Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con EUROPOL, la Policía Danesa, la Policía Judiciaria de Portugal, el BKA de Alemania, los Carabinieri de Italia, la Policía Nacional de Colombia y el FBI de Estados Unidos, han logrado desarticular una organización criminal que, presuntamente, se dedicaba al robo de material médico en hospitales.
La banda, que operaba en toda Europa, llevaba a cabo la sustracción y posterior venta de material médico especializado y cuyo valor total se estima en más de 60 millones de euros.
Siete personas han resultado detenidas en esta operación, individuos que conformaban células itinerantes dedicadas, principalmente, al robo de endoscopios. Este tipo de útiles médicos tienen un gran valor económico en el mercado.
La organización criminal se encargaba de robar este tipo de material médico para su posterior envío a países de Sudámerica, principalmente Colombia. Los hacían llegar a través de agencias de paquetería. Una vez en el sur de América, un conglomerado de empresas se encargaba de dar cobertura legal al material robado. De esta forma, buscaban reintroducirlo en el mercado, tanto en Estados Unidos como en Europa.
Asimismo, durante las investigaciones, la Policía pudo detectar actividades ligadas al blanqueo de capitales con transferencias a favor de sociedades radicadas en Panamá.
ROBOS EN CENTROS MÉDICOS DE TODA EUROPA
La investigación dio comienzo a principios de año. Agentes de la Policía Nacional fueron los que detectaron la existencia de una organización criminal que estaba centrando su actividad en el robo de endoscopios en numerosos hospitales, tanto en España como en el resto de países del viejo continente. Esto suponía un gran perjuicio a nivel patrimonial e irreparables daños a la Sanidad Pública.
Durante varios meses de investigación, los agentes pudieron constatar que la actividad delictiva de la banda tenía lugar en hospitales, policlínicas y centros de salud de España, Francia, Portugal, Alemania y Dinamarca.
Para llevar estos actos ilícitos, los miembros de la organización conformaban células itinerantes de entre tres y seis miembros que de desplazaban por toda Europa. Estos se hospedaban en alojamientos de alquiler durante largas temporadas, de hasta seis meses, y hacían viajes de miles de kilómetros para perpetrar los robos.
Una vez sustraían los efectos, estos eran remitidos por la organización a Colombia a través de diferentes empresas de paquetería. En este país eran recogidos por otros miembros de la organización. Esta otra parte de la misma era la encargada de volver a introducir en el mercado el material médico sustraído a través de diferentes empresas e incluso portales web, quienes lo vendían a diferentes países como Estados Unidos y otros países europeos. También se dedicaban al blanqueo de capitales con los beneficios que obtenían de su actividad ilícita.
COOPERACIÓN INTERNACIONAL
Tras haber analizado todos los datos recopilados a lo largo de la investigación, los agentes de la Policía Nacional pudieron comprobar la deslocalización de las actividades operativas y mercantiles de la organización criminal. Esto hizo que fuese necesario activar los mecanismos de cooperación internacional. De esta forma las diferentes agencias como EUROPOL, INTERPOL, FBI y los cuerpos policiales de diferentes países han tenido que trabajar de manera conjunta para la desarticulación del grupo criminal.
En el pasado mes de febrero tuvo lugar la primera fase de la operación, la cual se culminó con la detención de seis personas. Estas, cuatro en Dinamarca y dos en España, integraban una célula que estaba operando en Europa a lo largo de los últimos meses. De hecho, varios de los robos que han tenido lugar en España se asocian a esta banda delictiva.
Los arrestados eran los presuntos autores del robo de material médico en la localidad danesa de Herning por un valor de 2 millones de euros. Además, también habían cometido varios robos en Dusseldorf (Alemania) por valor de más de 1,5 millones de euros. Les fueron interceptados varios paquetes que, próximamente, iban a ser enviados a Colombia a través de empresas de mensajería.
SEGUNDA FASE DESARROLLADA EN COLOMBIA
Tras la primera fase desarrollada en Europa, las investigaciones continuaron para tratar de localizar la estructura de la organización criminal ubicada en Colombia. Esta era la que se encargaba de la recepción de los envíos procedentes del viejo continente.
Los agentes detectaron un conglomerado de empresas bajo cuya cobertura legal se encargaban de reintroducir de nuevo el material robado en el mercado, tanto en Estados Unidos como en otros países europeos. Al mismo tiempo, se pudieron encontrar evidencias de actividades ligadas con el blanqueo de capitales, hallando transferencias a favor de sociedades radicadas en Panamá.
Esto llevó a que la semana pasada se desarrollase la segunda fase de la operación en Bogotá (Colombia). En el dispositivo se desplazaron agentes de la Policía Nacional, la BKA de Alemania y los Carabinieri de Italia, que contaron con el apoyo de EUROPOL e INTERPOL Colombia. La intervención se saldó finalmente con un total de 22 registros y la recuperación de 28 equipos médicos, cuyo valor en el mercado es superior a los 50.000 euros.
Los agentes de la Policía Nacional continúan con las pesquisas de investigación. Su objetivo es el de identificar y desmantelar por completo las estructuras de la organización.
VARIOS HOSPITALES ESPAÑOLES AFECTADOS
La organización criminal actuaba en toda Europa. En España, se vieron afectados numerosos centros, entre los cuales se encuentran cinco hospitales madrileños. Uno de los últimos hospitales de la capital en sufrir los robos fue el Hospital Infanta Sofía, en el pasado mes de junio.
Meses antes, otros hospitales de Palencia, Castellón y Salamanca también fueron objeto de la sustracción de endoscopios. No obstante, este tipo de robos se han ido perpetrando en todo el territorio nacional desde años. Esto se debe al gran valor que tienen en el mercado los aparatos para la realización de endoscopias, valorado cada uno de ellos entre los 12.000 y 20.000 euros.
Este material médico es muy delicado, tal y como aseguran los expertos, lo que exige que el transporte se realice de manera correcta para evitar que pueda dañarse. Por ello, los detenidos utilizaban agencias de transporte de confianza para el traslado de los efectos robados con rumbo a Colombia.
Estos equipos médicos son difíciles de vender en el mismo país, ya que se encuentran identificados por una serie. Sin embargo, sí tienen una fácil salida lejos de su país de origen o si se vende a clínicas privadas. Esta circunstancia es la que era aprovechada por la organización desarticulada por la Policía Nacional, que reintroducía el material médico robado en otros países.
Las investigaciones permanecen abiertas tanto en Europa como en Sudamérica. Esto hace que pueda haber más detenciones de miembros de la organización criminal en las próximas semanas.