Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea se han comprometido este jueves a coordinar mejor sus estrategias contra el coronavirus para tratar de contener la segunda ola de la pandemia, que en una semana ha dejado más de un millón de europeos contagiados, y han centrado el foco de sus prioridades en avanzar hacia el reconocimiento mutuo de test rápidos para viajes y en prever la campaña de vacunación que esperan poder iniciar en «meses».
«En estos tiempos difíciles la cohesión y solidaridad importan más que nunca, llamamos a los europeos a cuidarse y a cuidar de los demás», ha pedido el presidente del Consejo europeo, Charles Michel, tras la videoconferencia de líderes que ha concluido tras algo más de tres horas con nuevos compromisos pero sin decisiones concretas.
«Las pruebas y el rastreo son claves para limitar la propagación del virus. Es crucial porque nos permite controlar mejor la situación», ha continuado Michel, para quien es necesario trabajar para ser «más eficientes» en lo que a test se refiere y al seguimiento de los contagios porque aún si se logra una vacuna con garantías en los próximos meses esta «no resolverá todo por sí misma».
Así las cosas, los líderes están de acuerdo en que es necesario reforzar las estrategias de pruebas rápidas, rastreo y campaña de vacunación porque será ese el «camino obligado para retomar el control» tras los confinamientos parciales que muchos de los Estados miembro han empezado a imponer para tratar de frenar los contagios.
La segunda ola está siendo «brutal», en palabras de Michel, y está llevando al límite a los servicios de Salud de los socios de la UE, un escenario ante el que los mandatarios creen que la UE será más fuerte si actúa unida.
Por ello, los jefes de Estado y de Gobierno europeos han hablado de cómo asegurar un reparto equilibrado y justo de las vacunas si finalmente alguna de las candidatas en las que trabajan diversos laboratorios da las garantías suficientes en materia de seguridad e inmunidad.
Los líderes, que tienen previsto celebrar estas videoconferencias periódicamente mientras no se frene el avance del virus, quieren seguir discutiendo para tratar de hacer converger las opiniones sobre los colectivos que deberán acceder en primer lugar a la vacuna, por ejemplo los grupos de población más vulnerable o los trabajadores esenciales.
El objetivo, ha dicho Michel, es «armonizar lo máximo posible» las campañas de vacunación y preparar la logística para garantizar que la vacunación se realiza de manera «eficaz», a pesar de la complejidad que pueda acarrear las condiciones de conservación o transporte de las dosis, por ejemplo.
«Tengo buenas noticias, los Estados miembro tendrán todos vacunas al mismo tiempo y bajo las mismas condiciones», ha apuntado la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, al término de la videoconferencia, después de recalcar también la necesidad de «asegurar una validación rápida» de las vacunas logradas.
Los líderes también son conscientes de los esfuerzos necesarios en lo que a comunicación y transparencia se refiere para evitar que la desinformación desincentive la vacunación entre la población.
220 MILLONES PARA EL TRASLADO DE PACIENTES
Al margen de la discusión de los jefes de Estado y de Gobierno, la presidenta de la Comisión Europea, sí ha dado a conocer una serie de novedades tangibles para mejorar la gestión de una pandemia que está mostrando en su segunda ola una evolución «muy grave».
En primer lugar, ha anunciado que Bruselas destinará 220 millones de euros a costear el traslado de pacientes entre países de la UE allá donde sea necesario. Pero para conseguirlo, ha advertido de que necesita de las capitales «buena información» y que mejoren el intercambio de datos sobre la evolución de la pandemia.
«Cuantos más países compartan información, mejor podremos coordinar la respuesta», ha afirmado la alemana en la rueda de prensa posterior a la videoconferencia junto con el presidente del Consejo europeo.
Por otro lado, la jefa del Ejecutivo comunitario ha avanzado que la institución pondrá en marcha una plataforma que reúna a los especialistas que están asesorando a los Gobiernos europeos y a las instituciones comunitarias.
«Este intercambio de conocimiento científico al más alto nivel es de gran importancia», ha destacado sobre una iniciativa que pretende servir de ayuda para el intercambio de buenas prácticas, mejorar la comprensión de la enfermedad y evitar que la propagación de mensajes «confusos».
En la misma línea, ha anunciado que la Comisión creará un formulario de viajeros común. Empezará, ha dicho, con una fase piloto en noviembre y la intención es que esté plenamente operativo a finales de año. Von der Leyen ha explicado que once Estados miembros han desarrollado ya formularios de viajeros propios, pero no están conectados entre ellos.