Los calamares. Ese manjar del mar que hace las delicias tanto de una tapa de bar como de un entrante en las celebraciones familiares. Se pueden elaborar de mil y una formas, pero la más popular en España es a la romana. Ya sabes, con los calamares gordos y tiernos rebozados crujientes pero jugosos por dentro. Seguro que alguna vez te has comido un bocata de calamares y te han sabido a gloria. ¿Quieres aprender cómo rebozar los calamares para que queden como los mejores de Madrid? Te mostramos los secretos que hay detrás de esta aparente sencilla receta de calamares rebozados rápidos.
1LOS INGREDIENTES, CLAVES PARA CONSEGUIR EL REBOZADO PERFECTO DE LOS CALAMARES
Como en toda receta, lo más importante son los ingredientes. Es imprescindible contar con ingredientes de calidad para asegurarnos que nos queda un buen alimento. En el caso de los calamares rebozados, aunque se tenga la tentación de utilizar los que vienen ya congelados, lo ideal sería que utilizaras calamares frescos, y además enteros. Son más engorrosos para limpiar, sí, pero el resultado merece la pena.
Por otra parte, los huevos habrán de ser también frescos para que den todo el sabor. En cuanto a la harina que vamos a utilizar, se ha de hacer un mix entre harina de trigo y maizena para que nos quede el rebozado crujiente en el exterior y tierno en el interior. Evita siempre los polvos para rebozar, pues incluyen otros elementos menos deseables. En cuanto a los elementos líquidos, se puede sumar o bien leche de vaca o bien cerveza, según el toque que se le quiera dar. Con ambos el resultado es un calamar muy jugoso y un rebozado uniforme.
