El vicepresidente y portavoz de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, ha rogado este jueves a los ciudadanos que limiten las salidas de sus domicilios a «lo esencial», que ha situado en concreto en ir a trabajar, ha llamado una vez más a evitar las reuniones con los no convivientes y ha pedido al Gobierno que prepare la herramienta para un confinamiento «breve e intenso» que, según ha augurado, podría ser necesario en los próximos días.
«Por favor, quédense en su casa, sean conscientes del momento», ha insistido Igea que ha llamado al Gobierno de la nación a «replantearse» el actual Estado de Alarma desde el convencimiento de que será necesario un confinamiento «breve e intenso» –«rápido, ágil, precoz» –ha añadido la consejera de Sanidad, Verónica Casado–» que permita cortar la transmisión del virus.
El vicepresidente de la Junta de Castilla y León ha reclamado en concreto al Gobierno central que prepare «la herramienta necesaria» para poner en marcha ese confinamiento «breve e intenso», ya que, como ha insistido en reiteradas ocasiones, podría ser necesario «en pocos días» ante la posibilidad de llegar a los 50 o 60 muertos diarios en la Comunidad si se mantienen las tasas de letalidad, sin descartar que esas cifras sean incluso superiores.
«Máxima cautela, la evolución puede ser peligrosa», ha compartido Verónica Casado que ha advertido de que no se puede «bajar la guardia» aunque se haya empezado la campaña de vacunación ya que no se ha alcanzado la denominada inmunidad de rebaño. Casado, que ha acompañado a Igea en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, se ha mostrado convencida de que la tercera ola va a ser «tan compleja o más» que la primera y la segunda, incluso juntas. «Me quedo en casa», ha pedido en reiteradas ocasiones a los castellanoleoneses.
Francisco Igea ha apelado además a la responsabilidad del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y del ministro de Sanidad, Salvador Illa, a los que ha pedido que «miren con calma» las curvas de evolución del virus en las últimas semanas –«la pendiente que hay», ha evidenciado con gráficos–.
«El Gobierno debe plantearse lo que han solicitado varias comunidades, debe tener la herramienta para tomar la determinación, si fuera preciso, de un confinamiento breve e intenso que permita cortar la transmisión del virus», ha defendido el vicepresidente.
El vicepresidente y portavoz de la Junta ha abogado en todo momento por ser «honestos» con los ciudadanos por parte de todas las administraciones públicas a las que ha llamado también a hacer el «máximo esfuerzo» para transmitir el «momento de dificultad» y el «momento dramático» que augura para las próximas dos semanas y que, según ha advertido, puede ser peor que marzo.
«No comunicarlo no sería honesto no es el momento del reproche sino de trabajar», ha sentenciado para recordar que la Junta de Castilla y León sigue adoptando medidas al respecto.