El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, prepara un plan de medidas económicas para ayudar al sector de la hostelería a paliar los efectos de las medidas restrictivas adoptadas para evitar la propagación de la pandemia de la COVID-19 y propondrá el próximo lunes, en la Conferencia de Presidentes, al jefe del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, que confeccione «un plan de rescate» para el sector en el ámbito nacional.
Así lo ha indicado en respuesta a una pregunta del presidente del PP Aragón, Luis María Beamonte, en la sesión plenaria de las Cortes autonómicas, donde ha avanzado que los Departamentos de Economía, Industria y Hacienda están elaborando un plan con medidas como ayudas directas, concesión de avales, ayudas a la transformación digital y para el pago de alquileres.
«Vamos a hablar con los ayuntamientos para, de manera coordinada, tomar medidas a la mayor urgencia», ha continuado Lambán, quien ha dado por descontado que también será necesario apoyar a otros sectores, como el comercio y la cultura.
En cuanto al plan nacional, Lambán, junto con otros presidentes autonómicos, planteará a Sánchez que tome medidas para la hostelería relativas a los ERTE, la rebaja de la presión fiscal y otras.
Lambán ha pedido a Beamonte que se dirija a la sociedad para pedir a los ciudadanos que sean responsables porque gran parte de los casos se producen en casa, «por la irresponsabilidad de conductas individuales». Ha asegurado que «Aragón no se desmorona» por esta crisis.
El presidente de la Comunidad Autónoma ha señalado que el Gobierno regional no ha escatimado recursos materiales para luchar contra la COVID-19 y que no ha dudado a la hora de tomar medidas. Además, sigue poniendo «las luces largas» y está trabajando «intensamente» para elaborar el Presupuesto de 2021 y participar en el Fondo Europeo de Recuperación. «Habrá Presupuestos en tiempo y forma, como el año pasado», ha continuado Javier Lambán, cuya tercera medida es, precisamente, elaborar un plan de rescate para los sectores más afectados, como el hostelero.
El jefe del Ejecutivo autonómico ha reconocido que se tendría que haber reformado la Ley de Sanidad de 1986 y ha comentado que «la situación es complicada» en el conjunto de España, «muy complicada» en Aragón, insistiendo en que «no se están escatimando medios». Ha defendido el último Decreto Ley para «actuar con celeridad ante el disparo de los datos en las tres capitales de provincia» y ha apuntado que se realizan 297 pruebas de detección por cada 1.000 habitantes y se conoce el origen del 66 por ciento de los casos detectados. Además, «están funcionando los servicios sociales y la educación».
Luis María Beamonte ha echado en cara a Lambán «la falta de agilidad de su Gobierno» y le ha urgido a presentar los Presupuestos, subrayando que el aumento de contagios «genera más incertidumbre» si cabe y que el peso de la responsabilidad recae sobre el Ejecutivo regional. «¿Cómo va a paliar el Gobierno las nuevas afecciones que se han generado?», ha preguntado, llamando la atención sobre la hostelería.
«Lo que ha quedado claro es que es necesario tomar medidas restrictivas», ha continuado Beamonte, quien ha emplazado a Lambán a poner en marcha ayudas para el tejido productivo y a implementar un «plan de choque» para la Atención Primaria, aumentar el número de rastreadores e intensificar el control de las cuarentenas.
Ha dicho que el Ingreso Mínimo Vital «es un fiasco» y también «hay un déficit importante» en la resolución de expedientes de ayudas al alquiler, y tampoco se ha aprobado el borrador de los Presupuestos de 2021. «Con este tipo de actitud están dinamitando la solvencia de su Gobierno», le ha espetado.
Luis María Beamonte ha dicho que Pedro Sánchez «los ha dejado solos» pero «ante un problema global la solución no puede ser particular». Ha concluido afirmando que el Gobierno regional debe actuar con urgencia «y sin atajos de dudosa legalidad».
