Vox cree que el presidente del PP, Pablo Casado, se ha convertido en un miembro más del Gobierno de Pedro Sánchez tras el debate de la moción de censura, con el cargo de «ministro de la oposición», y no ve necesario acercar posturas entre los dos partidos una vez que cada uno ha dejado clara su postura.
Así lo ha expuesto este lunes en rueda de prensa el portavoz del Comité de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé, quien cree que en la votación de la moción de censura quedaron «las caretas fuera» y todos los partidos quedaron «perfectamente retratados». «Pedro Sánchez con Bildu y con ERC; y Casado con Sánchez y con Iglesias», ha definido.
Buxadé cree que Casado se unió al Ejecutivo con su discurso e inauguró «el Ministerio número 19». «En el Congreso se vio la España de blanco y negro, de esos que quieren mantener el statu quo, de Kitchen, el CGPJ, Bárcenas, los indultos a los separatistas y la desigualdad entre españoles», ha acusado.
«ENLOQUECIDOS» CON EL DISCURSO DE ABASCAL
Frente a ello, ha ofrecido la alternativa «de ilusión y esperanza» de Vox para hacer posible «otra España». Y ha repasado los principales puntos del discurso del presidente de Vox, Santiago Abascal, en la moción de censura, por el que «muchos enloquecieron» pero que a juicio ofreció un proyecto para cambiar el país.
Entre ellos ha destacado una superación del Estado de las autonomías para garantizar los mismos derechos y obligaciones a todos los ciudadanos, el fin del gasto político supérfluo, «tolerancia cero» con la inmigración ilegal o libertad de opinión. Además, ha negado que se pueda tachar a Vox de antieuropeista y ha explicado que el partido está en contra de un proyecto federal de la Unión Europea en el que los estados pierdan soberanía.
Las caretas cayeron y solo hay dos posibilidades: que todo siga igual y el miedo se imponga en las calles, universidades, colegios, empresas, jueces y medios de comunicación; o una España alegre, de alternativa, ilusión, prosperidad, empleo, empresas, que crece y que se representa a sí misma como una gran nación en Europa, Bruselas y el resto del mundo», ha expuesto.
En este sentido, ha asegurado que Vox tiene muy claro su camino «y no va a cambiar nada» ni habrá ningún acto de «revancha ni venganza» hacia el PP en aquellas regiones en las que gobierna gracias a su voto; aunque ha reconocido irónicamente que ahora será «más difícil» porque la interlocución no será con un partido político sino «con un nuevo ministro».
A POLÍTICA NO SE LLEGA A HACER AMIGOS
A su juicio, no es necesario que Vox y el PP acerquen posturas de ninguna manera ni rebajen la tensión tras la moción de censura. Los dirigentes de Vox seguirán trabajando haciendo una oposición «dura y leal» a sus votantes.
Buxadé también ha restado importancia al sentimiento de Abascal de haber sido traicionado por Casado y ha destacado que a la política no se llega «a hacer amigos». «Hemos venido a defender España, a luchar por un futuro mejor y si alguien quiere dejar de ser tu amigo y además lo hace en público no hay más consideraciones», ha sostenido.
El propio Abascal había reconocido este lunes no haber tenido ningún contacto con Casado tras el debate en el Congreso y ha reconocido que no le apetece hablar con él ni cree que sea necesario.