Ciudadanos ha presentado una Proposición no de Ley para la Protección y Defensa de las Mujeres Activistas Pro-Derechos Humanos en Irán. La formación liderada por Albert Rivera ha mostrado su absoluto rechazo al trato que reciben las mujeres defensoras de los derechos humanos en este país, normalmente perseguidas y encarceladas por mantener sus convicciones.
El partido lleva tiempo trabajando en esta propuesta, aunque la han publicado ahora, coincidiendo con la polémica desencadenada por la petición de una delegación de Irán. La comitiva iba a reunirse con la Comisión de Exteriores e incluyó en su protocolo una prohibición que no ha gustado a varias formaciones en la Cámara: las diputadas españolas no pueden saludar a los hombres iraníes.
EL POLÉMICO “NO” SALUDO
Esta petición protocolaria fue denunciada por Vox, quien se negó a asistir a la reunión con la delegación por considerar que las condiciones eran “inaceptables”. A la muestra de rechazo del partido de Santiago Abascal no ha dudado en sumarse Ciudadanos, quien, además, ha ido más allá presentando la citada proposición no de ley para debatirla ante la Comisión de Exteriores.
La Cámara Baja no tardó en hacerse eco de la noticia y planteó una diplomática solución: no habría saludo, ni para hombres ni para mujeres. La reunión con el director general para Europa del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Mahmoud Barimani, empezaría directamente con ambas delegaciones sentadas.
Según fuentes parlamentarias consultadas por Europa Press, el saludo protocolario nunca había estado previsto. A pesar de ello, la Cámara envió a los diputados el comunicado emitido por Irán para informar de que los hombres tienen prohibido tocar a las mujeres. El presidente de la Comisión, el socialista Sergio Gutiérrez, pidió al Congreso que se comunicara a las autoridades iraníes de que no se efectuaría dicho saludo.
Sin embargo, Vox siguió manteniendo su posicionamiento de no asistir al evento. Abascal reafirmaba en Twitter que no acudirían al evento porque estaban “cansados de los que quieren vivir entre nosotros sin respetar nuestra manera de vivir, sin asumir nuestras leyes, sin respetar nuestras costumbres.”
Una queja a la que se sumó Ciudadanos, al menos parcialmente. La formación se negó a reunirse con ellos porque no solo no estaban de acuerdo con la prohibición del saludo, sino que tampoco estaban conformes con la política del país. Melisa Rodríguez, portavoz del partido en la Comisión de Asuntos de Exteriores, no acudió a la cita, aunque sí lo hizo la vicepresidenta de la Comisión, María Luisa Alonso, miembro de Cs, por tratarse de una representante de la Cámara.
PROPOSICIÓN NO DE LEY
La propuesta que ha presentado Ciudadanos establece varios puntos que pretenden acabar con la persecución y discriminación de la mujer en Irán. La proposición no de ley, que se debatirá en la Comisión de Exteriores, pide que principalmente el Gobierno de España actúe para combatir estos comportamientos.
La diputada y responsable de la Mujer en Cs, Patricia Reyes, cree que el primer paso es que el Gobierno de España condene y denuncie estos hechos. «Un país feminista y democrático tiene que posicionarse ante un problema así». Y no solo a nivel nacional, ya que Reyes insiste en que «habría que llevarlo ante los organismos comunitarios para que Europa presionara» con el fin de revertir la situación.
En el primer punto de su proposición, Cs insta al gobierno de España a que “condene públicamente la persecución, hostigamiento, condena y encarcelamiento de mujeres iraníes por sus protestas y actos en contra de la imposición de llevar velo públicamente.” Entre los motivos que añade el partido para sustentar esta premisa están los antecedentes de mujeres, como el caso de Vida Movahed. La activista se reveló contra las autoridades quitándose el velo (hijab), obligatorio en Irán. La acción, seguida por más mujeres, le costó su detención durante más de un mes y una sanción.
Las medidas que propone Ciudadanos no solo se centran en la acción del Gobierno español. El partido también apela directamente a las instituciones europeas e internacionales. En consecuencia, pide impulsar en el seno de la UE medidas conjuntas para que Irán asegure “el respeto a la libertad de expresión, asociación y asamblea, así como el tratamiento justo, equitativo y respetuoso con los derechos humanos de las personas en custodia y detenidas.”
Asimismo quieren defender ante las instituciones comunitarias que se amplíen y mantengan “las sanciones específicas contra altos cargos del régimen iraní por violaciones de los derechos humanos”. Por último, también pretenden elevar ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas “la situación en la que se encuentran las mujeres activistas pro-derechos humanos en Irán para llevar a cabo una investigación de los aspectos que deberían reformarse para su protección.”