El portavoz del Comité de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé, ha acusado este lunes al Gobierno de Pedro Sánchez de pretender «desmembrar» los derechos de los españoles con la declaración del nuevo de estado de alarma, que considera «ilegal», «abusivo» y «desproporcionado», y espera que el Tribunal Constitucional fije criterio resolviendo el recurso planteado por la medida excepcional de marzo. De momento, el propio líder del partido, Santiago Abascal, ya ha avanzado que Vox recurrirá al Tribunal Constitucional este segundo «estado de excepción encubierto».
En rueda de prensa en la sede del partido en Madrid, Buxadé ha defendido que el nuevo estado de alarma aprobado este domingo en un Consejo de Ministros extraordinario vuelve a incurrir en todos y cada uno de los «defectos» e «ilegalidades» del que se declaró el pasado mes de marzo.
SI EL TC HUBIERA HABLADO, LAS COSAS ESTARÍAN MÁS CLARAS
Por ello, ha dicho que en su partido espera que el Tribunal Constitucional decida «mover los papeles» y dictar pronto una sentencia, apuntando que si el Alto Tribunal ya se hubiera pronunciado sobre el recurso al primer estado de alarma presentado por Vox ahora los españoles tendrían «las cosas más claras» y no vivirían «en la absoluta inseguridad» en la que, a su juicio, les ha colocado el Gobierno.
El eurodiputado de Vox sostiene que este segundo estado de alarma vuelve a romper la igualdad de los españoles en el ejercicio de los derechos fundamentales, lo que considera «absolutamente inconstitucional». «No puede ser que los derechos a la libertad de circulación, de residencia, de reunión o de manifestación sean distintos en Madrid, Barcelona, Cádiz o las Islas Canarias -ha denunciado-. Los españoles somos iguales en derechos y deberes».
Buxadé ha cuestionado, en concreto, que el Gobierno establezca restricciones al movimiento generalizado entre comunidades autónomas pero no entre fronteras, lo que le lleva a afirmar que al Gobierno le sigue pareciendo «bien» que 2.000 marroquíes lleguen a las Islas Canarias, a través de las mafias de tráfico ilegal de personas, o que sigan llegando argelinos a las costas de Almería.
En este punto, defiende que no existe ninguna razón de ciencia, jurídica, epidemiológica o sanitaria para que un ciudadano pueda viajar a Bruselas pero no a Barcelona. «No hay ninguna razón -ha insistido-. Es el capricho, porque este Gobierno se siente muy fuerte porque ahora ya no son solo 18 ministros, son 18 y el ministro de la oposición», en alusión a Pablo Casado.
LA CONSTITUCIÓN NO HA CAMBIADO
También ha criticado por «inconstitucional» que el Ejecutivo pretenda extender este estado de alarma durante seis meses o el PP hable de ocho semanas, cuando la Constitución establece que inicialmente éste sólo puede durar un máximo de 15 días y eso «no se ha cambiado». Otra cosa es el periodo por el que el Congreso decida prorrogarlo.
Asimismo, ha criticado al Gobierno por pedir a los medios de comunicación y la ciudadanía en general que no utilicen la expresión «toque de queda» y que opten por «restricciones de movilidad nocturna.
Buxadè también se ha quejado de que el Gobierno vaya a permitir la celebración de las elecciones catalanas previstas para febrero porque, según ha denunciado, los partidos van a tener que pedir permiso al gobierno autonómico «separatista» para poder celebrar sus mítines. «La democracia está seriamente en riesgo», ha alertado.
Preguntado si Vox cree realmente que el toque de queda pueda ser efectivo para frenar los contagios, Buxadé ha respondido que «al margen de la forma jurídica, no». Para los gobiernos socialcomunistas o la Venezuela de Maduro lo jurídico es irrelevante, pero en la Europa de las democracias es lo relevante y si la Constitución españoles no lo permite, no se puede hacer», ha manifestado.
A este respecto, ha reiterado algunas de las ‘recetas’ de Vox para atajar esta segunda ola del coronavirus: test masivos en las calles, aislamiento médico de aquellas personas afectadas, seguimiento y rastreo, «y el resto de los españoles a seguir trabajando». «No podemos quedarnos en casa con miedo, que es lo que quieren», ha concluido.