La investidura de Pedro Sánchez ha fracasado este jueves y desde el PSOE no tienen claro que el candidato socialista vuelva a intentarlo en septiembre. De momento, desde la formación apuntan a que «ya no es candidato» y a Unidas Podemos, por haber truncado un posible acuerdo de izquierdas.
Así ha respondido el secretario general del PSOE en el Congreso, Rafael Simancas, al ser preguntado en rueda de prensa sobre si será posible cerrar un acuerdo con Unidas Podemos en septiembre tras fracasar, por segunda vez, su candidatura a la Presidencia del Gobierno.
Simancas ha recordado que Sánchez era aspirante a La Moncloa «hasta hace unos minutos» y que ahora ya no lo es, y que lo que se abre es el proceso que establece el artículo 99 de la Constitución, es decir, que si en dos meses –a partir de la primera votación– ningún candidato obtiene la confianza del Congreso, el Rey disolverá las Cortes y convocará nuevas elecciones, con el refrendo de la presidenta del Congreso.
Eso sí, ya ha advertido de que en septiembre habrá «otros problemas» y que, entonces, las posibilidades de sumar más apoyos es menor. «La oportunidad de que este país tuviera un presidente socialista se acaba de malograr hace unos minutos», ha lamentado.
CRITICAN LA AMBICIÓN «DESMEDIDA» DE PODEMOS
El dirigente socialista ha censurado que una mayoría formada por «las tres derechas», Unidas Podemos y el independentismo «más intransigente» ha arrojado al país a una situación de «bloqueo», de «traición» al interés general y «da la espalda a la voluntad democrática de los españoles».
Los españoles no tienen el Gobierno que habían votado, el que necesitan y el que merecen por la ambición desmedida e irreal de Unidas Podemos y la irresponsabilidad de la derecha, que ha vuelto a anteponer su interés por dañar al PSOE al deber patriótico de facilitar un Gobierno para España», ha dicho.
Simancas ha centrado sus críticas sobre todo en los de Pablo Iglesias, a los que ha acusado de no haber querido «nunca» un acuerdo con el PSOE y al que ha afeado que haya frustrado por segunda vez la posibilidad de que el país tenga un Gobierno progresista «aún a riesgo de que la derecha salga beneficiada».