La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha resumido el año 2020 como el del «dolor, la solidaridad y la gratitud» y ha reconocido que ha sido «difícil para todos» aunque ha celebrado que la pandemia «no ha paralizado a la Comunidad de Madrid».
«Las palabras que definen el año que termina no pueden ser otras que dolor, extenuación, solidaridad, responsabilidad y gratitud. La pandemia del Covid-19 ha ensombrecido cualquier actuación política o de gestión», ha trasladado Ayuso este martes en la Real Casa de Correos en un balance del año 2020.
Ha explicado que es el año del «dolor», por todos «los que no están, por miles de familias rotas que, además, no han podido despedir a sus seres queridos»; «extenuación» como descripción del esfuerzo de millones de personas en el combate contra la pandemia.
«Solidaridad» de «tantos que se lanzaron a ayudar a quienes no conocían pero que los necesitaban y «responsabilidad» porque «es la clave para evitar más contagios» y «gratitud» porque, tanto como gobernante y como ciudadana, es la palabra con la que puede «expresar su deuda» con una sociedad «que ha sabido comportarse digna y altruistamente en la situación más difícil que ha tocado vivir».
La dirigente autonómica ha reconocido que ha sido un año «extremadamente difícil para todos», pero cree que si se está dispuesto a afrontar «cada día los retos» que hay por delante, no le cabe «ninguna duda» de que la Comunidad de Madrid «seguirá siendo una de las regiones más competitivas de la Unión Europea».