso de vacunación contra el covid-19 es reservar algunas de las dosis recibidas por si hubiera «problemas de abastecimiento», y ha instado a «no politizar un debate que existe en el ámbito científico».

El portavoz del Gobierno Vasco ha reconocido que Euskadi «será hasta el domingo la última» comunidad autónoma en cuanto al número de dosis dadas, pero ha asegurado que, «a partir del domingo, esa situación cambiará y las tablas cambiarán».

«Este debate se está dando en todo el mundo. Algunos países ha optado por hacerlo de una manera, y otros de otra. Este es un debate científico, no político, y creo que todos haríamos bien en no politizar un debate que existe en el ámbito científico», ha reiterado.

Según ha explicado, los responsables de Osakidetza han considerado que «lo que toca es cumplir lo que dice el prospecto y adoptar las medidas necesarias para hacerlo cumplir», un criterio que comparte el Gobierno Vasco.

Zupiria ha afirmado que «se van a necesitar muchas vacunas» para llegar a la inmunidad comunitaria y que, «como no queda otro remedio, es totalmente necesario reforzar y acelerar los procesos de vacunación», aunque ha admitido que «el principal elemento que condiciona poner más vacunas es que en el mercado no hay más vacunas».

«Se acaban de admitir, están en fase de producción, y poco a poco se irán produciendo y llegando. Cuantas más marcas haya, y más dosis de cada marca haya, será más sencillo llegar a más gente», ha asegurado.

En todo caso, el portavoz del Gobierno Vasco ha advertido de que la vacunación va a ser «un proceso muy largo, de meses», porque tiene que llegar «a todo el mundo», y ha reiterado que los responsables del Ejecutivo y los de Osakidetza han considerado que el proceso se debe llevar a cabo «escalonadamente y de la manera más segura», y que por han tomado las medidas que han adoptado.