sábado, 23 noviembre 2024

Urkullu dice que la situación en Euskadi es de «extrema gravedad»

El Lehendakari, Iñigo Urkullu, ha alertado de que la situación de la pandemia del covid-19 en Euskadi «sigue siendo de extrema gravedad», por lo que afirma que es «imprescindible» seguir cumpliendo las medidas preventivas» y advierte de que el efecto de las fiestas y celebraciones navideñas se puede sufrir a lo largo de todo este mes de enero.

A través de un mensaje en las redes sociales, el Lehendakari recuerda que la Comisión Técnica del LABI mantuvo este pasado lunes una reunión de trabajo y ha sido convocada para este próximo viernes y el próximo día 11. En ese sentido, asegura que van a mantener una actitud de seguimiento y control diario de la pandemia, porque «la situación en Euskadi, y en nuestro entorno, sigue siendo de extrema gravedad».

En el marco de su mensaje titulado «Criterios sanitarios e información veraz a la ciudadanía», Urkullu dice que «es imprescindible» seguir cumpliendo las medidas preventivas. En primer lugar, indica, «porque así lo determinan las autoridades sanitaria» y, en segundo lugar, añade, «porque estas medidas se adoptan tomando en consideración y ponderando de manera equilibrada sus efectos socio-económicos y emocionales para el conjunto de la sociedad».

En tercer lugar, subraya, porque «tanto la información como las decisiones adoptadas se están comunicando al conjunto de la ciudadanía de forma detallada, diaria y con total transparencia».

El lehendakadi señala que las fiestas y celebraciones de Nochebuena, Olentzero, Navidad, Año Nuevo y Reyes «promueven un mayor encuentro y relación familiar y social». «Son un momento de máximo riesgo que puede provocar una aceleración de los contactos y contagios. El efecto de este período lo podemos sufrir a lo largo de todo este mes de enero, tal y como estamos viendo ha comenzado a suceder en muchos países de nuestro entorno», advierte.

Según indica, de momento Euskadi se mantiene en el Escenario Nivel 3 de Transmisión Tensionada en los indicadores de «Incidencia» o «Extensión». En relación con el indicador de «Gravedad» e «Impacto Asistencial», también se encuentra en el Escenario Nivel 3, y los indicadores de «Tendencia» y «Reproductividad» se sitúan ya en el Escenario Nivel 4.

Además, manifiesta que «en todos estos indicadores se ha constatado un claro estancamiento en la evolución positiva que se había experimentado desde principios de noviembre» y considera que «la evolución epidemiológica es negativa y preocupante». Esta tendencia, alerta, «podría confirmarse en los próximos días, afectando por tanto a los resultados de hospitalizaciones, utilización de UCI y, finalmente, a los fallecimientos».

Por ello, mantiene que «esta realidad objetiva no permite ningún tipo de relajación». «Seguimos en un contexto de incertidumbre y riesgo que exige una posición de máxima vigilancia y control. Sigue siendo prioritario y responsabilidad de todos contener y, en la medida de lo posible, reducir la transmisión del virus», advierte, para reiterar el llamamiento a que en este día de Reyes y en el fin de semana posterior se mantenga «el compromiso cívico con las medidas preventivas y de salud pública».

Sobre la limitación de reunión a seis personas, Urkullu dice que «está demostrado que uno de los factores que más contribuye a la transmisión del virus es el contacto con personas diferentes». Por ese motivo, defiende que «la medida preventiva más eficaz es reducir las relaciones al grupo de convivencia habitual, esto es, la ‘burbuja social'». «Fuera de ese grupo deberíamos evitar contactos continuados por periodos de tiempo superiores a 15 minutos y realizarlos siempre con mascarilla y manteniendo la distancia de metro y medio», insiste.

En cuanto a los confinamientos perimetrales, tras indicar que los confinamientos «reducen significativamente la movilidad y éste es un factor que propaga el virus de forma indudable», asevera que el confinamiento «se ha demostrado eficaz en la reducción de la expansión del virus porque éste viaja con las personas». «Si tenemos el virus y nos movemos, lo estamos transportando y podemos contagiar a otras personas. La norma es reducir al mínimo la movilidad», reitera.

En referencia al mantenimiento del toque de queda, Urkullu lo justifica porque, según dice, es la medida que se ha demostrado como «más eficaz en toda Europa» porque «reduce las horas de exposición a las relaciones sociales fuera de nuestra unidad habitual de convivencia» y «evita las relaciones de ocio nocturno, un contexto de máximo riesgo en el que se relajan las medidas de prevención, hay contactos más estrechos y se utiliza menos la mascarilla», además de porque «reduce el efecto negativo de las ‘no fiestas’ y ‘botellones’, que está demostrado son focos de contagio.

HOSTELERÍA

Por otro lado, subraya que «nadie ha responsabilizado a la hostelería» y asegura que las medidas que se han adoptado «afectan a toda la sociedad». «De hecho, lo que en todo momento se pretende evitar es el confinamiento domiciliario y la suspensión de todas las actividades», afirma, para indicar que la hostelería «puede mantener parte de su actividad y las instituciones mantienen todas las líneas de ayuda abiertas y, de hecho, se ha comprometido responder a todas las solicitudes de ayuda que se formulen».

En todo caso, recuerda que la hostelería «no es el único sector afectado», ya que «también se ha visto afectada la industria, el comercio, la logística, el turismo, la cultura y las actividades de ocio o deportivas. «Cumplir de forma estricta las medidas de prevención es la mejor forma de ayudar a todos estos sectores», afirma.

Por otro lado, recuerda que la práctica del deporte está permitida, pero precisa que «el problema es el deporte en grupo porque está demostrado que intensifica la difusión del virus. «Si hacemos deporte en espacios cerrados, el riesgo es mayor y sin mascarilla todavía mucho mayor. De hecho, la Organización Mundial de la Salud recomienda el deporte en determinadas condiciones: práctica individual, al aire libre y mascarilla», añade.

PRINCIPAL RIESGO

Iñigo Urkullu sostiene que «el principal riesgo se produce en los momentos en que nos relajamos». «Está demostrado que esta relajación se produce, sobre todo, en los encuentros con familiares no habituales, en los encuentros con las amistades, en las fiestas o celebraciones espontáneas», asegura, para insistir en que «el riesgo es el exceso de confianza, pensar que ‘a mí’ no me puede pasar» porque «el virus no tiene fronteras ni límites de ningún tipo, por eso es fundamental mantener el rigor y cumplir las medidas de prevención y auto protección».

Por último, sobre el avance de la vacunación explica que «es necesario garantizar la pauta de vacunación que requiere dos dosis, la segunda 21 días después de la primera». «Nos encontramos en el inicio del proceso y tenemos que asegurar las condiciones de vacunación segura para los colectivos prioritarios: personas mayores en las residencias, personal sanitario y socio-sanitario», precisa, para añadir que conforme se reciban las vacunas las van a ir dispensando a estas personas.

En todo caso, remarca que «la vacuna no resuelve el problema, no nos debemos relajar». «La mejor vacuna es la máxima prevención y autoprotección. Todas las medidas siguen en vigor y el compromiso colectivo se debe mantener: respeto a los aforos, ventilación, uso de mascarilla y distanciamiento interpersonal en todas las actividades», concluye.