Mercedes Gallizo, que fuera directora de prisiones con José Luis Rodríguez Zapatero, se ha mostrado a favor de que el exministro Eduardo Zaplana salga de la cárcel debido a su estado de salud. Gallizo se une de esta manera a la petición en el mismo sentido realizada por el expresidente del Gobierno José María Aznar.
A través de Twitter, la exdirectora general de Instituciones Penitenciarias se sumó a la petición al juez que mantiene en prisión preventiva a Zaplana “para que considere su puesta en libertad, por razones humanitarias, hasta que sea juzgado”.
Gallizo cree que si el juez no lo ha hecho así es porque la vida del exministro de Trabajo y expresidente de la Generalitat valenciana no corre peligro. A pesar de ello, sostiene en favor de su posición que “una leucemia es una enfermedad importante”.
A estas consideraciones, quien tuviera bajo su responsabilidad la gestión de las prisiones recuerda que “la prisión preventiva es una medida excepcional” por lo que cree que, ante la posibilidad de que se produzca un empeoramiento del estado de salud de Zaplana, “debería valorarse con la humanidad a que todas las personas tienen derecho, la aplicación de otra medida con parecidas garantías”.
La petición del expresidente del Gobierno, José María Aznar, se produjo en Valencia. El expresidente manifestó que “el Estado de Derecho y la Justicia no son incompatibles ni con la compasión ni con cierto sentido humanitario”. Aznar defendió que esta posición la realizaba “con independencia de las decisiones judiciales, que se respetan” y recordó que Zaplana ya ha cumplido muchos meses de prisión preventiva. Por estas razones, el expresidente cree que la situación “debería resolverse”.
Además del apoyo a la petición de Aznar por parte de Mercedes Gallizo, hay otra política que se ha situado al respecto. Se trata de la diputada del Partido Popular, Beatriz Escudero. También a través de Twitter ha recordado las palabras de Aznar y ha entrado en la polémica abierta con la comparación con el preso etarra Josu Uribetxebarria Bolinaga.
Escudero, formada en Derecho y que fue magistrada suplente en la Audiencia Provincial de Segovia, escribió en la red social que “el asesino condenado Bolinaga salió de la cárcel por razones médicas y Zaplana, investigado, es mantenido en prisión con leucemia”.
La comparación con Bolinaga ha sido usada en las redes y por algunos comentaristas políticos desde el momento en que la titular del juzgado de instrucción número ocho de Valencia, Isabel Rodríguez Guerola, no atendiera las peticiones del ministro de ser puesto en libertad debido a su estado de salud.
Uribetxebarria Bolinaga, que fue uno de los secuestradores del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara y también condenado por el asesinato de tres guardias civiles, fue puesto en libertad condicional debido a que padecía un cáncer generalizado, terminal y en situación irreversible en agosto de 2012. Bolinaga falleció en enero de 2015.
EL MÉDICO DE ZAPLANA
Las palabras de Aznar se produjeron después de que uno de los médicos del Hospital La Fe de Valencia que trata Eduardo Zaplana, defendiera también la libertad condicional para este. El doctor Guillermo Sanz calificó la situación del exministro de inhumana.
El doctor Sanz también vertió sus reflexiones en su cuenta de Twitter, donde dijo que “los médicos entendemos de derecho y los jueces no entienden de medicina y menos de leucemia o trasplante. Sin embargo, todos deberíamos entender de humanidad”. Tras esta frase apostilló que “lo de Eduardo Zaplana es inhumano”.
Posteriormente Sanz argumentó a favor de su postura que “simplemente defiendo, porque debo respetar mi juramento hipocrático, la vida de los pacientes a los que trato”. El médico subrayó que mantiene esta postura “independientemente de sus ideas políticas, género, religión, raza o nivel económico y cultural” de los mismos.
El doctor Guillermo Sanz es el autor de un informe clínico con el que la defensa de Zaplana solicitó su puesta en libertad el pasado verano. La petición no consiguió convencer a los jueces. La fiscalía se opuso a la puesta en libertad del exministro.
Eduardo Zaplana está siendo investigado por los presuntos delitos de pertenencia a asociación ilícita y a grupo criminal, cohecho y prevaricación, fraude en la contratación y fraude fiscal, falsedad documental, tráfico de influencias y blanqueo. La investigación se realiza sobre las comisiones pagadas en concesiones públicas de plantas eólicas o Inspecciones Técnicas de Vehículos (ITV) en la etapa en la que Zaplana era presidente de la Generalitat de Valencia. El sumario todavía está declarado secreto y a la espera del resultado de varias comisiones rogatorias.
Zaplana se encuentra encarcelado en la prisión valenciana de Picassent desde el pasado 24 de mayo. El argumento del doctor Guillermo Sanz aportado para pedir la puesta su puesta en libertad señala que un retraso en horas en el diagnóstico y tratamiento adecuados “comprometería seriamente” la vida del político. En contraposición a este planteamiento, la decisión judicial de mantenerle en prisión se fundamenta en el hecho de que Zaplana lleva un seguimiento médico permanente.