El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha culpado de la judicialización de la situación política de Cataluña a los dirigentes independentistas que «vulneran sistemáticamente» resoluciones judiciales, en velada alusión al ya expresidente catalán Quim Torra.
En la sesión de control del Congreso, y a instancias de la CUP, Sánchez ha dicho valorar «razonablemente bien» su estrategia para tratar de destensar la política catalana. «Este Gobierno planteó abrir un diálogo territorial para cerrar la crisis política en Cataluña y en ello está -ha explicado-. Hemos planteado una agenda progresista de 44 puntos que tiende la mano a todos los partidos políticos para superar esta etapa negra de confrontación entre catalanas y entre Cataluña y el conjunto del país».
A su juicio, esa «agenda del reencuentro» abre un proceso de negociación y de diálogo sobre Cataluña y reduce la conflictividad, pero ha querido dejar claro que el Gobierno no se puede poner «en los zapatos de los responsables catalanes que sistemáticamente están vulnerando las resoluciones judiciales.
TOCA ABRIR UNA NUEVA ETAPA
Tras recalcar que el PSOE siempre va a actuar con «profundo respeto al pueblo catalán», ha expresado su deseo de que las próximas elecciones catalanas permitan abrir «una nueva etapa presidida por la concordia y el reencuentro».
La diputada de la CUP, Mireia Vehí, ha replicado que la mesa de dialogo sobre Cataluña pactada por el Gobierno y ERC sólo ha dado tres resultados: una foto (de la única reunión celebrada), una presidente inhabilitado (Quim Torra) y unas elecciones «precipitadas» por el Poder Judicial (la inhabilitación de Torra).
Vehí ha remarcado que las responsabilidades políticas del Gobierno «no han desaparecido» con el coronavirus y ha desdeñado propuestas como los indultos de los presos del procés, que «son soluciones individuales, pero no colectivas».
ARRANCA LA PRECAMPAÑA
En su opinión, el independentismo volverá a ganar las elecciones catalanas y que «el inmovilismo» de su Gobierno sólo llevará a convocar «nuevos embates», como el referéndum del 1 de octubre de 2017 o el «tsunami» que tomó el aeropuerto del Prat hace una año. «La nueva ola del independentismo va a volver cuando las circunstancias sanitarias lo permitan», ha anunciado.
«Parece que estamos ya en precampaña y hemos asistido a su mitin –ha contestado Sánchez–. Ustedes vinieron (al Congreso) a importar el conflicto político, pero nosotros estamos por resolverlo».
